Ven aquí y ámame ~ VegasPete (Omegaverse)

Extra 2

— ¿Esta listo?

La voz del alfa suena a sus espaldas. Es gruesa y siente su olor intensificarse con cada segundo que pasa. Pete tiembla con solo oírlo. Voltea a verle y esta si camiseta, con el torso marcado al aire.

—Y-yo — Vegas alza una ceja, totalmente impaciente. — Si-sí, está bien.

Con los ojos vidriosos, el más alto se le acerca y los latidos de Pete se aceleran. Le quita la camiseta con mucho cuidado, besando su hombro desnudo.

—Tienes que estar seguro.

—Lo estoy — aclara con voz quebrada.

—Puedo hacerlo solo si no estás seguro.

—Te dije que sí.

Rondando los ojos, el alfa lo recuesta en la pequeña cama de su habitación. Pete gime al sentir el calor del más alto cubrirle, se siente seguro ahora.

—Vegas — chilla al momento de que el nombrado pasa sus labios por su estómago plano.

Los besos que el más alto le da por todo el cuerpo, hace que se pierda, fijamente únicamente en lo bien que se siente.

—Veg-Vegas — vuelve a decir su nombre, en un gemido ahogado.

Vegas ha comenzado a prepararlo con los dedos, evitando gemir cuando toda húmeda entrada del omega. Muerde su cuello suavemente, tratando de no romper la piel, por más que quiere.

— ¿Listo?

Pete asiente.

— ¿Seguro?

Traga saliva, pero vuelve a asentir.

Vegas sisea, entrando en Pete, y él quiere gritar de tan bien que se siente. El omega, solo abre los labios en grande, nada saliendo de ellos.

[...]

Porsche seca las lágrimas de su castaño amigo, sonriendo triste.

—Tienes que decirle, Pete.

El omega niega, repetidas veces.

—Me da miedo.

—No debería. Es su hijo. Es un alfa Pete, no sabes cómo se va a poner cuando se entere de que no le dijiste.

—Pero-

—Mira, ahí está él. — apunta con la cabeza, hacia donde el pelinegro estaba con su propio alfa, Kinn — Tu dile, y si él o te quiere escuchar, entonces ese ya es problema de él.

—Porsche, no-

—Ve, Pete — le empuja tirándole un beso a Kinn.

El alfa castaño camina con y a sonrisa hacia su omega, viendo a Pete pasar a su lado.

Pete camina a Vegas y este, sin darse cuenta del más bajo, avanza hacia la cafetería. A Pete no le queda más que seguirle. Observa al pelinegro sentarse en una mesa, solo, ve a Khun acercarse pero ''el niega con la cabeza, el rubio tuerce la boca y se aleja, sin insistir más.

—Ehh — se sienta en la silla del frente.

El alfa ni siquiera se molesta a alzar la mirada, con el aroma sabe perfectamente quien es.

—H-hola — con nerviosismo, Pete dice. No sabe cómo empezar.

Vegas prosigue comiendo la fruta con yogurt de su plato, el que trajo de casa.

—Vegas... yo...

Otra vez, parece no hacer caso. Pero, lo que no sabe, es que toda su atención está sobre él, desde que lo olio, entrando a la cafetería.