¡Que Inesperado!

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— Flashback —

Estaba cansada de asistir a clases para poder ser una "buena esposa", clases de modales, clases para saber vestir, clases de cocina... Y así podía seguir todo el día.

Mis horas libres fueron resumidas a nada y mi madre insistía en buscar la perfección y aunque siempre me esfuerzo en tratar de complacerla siempre encuentra algo mal en mi...

No sabía a quién se le pudo ocurrir semejante estupidez de matrimonio por conveniencia pero por mi se podía ir al infierno...

—Años después —

¡Hoy la conocí! Es sumamente hermosa, las palabras no alcanzan para describir tal belleza pero hay un único problema, ella no es mi compañera y yo no soy la suya;  aunque una parte de mi está fascinada con ella mi veela no está conforme.

Lo he hablado con mi madre pero desafortunadamente ella no opina lo mismo que yo, ve a Fleur como un medio para lograr lo que quiere, desde pequeña ha querido que siga sus pasos y logré lo que ella no pudo, ser la jefa del clan... Y aunque al inicio me resistí y trate de revelarme años de tortura y malos tratos me enseñaron que debo hacer lo que me pide si quiero seguir con vida...

— Fin del Flashback —

POV. Elaine

Aún me entristecía pensar lo mucho que me afectó mi madre y lo mal que estuve cuando decidí ser una perra sin sentimientos con tal de cumplir con sus estándares. No podía seguir de aquella manera pasando sobre la gente que quiero, se que me puede costar la vida lo que estoy a punto de revelar pero estoy dispuesta a afrontarlo.

Me levanté y me dirigí a la habitación de Fleur tocando tres veces la puerta. Cuando me abrió pude verlo, esa sonrisa falsa nuevamente adornaba su rostro...

— Hola, estás preciosa — dije en tono coqueto.

— Gracias, también te ves muy bien Elaine — dijo mirándome de arriba a abajo

— ¿Vamos? — dije extendiendo mi brazo con galantería.

Cuando bajamos todas las miradas fueron hacia nosotras pero una en particular tenía a mi veela entusiasmada...

— Volveremos en un par de horas mamá — escuché a Fleur decir y sin más salimos de ahí.

— Espero no te moleste que hiciera reservación en un restaurante muggle  — dije nerviosa, todo el valor que había reunido se esfumó por completo.

— ¡Por supuesto que no! Vamos o llegaremos tarde — Fleur realmente sonaba emocionada y aunque hace un mes esto me hubiera emocionado actualmente no me hacía sentir nada.

Nos aparecimos en un callejón desierto y sin decir una palabra caminamos de la mano hacia el restaurante, al llegar proporcione mi nombre y un hombre de aspecto amable nos hizo pasar a una habitación apartada del resto de las mesas justo como lo había pedido más temprano.

— No te asustes, tenemos que hablar y pensé que esto era más adecuado... — Fleur me veía desconfiada pero aún así se sentó; estuvimos en un silencio incómodo hasta que llegó la cena.

— Te noto extraña y muy tensa, ¿Me dirás qué es lo que pasa? — dijo tomando mi mano sobre la mesa, era ahora o nunca Fleur tenía que saber la verdad.