06- Eres linda

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Durante la noche no pude conciliar el sueño, solo pensaba en Vance, en sus manos, sus expresiones y ese jodido cabello rubio, no quería admitirlo, pero era jodidamente guapo. Me encontraba camino a la puerta, no sin antes avisarle a mi nana que ya iba a la escuela, esta me respondió con un "lindo día", camine unos cuantos minutos cuando una mano  jalo de mi brazo haciendo que volteara bruscamente a ver a la persona, era nada más y nada menos que mi madre.

Eilyn, cariño, solo quiero que estemos bien por favor, sal conmigo, remediemos todo el tiempo perdido.- de sus ojos salían gotas cristalinas, sus manos temblaban sobre mi piel, no podía moverme del shook.

Cuantas veces tengo que decirle que se aleje de ella, jodida loca.-Vance se hizo presente en la escena, tomó la mano de la mujer y la quitó con fuerza, haciendo que esta diera un paso hacia atrás.

¿Quién es el cariño?.-la mujer trató de acercarse nuevamente a mi, pero Vance tomó mi mano y empezamos a correr.

Fue un tramo de 7 minutos en el cual Vance sostenía mi mano con fuerza, como si me fuera a perder, su expresión era seria, solo miraba al camino, mientras yo lo miraba a él.

Siempre tengo que estarte salvando, no?.- inicio la conversación aún sin apartar la mirada del camino.

Lo siento.- fue lo único que pude decir, tal vez para el era molesto estar siempre atrás de mi, salvándome.

No tienes porque, me agrada.-me miró dándome una sonrisa tierna, sentí como mis mejillas se calentaban.

Vance, no creo que sea adecuado que nos vean tomados de la mano.-algunos chicos pasaban a un lado de nosotros y nos miraban extrañados.

¿Crees que me importa lo que vayan a pensar esos imbéciles?.- y como si lo hubiera retado, apretó más su agarre, era agradable sentir el tacto de Vance, era agradable tenerlo cerca.

Una vez que llegamos a la escuela, me dejo en mi salón de clases y se despidió diciendo que esta tarde le ayudaría con unos temas que el no entendía, solo me limite a decir que estaba bien, una vez que se fue entre a mi salón, donde se encontraba Robin y Finney realizando una tarea, me acerque a ellos y estos inmediatamente me pidieron la tarea resuelta, solo reí para después darles el cuaderno, ellos no pararon de darme las gracias, como si les hubiera salvado la vida.

La hora del almuerzo llego, los tres íbamos conversando animadamente cuando un brazo se posó sobre mis hombros.

Hey, recuerda que tienes que ir a mi casa después de clases para ayudarme con unos temas.-Vance termino de hablar y se fue rumbo a la cafetería con unos amigos suyos.

¿Acaso te esta amenazando ese imbecil, Eilyn?.-la voz de Robin hizo que volteara a verlo de inmediato.

No, por supuesto que no, solo nos llevamos un poco bien.- me apresuré a decir, no quería que Robin se metiera en problemas.

¿Segura que solo se llevan bien? parece otra cosa.- Finney me miró con cara un tanto pícara.

Estoy segura de que solo nos llevamos bien Finny, deja de pensar otra cosa.-golpeé su brazo suavemente.

La hora de salida llegó rápidamente, me encontraba despidiéndome de mis amigos en la entrada de la escuela, tenia que quedarme a esperar a Vance, solo rezaba al cielo que no apareciera mi madre para acosarme, miraba a todas partes en busca de la presencia de esa mujer, estaba tan concentrada que no me había dado cuenta que Vance hopper se encontraba atrás de mi riéndose.

Dios, eres linda, pareces una suricata.-sus palabras hicieron que pegara un salto del susto, lo miré con enojo y golpeé su brazo.

Idiota, porque no me avisaste que habías llegado, ¿cuánto tiempo estuviste atrás mío?.- este seguía riendo mientras acariciaba la parte donde le había pegado.

Lo suficiente, pero bueno suricata, es momento de irnos, vamos.-Tomó mi mano, importadole poco que algunos chicos nos miraran y empezarán a cuchichear.

El tramo de 10 minutos fue agradable, hablábamos sobre las clases que habíamos tenido en el día y sobre la tarea que nos habían dejado, fue entonces cuando el silencio se apoderó de la conversación, solo veníamos al frente y meseabamos nuestras manos, creo que podría acostumbrarme a esto. Vance me guió hasta una casa, para después soltar mi mano y buscar sus llaves en el bolsillo de su pantalón, la casa era color blanca, tenía un jardín muy bien cuidado con una decoración minimalista, en la puerta estaba tallada la palabra "bienvenidos", una vez que abrió la puerta pude ver lo que sería la sala, en las paredes colgaban fotografías de Vance y quien supongo que es su madre, los sillones eran color cafés, en la mesa del centro había un florero con unos tulipanes blancos, era una casa demasiado linda y limpia. Vance me ofreció tomar asiento y lo hice, él desapareció por una puerta que daba a la cocina, podía ver su espalda por la gran abertura que tenía la cocina, giré mi cabeza hacía las fotos, la cual una captó mi atención de inmediato, era Vance de unos 3-4 años con un gato pequeño, sonreí ante tal ternura, fue entonces cuando aquel gato de la fotografía apareció, era un gato adulto color gris y blanco, se restrego en mis pies en busca de cariños, a los cuales no me negué y acaricie su cabeza suavemente, recibiendo de respuesta unls ronroneos.

Vaya, le agradas a esa cosa peluda.-Vance me extendió un vaso con agua simple, lo tomé y le di un gracias como respuesta.

¿Porqué le dices así? Es tu gato, no?.-deje el vaso en la mesa y continúe acariciando al gato.

Se supone, pero él maldito solo se la pasa mordiendo mis pies cuando duermo.-tomó al gato y empezó a acariciarlo a lo cual el gato escapo de su agarre y subió las escaleras corriendo.

Bueno, tal vez si dejas de decirle cosa, podrías agradarle.- Vance tomó asiento a mi lado y empezó a sacar unos libros de diferentes asignaturas, iba a ser una tarde larga...

unbearable memories (Vance Hopper)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora