XV

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Eilidh sostenía entre sus manos temblorosas el último mensaje que había llegado desde Invernalia. Había leído la carta con la impecable caligrafía del maestre Luwin mínimo diez veces en unos pocos minutos.

- No puede ser cierto.- negó Robb.

- Han llegado cuervos de Puerto Blanco y Fuente Terror, me temo que es cierto.- dijo Lord Bolton.

- ¿Por qué?- preguntó Robb.- ¿Por qué iba Theon a...?- el pelirrojo se sentía acongojado con la noticia.

- Porque los Greyjoy son traidores como putas.

- ¿Y mis hermanos?- preguntó Robb.

- No hay noticias.- aquella respuesta hizo que Lady Stark suspirase de frustración.- Rodrick Cassel ha muerto

- ¡Te dije que nunca te fiaras de un Greyjoy!- exclamó Catelyn.

- Debo ir al Norte.- dijo Robb entre dientes levantándose.

- Aún hay una guerra que ganar.- le detuvo Lord Bolton.

- ¿Cómo puedo llamarme rey si ni conservo mi propio castillo?- preguntó levantando la voz a causa del enfado.- ¿Cómo puedo pedir a los hombres que me sigan si no...

- Sois rey.- Lord Bolton lo interrumpió.- Eso significa que no debéis hacerlo todo vos.

- Déjame ir a hablar con Theon.- Eilidh rompió su silencio y levantó la cabeza de la carta por primera vez desde que la había tenido entre sus manos.- Robb, te lo suplico.

- No se hablará nada, morirá por esto.- sentenció Robb.

- También puedo ocuparme de eso.- dijo la castaña.- Solo déjame ir.

Había amado y amaba a Theon, pero les había traicionado, a los Stark, a su mejor amigo al que veía casi como un hermano, y lo que más le dolía, a ella. Le había llenado la cabeza de ilusiones respecto a los planes futuros con ella, le había hecho creer que la quería y que se casarían cuando llegase el momento. Le había entregado su cuerpo en un acto de amor, y ahora se sentía como una basura por haberlo amado, y aún peor, por seguir haciéndolo. Le prometió que volvería a su lado.

Sabía que Balon Greyjoy no era una persona de fiar, pero confiaba en Theon. Por eso le aconsejo a Robb que le dejase ir a Pyke. Estaba furiosa, la sangre le hervía en las venas, pero también sentía un dolor punzante en el corazón, el hombre al que amaba le había traicionado de la peor de las formas.

- Theon retiene el castillo con unas tropas mínimas, dejadme avisar a mi bastardo de Fuente Terror, puede retomar unos cientos de hombres y retomar Invernalia antes de la luna nueva.- habló Lord Bolton.- Tenéis a los Lannister en fuga, si marcháis hacia el Norte perderéis lo que habéis ganado. A mi hijo le honrará traeros la cabeza del príncipe Theon.

- Dile que la seguridad de Bran y Rickon es prioritaria.- accedió Robb.- Y quiero que me traigan vivo a Theon, quiero mirarlo a los ojos y preguntarle por qué. Luego le cortaré la cabeza.

- Lord Bolton.- Eilidh le llamó.- Recuerde que Theon es prisionero de los Stark, no de los Bolton.- advirtió. Solo había que ver el emblema de los Bolton para saber como eran, y a pesar de todo no podía evitar, mínimamente, preocuparse por Theon. Sabía que lo que le esperaba era la muerte, pero no quería que lo torturasen.

En cuanto la improvisada reunión dio por finalizada, Eilidh corrió hacia su tienda. Ni si quiera alcanzó a llegar a la cama antes de desplomarse en el suelo dejando escapar todas las lágrimas que se había aguantado.

Se odiaba por haber confiado en él. Le había destrozado el corazón y aún así no había dejado de amarle. Pero lo conseguiría, conseguiría borrar todo sentimiento hacia Theon Greyjoy que no fuese odio, eso es todo lo que quedaría de ella para él, odio.

Sintió unos brazos cálidos rodearla, pensó que sería Robb, pero supo que no era él por la sensación que le transmitía, algo que no había sentido nunca. Era un abrazo que sin necesidad de palabras le decía que todo estaría bien.

Sintió por primera vez en su vida ese calor que solo una madre puede darte. Lady Stark la sostuvo en sus brazos hasta que a la chica se le acabaron las lágrimas. Sabía de la relación que tenía con Theon, o al menos se hacía una idea, en el pasado se lo había contado a su marido buscando que este regañase a su bastarda y con suerte la echase del castillo. Por eso cuando recibieron la espantosa noticia sus pensamientos y su mirada se dirigieron hacia Eilidh, había tratado de disimularlo, pero al menos ella, pudo escuchar su corazón pararse y después romperse en mil pedazos.

Una vez dejo de llorar, o se le acabaron las lágrimas, Catelyn la guio hacia la cama y pidió que le preparasen un baño. La ayudó a desnudarse y la metió en la bañera, le frotó la espalda y le lavó el cabello que tanto detestaba por parecerse al de su marido. Había dejado de llorar, pero se veía desconsolada, su mirada era de dolor absoluto. Eddard solo la había traicionado una vez y ni si quiera podía compararlo con lo que la joven sufría.

Se sorprendió a si misma acariciando el cabello de la niña a la que llevaba odiando diecisiete años para que se durmiera. No es que ahora la viese como una de sus hijas, ni mucho menos. Pero verla todo este tiempo al lado de Robb, apoyándolo en todo, había hecho que le ganase un poco de afecto, o al menos que su odio y resentimiento hacia ella disminuyeran. Además, sabía que si esta situación hubiese llegado a darse con Eddard vivo, él hubiese estado con ella consolándola, y sentía que ella debía hacerlo en su lugar. Porque aunque le doliese admitirlo, Eilidh había sido la primera hija mujer de su esposa y por ello era su debilidad.

- ¿Por qué?- preguntó en un susurró con la voz ronca debido a las horas que llevaba llorando.- ¿Por qué ha hecho algo así?

- Los Greyjoy son así, traicioneros.- respondió la mujer.

- Le detesto.- dijo enfadada.- Ojalá pudiese volver al pasado, jamás hubiese confiado en él.

- Volver a las Islas del Hierro ha hecho que Theon cometa una estupidez.- suspiró.- Que me temo que pagará con su vida.

Eilidh se miró la muñeca, en ella descansaba el brazalete que Theon le había obsequiado antes de partir. Se lo quitó con cuidado y lo dejo a un lado.

- ¿Quieres que lo mande fundir?- preguntó Lady Stark.

- No.- negó.- Creo que lo conservaré, puede que se lo devuelva cuando le traigan aquí.

- A lo mejor no deberías verle.

- Quiero que me expliqué por qué.- masculló.- Quiero que me diga si de verdad ha valido la pena traicionar a quienes le quieren por su padre, que prácticamente le vendió a Lord Stark. Necesito hablar con él para saber si todo lo que ha pasado entre nosotros era real, o solo una vil mentira.

Nieve en verano (GoT)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora