Cap.2 CONOCERNOS.

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Después de una semana empecé a ir a la escuela...

Voy caminando por los pasillos de la escuela fumando un cigarro mientras veía a las chicas basicas queriendo parecer perfectas, ellas también me miraban con odio y asco, en mi mente me veía golpeandolas fuertemente pero esta vez mis problemas de irá no hicieron mucho.

Se me pasaron las clases rápido aunque con un poco de incomodidad.

Llegué a mi casa y lo primero que hice fue ir mi cuarto y ponerme un suéter de rayas negras y rojas que me hacia recordar a Kurt Cobain; me puse un pequeño short y me acoste en mi cama.

Me sentia un poco observada así que voltie a mi puerta que estaba ligeramente abierta, estaba el, el chico que atendía mi padre, me recorrí un poco para sentarme en la cama.

-____: ¿Qué haces?, ¿Qué estas viendo?

-Tate: No podía evitar no ver tus cicatrices. Empezó a ver las cicatrices de mis muslos y de mis muñecas.

-Tate: Parece que realmente quieres morir, si realmente quieres hacerlo debes de hacerlo a lo largo. Dijo mientas hacia un ejemplo con una navaja imaginaria en sus muñecas.

-____: okay, gracias por el dato pero no deberias estar aquí. Dije mientra me acercaba a la puerta para cerrarla pero no pude evitar figarme en sus ojos que parecían vacíos.

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Estaba en mi cuarto apuntó de salir a hacerme un café cuando vi que Tate iba a la cita con mi papá, vi como pasó a la oficina de mi padre desde mi habitación.

Estaba tratando de reprenderme a mi misma pero estaba llena de curiosidad así que espie un poco y sólo lo escuchar decir que no se había tomado sus pastillas porque temia que su pen* no sirviera porque había conocido a alguien... Estaba claro que el sabia que los estaba escuchando, me miró de reojo y me hizo una leve sonrisa.

Ahora saliendo de su cita nos veíamos en mi cuarto, el me platica como se habia hecho sus cicatrices y yo a el, no se si fue exagerado tenerle confianza tan rápido pero me gusto, me encantaba.

Escuchábamos Nirvana mientras hablabamos de lo que amamos y odiamos hasta que mi padre entro a mi habitación he hizo que Tate saliera.

TATE LANGDON Y TÚDonde viven las historias. Descúbrelo ahora