Capítulo 30: Relación

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Ya llevaban un tiempo saliendo. Ya habían tenido una cita, se juntaban constantemente y ahora pareciera que estaban en la fase de mensajearse a cada hora. Razón por la cual Perry tuvo que salir de hurtadillas de su casa en plena noche para que el sonido de su teléfono no despertara a nadie. Finalmente termino hablando con Doof por videollamada por la pantalla de su guarida.

Había perdido la noción del tiempo, no sabían cuánto tiempo llevaban hablando.-¿Qué hora es?.-dijo revisando el reloj, después de sentir un cansancio.-¡Es tan tarde!-exclamó sin creer que habían estado hablando tanto tiempo.- Creo que será mejor ir a dormir.- dijo bostezando. Por su parte, Perry el ornitorrinco también parecía tener sueño.- Hasta mañana, Perry.-se despidió. Como respuesta el ornitorrinco se despidió con su mano.

Después de unos segundos se cortó la conexión. Perry se estiró desperezándose antes de marcharse. Casi de inmediato, recibió un mensaje de Doof que decía: "Buenas noches" seguido de un emoticón que lanzaba un beso.

Perry le respondió de vuelta: "Buenas noches." Pensó que también podría mandarle un emoticón. Desplegar la pestaña y vio las opciones que había. Entre tantos, su atención se detuvo en un corazon. Lo pensó por unos segundos.- "¿No sería mucho?" De igual forma considero el que mandó Doof, seguramente también pensó en ello. Aunque probablemente ahora se debe estar lamentando por haberlo mandado impulsivamente.

El ornitorrinco recordó y se dijo que no debía pensar mucho esas cosas. Solía complicarse de más. Finalmente, mandó el mensaje con el corazón. Esperaba que al menos eso le hubiera sacado una sonrisa a Doof.

Se levantó de su asiento para ir de vuelta a su hogar, pero se detuvo en seco cuando escucho un ruido que provenía en la puerta principal. Se acercó lentamente con la guardia en alto. Una vez al lado de la puerta oprimo el boton para que esta se abriera. Sin embargo, bajó ligeramente la guardia cuando vio que se trataba de Peter el panda.

Suspiro pesadamente al suponer que seguramente Peter había visto que estaba hablando con Doof, sobretodo este último mensaje.

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De vuelta a su casa, casi por inercia Perry ingresó a la habitación de Candace y subió a su la cama. Suspiro mirando a ningún lugar en específico entre tanta oscuridad. Extrañamente no habia tenido ningun problema con Peter como en su último encuentro, simplemente hablaron acerca de lo que tanto temía que supiera. Sin embargo y por mas que le doliera, estaba de acuerdo con el panda en un cierto punto.

A fin de cuentas, Peter le había admitido que quería quitarle a Doof, porque era muy especial para él. Después de todo y a diferencia de su enemigo, Doof le hablaba de todo, incluso más de lo normal. Sin embargo, cuando se dio cuenta de que lo eligió a él, se rindió. Aunque termino pensando que fue lo mejor, ya que después de todo Doof era una persona y él un panda. A pesar de que aun le gustaba, estar con él hubiera sido extraño.

En ese punto, sinceramente Perry no sabía qué responderle a Peter. Desde el principio habían acordado con Doof no decirle a nadie, sin embargo sólo abordaban el hecho de que era extraño de explicar. Perry nunca había pensado más allá de eso. Desde que ambos empezaron a salir juntos, incluso desde que descubrió sus sentimientos por Doof, el ornitorrinco estaba feliz que no había visto realmente la situación y su relación. Era cierto. Era extraño y bizarro. Él era un ornitorrinco y Doof una persona.

Ya decía él que siempre encontró extraño que no se interesará amorosamente de nadie, ya sea un agente de la O.S.B.A. u otro animal que haya conocido antes. Y que su única relación que mejor funcionaba -aparte de la familia- era con Doof.

-"pero.. y si, ¿Había una forma de...? ¡No!"- se dijo mentalmente antes de que sus ideas lleguen más lejos. Sabia que habia una forma, ya lo habían probado y a pesar de que solo unos minutos,solo pudo concluir que odiaba ser humano. Y aunque hubiera una manera de que el efecto del humanizador fuera permanente -cosa que no lo emocionaba.- y aunque estuviera dispuesto de hacer eso por Doof, no estaría bien. No solo porque le gustaba ser un ornitorrinco sino porque no podía fingir ser algo que no era. No era un humano, aunque muchas veces se sentia asi, mas que un animal.

Incluso si llegara a hacerlo apesar de todo, sabía que implicaba eso. Si ya no era un ornitorrinco, ya no estaría con su familia, y si lo intentaba explicar de alguna forma tendría que revelar cierta información. Y seria casi lo mismo si Doof decidiera convertirse en ornitorrinco. No sería justo para ninguno

La relación de él y Doof siempre fue buena, ahora sentía que estaba mejor, pero más complicada. Aunque se querían mucho, empezaba a creer que no podían llegar más lejos de lo que habían llegado ahora.

Suspiro desanimadamente sin importar que Candace se percatara de su presencia, seguramente lo echaría de su cama si despertara. Perry se acurruco y volvió a suspirar afligido.

Como agente secreto a veces reprimía sus sentimientos, cuando no se tratase de su hogar, y estaba más que claro que con Doof, pero jamas habia sido tan sincero como la única vez en que ambos estaban en la rueda de la fortuna y dijo a su manera: Te quiero.

El Agente OrnitorrincoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora