Beneath the milky twilight

Día 3: Bebé falso

Harry corrió a su pequeño local de regalos. No estaba escapando. ¡Claro que no! Solo que Riddle podía ser demasiado intenso cuando se lo proponía. Y vaya que estaba decidido.

—¿Qué hay, Harry? —saludó su amiga Tonks —¡No te imaginas lo que esta chica está pidiendo! Al parecer es el cumpleaños de su hermana y quiere un peluche realista de un fénix. ¡Con plumas! ¡En dos días! No se si arriesgarnos y cobrarle más o simplemente negarle su pedido por falta de tiempo.

Harry no escuchaba, no realmente, su atención se centraba en el pequeño Teddy, dormido en su mecedora.

—Harry, tu café —Tom entró de repente, cargando dos vasos de café y una expresión confundida en su lamentablemente bello rostro —¿tuviste una emergencia? Salí y ya no estabas.

Tonks ya se había callado y miraba muy atenta la interacción entre los dos hombres. Harry no se sorprendería si los estuviera grabando.

—Oh, Tom, sí —tartamudeó Harry, buscando alguna excusa sobre los anaqueles de su local —Verás, Tonks tiene que ir a conseguir plumas de fénix al centro, bueno, no de fénix real ¿verdad? —rió incómodo —más bien de tonos rojos y naranjas, tal vez amarillos —sacudió la cabeza —el punto es que tiene que irse, y yo tuve que regresar a cuidar de mi pequeño Teddy.

El telefono de Tonks cayó al suelo, los ojos de Tom se abrieron comicamente, y Teddy, perfecto Teddy, despertó y vio a Harry con una gran sonrisa.

—No sabía que tuvieras hijos, Harry —dijo Tom lentamente, mirando de reojo al pequeño Teddy que estiraba sus pequeñas manos hacia Harry.

—Si, bueno —Harry se mordió el labio y giró, escondiendo su rostro de Tom y enviando una mirada alarmada a Tonks, que ahora parecía a punto de morir a falta de aire —Teddy es demasiado pequeño —finalmente le hizo caso al bebé y lo cargó en sus brazos, girando de vuelta a mirar a Tom —no es un secreto pero tampoco es como si fuera una figura pública, Tom.

Tonks bufó detrás de él. Tom entrecerró los ojos en su dirección.

—Creí que eras gay —dijo.

—Oh, no, más bien bi —corrigió Harry, agradeciendo mentalmente a Teddy cuando comenzó a hacer sonidos de bebé como si los demás le entendieran.

—Y ¿la madre? —preguntó Tom y Harry notó la ligera nota de peligro en su voz.

—¡No me mires así! —se defendió Tonks —Yo no tocaría a Harry ni con un tubo. Me gustan más grandes, ¿sabes? —guiñó un ojo y recorrió el cuepro de Tom de forma descarada.

Harry frunció el ceño.

Tom lo miró y estudió sus facciones junto con las de Teddy.

—No son muy parecidos —sonrió de lado y pareció divertirse con el intento de engaño de su persona favorita —es un placer, Teddy. Espero ser tu segundo papá algún día.

Harry casi se ahoga.