Apoyo.

Capitulo 5

Cole.

La vi quitarse la sudadera y luego los pants y solo se quedo con un bikini rojo con detalles negros, era de dos piezas y algo descubierto y salto al agua.

Mierda, mierda y mas mierda ¿Por que? Dios ¿por que? ¿Por que tiene ser jodidamente tan hermosa cundo se supone que estoy enojado con ella? Su cara con un tono rojizo por el calor del agua con una risa hizo que el corazón me diera un vuelco, como dije antes mierda, mierda y mas mierda, se suponía que la había superado, que ya no me atraía pero ¡Oh sorpresa!  No aun estoy enamorado de ella ¿y como no hacerlo? Ella siempre era tan amable, sarcástica, linda, y siempre pero siempre esta para hablar de cualquier cosa incluso conmigo aunque a veces tenga que obligarme.

Ella me miro y me sonrió "Perdón" movió la boca como si hablara pero sin hacer ningún ruido y me sonrió divertida, yo resople y aparte la mirada escuche su risa pero la ignore bueno lo hice lo mas que pude por que al final si volteé y la vi jugando con su hermano echándose agua.

Sonreí al verla jugar con su hermano aparte la mirada y fui con mi mama — ¿Estas bien, mama? — le pregunte apoyando mi mano en su hombro.

— Si hijo ¿y tu? — me pregunto preocupada yo solo me encogí de hombros — Esta bien hijo, se que no quieres hablar de eso pero ¿sabes? — me pregunto y yo solo la mire esperando — Deberías hablar de eso con Samantha — yo la mire con los ojos tan abiertos como platos.

— Perdón — dije yo y ella no me dejo hablar.

— Hijo, ella paso por esto y creo que le importas no te dijo que le cuentes todo de una vez pero deberías abrirte un poco con ella — dijo ella y asentí sin querer hablar mucho de eso y sentí como unos brazos se enrollaron en mi cuello y unas piernas en mi cintura.

— ¡Hola! — chillo ella ella totalmente mojada mojando mi ropa — ¿Ya me perdonaste? — pregunto con una sonrisa de esperanza.

— No y me estas mojando — dije tratando de quitármela de la espalda.

— Por favor — dijo susurrando en mi oído, sentí su respiración agitada en mi nuca y casi me caigo con ella en mis espalda, me volvió loco como dijo eso así no esa voz ronca que me debilita — ¿Me perdonas? — me pregunto otra vez de la misma manera.

— ¿Algunas vez te he dicho lo cuanto que te odio? — pregunte irónico ella asintió divertida bufe y ella se burlo de mi.

— ¡Gracias! — dijo ella — Pero no fue para tanto, ni que Michelle fuera tan sexy — dijo ella con un tono burlón y yo solo la mire feo — Mi vida, hay chicas mas lindas y con mucho mas dignidad y cerebro — volvió a hablar ella.

— Te odio — dije entre dientes.

— Yo también te amo cariño — dijo sarcástica.