-¿Cuándo regresará...?- Boss siente la pregunta clavársele en las costillas por decimoquinta vez en media hora.
Su vista viaja desde los papeles de trabajo hasta los gemelos, uno parado al lado del otro, de brazos cruzados y con cejas fruncidas; intentando que la imagen resulte intimidante para su padre como lo hace para los chicos de su escuela.
Boss únicamente enarca una de sus cejas.
-No lo sé- Responde y ambos pucherean-No he hablado con Noeul desde hace unos días, ambos estamos ocupados con el trabajo que ustedes no me dejan terminar-Le cuenta-Vayan ya a la cama, es tarde
Pero en lugar de obedecerlo, solo los escucha resoplar.
-Se pelearon, ¿verdad?- Nanon le pregunta y Boss palidece, mirando con ojos redondos a los gemelos- Tú nunca le dices Noeul -Confiesa-Solo le dices Noe o mi amor...
-O mi Omega- Barcode continúa-Sabemos que nos mentiste, cada vez que lo haces tus cejas se arrugan-Y el Alfa nunca imaginó que sus hijos lo conocieran tanto, porque con los ojos negros de ambos sobre su expresión tensa, se ve a sí mismo sudar frío cuando ninguna otra excusa se le ocurre-Se pelearon por nosotros...- Barcode murmura, con la voz convirtiéndose en un hilo al final de la pregunta.
-¿Es nuestra culpa?-Boss suspira.
-No discutimos-Miente-Y aunque lo hayamos hecho, nunca será su culpa-Se acerca a ellos, arrodillándose hasta que su cuerpo es casi más pequeño que el de ambos. Su mirada suavizándose cuando les dice-Ya es tarde y mañana tienen escuela, vayan a dormir- Pero de nuevo Boss ve a sus hijos retarlo con la mirada en lugar de obedecerlo.- ¿Ahora qué?
-Volviste a arrugar tus cejas-El Alfa les gruñe.-Estás mintiendo.
-Arrugué mis cejas porque estoy cansado y aún no puedo irme a la cama hasta terminar el trabajo que llevan toda la puta noche interrumpiendo-Ve a los gemelos abrir sus ojos de más, la maldición en la oración de su padre recordándole que no estaban permitidas en el apartamento por cierto Omega-Ya lo sé, nada de maldecir. Lo siento-Murmura-Hablaremos de esto mañana, ¿sí? Estoy cansado y seguro de que ustedes también lo están, así que terminemos la conversación aquí.
-¿Lo llamarás y le preguntarás cuando viene?-Se siente hipócrita al asentir cuando es él quien lleva ignorando todas las llamadas del Omega durante la semana-¿Lo prometes?-Y A Boss el corazón se le hace chiquito cuando ve a los gemelos extender sus meñiques hasta él, buscando sellar una promesa que el Alfa no está seguro que cumplirá.
Bueno, no ahora.
-Lo doble prometo-Afirma, entrelazando ambos meñiques con los suyos de cada mano.-Ahora, a la cama. Han abusado del horario de dormir demasiado esta noche.-Les recrimina con una sonrisa que no es correspondida, puesto que Barcode solo asiente caminando hacia la habitación mientras que su hermano lo observa fijo, como si no terminara de convencerse del todo.
-Lo prometiste- Nanon le recuerda antes de seguir a su hermano por el pasillo hacia su habitación y el Alfa solo sonríe culpable, porque aunque intente disfrazar este engaño de mentira piadosa sabe que está mal mentir.
Más si es a sus propios hijos, corriendo el riesgo de perder su confianza si se llegan a enterar de la verdad...
Es solo que no se ve a sí mismo diciéndole lo que Noeul le dijo a él, no cuando hacerlo significaría enfrentar un cambio brusco que ni él mismo está dispuesto a soportar y que simplemente ignora.
Aunque no sea lo que normalmente hace, se ve a sí mismo incapaz de desprenderse totalmente del Omega.
Si hay algo que todos saben, es que Boss es alguien que acepta fácilmente los cambios, sin importar si es él o alguien más quien los provoca.
No es de los que se quejan y rechazan, él solo soporta y se adapta a la realidad; como lo hacen las plantas a la falta de agua en el desierto: Sin opción.
Y si bien, Barcode y Nanon son dos cambios en su vida de los que no se arrepiente, sí pudo quejarse cuando Nan se fue, en un arrebato al que aún no le haya sentido y al que ciertamente pudo exigirle una explicación o una excusa, no importa, algo que justificara por qué hizo lo que hizo.
Pero nunca lo pidió, tal vez para dejar morir el tema ahí o solo porque estaba cansado de tomarse todo a pecho...Aunque, si tenía que ser sincero, más allá del abandono de los gemelos, la ausencia de Nan no significó mucho para él. No al límite de crearle la sensación de que se le congela el pecho.
Mas esta vez era diferente, demasiado. Porque esta vez Boss quería exigir una disculpa, un beso y un te amo; por parte del Omega al que ha estado ignorando durante toda la semana pero al que ciertamente extraña.
Quizás más de lo que debería. Porque son las tres de la madrugada y siente la ausencia del Omega en cada uno de sus huesos, impidiéndole dormir. Con el instinto pidiendo a ciegas por él, como si estuviera cerca, lo suficiente como para que sintiera su aroma dulce picándole en la punta de la nariz.
Y a Boss quizás el sueño le atrofió el cerebro, porque son solo segundos los que necesita para comenzar a caminar hasta la puerta.
Conducido por un impulso que no tiene sentido del todo pero que sabe que es el culpable del escalofrío que estremece su cuerpo cuando está a punto de girar la manilla frente a él y simplemente se congela.
Pierde la noción de quién y dónde está cuando abre la puerta y lo primero que ve es un par de ojos tristes, quizás asustados; mirándolo fijamente hasta formarle un nudo de aliento y palabras en la garganta.
La necesidad de besar a la persona frente a él provocándole cosquillas en los labios y los aprieta fuerte, en un gesto que busca deshacer la sensación que lo guía a caer en la tentación que le sonríe, en pijama.
-¿Noe...?
-Me preguntaba si...-El Omega divaga, apretando la almohada entre sus manos antes de enfrentar la mirada desconcertada del Alfa-¿Puedo dormir aquí esta noche...?
¿Capítulo doble?
Seeeeee!✨💚
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Autophobia🥀PhayuRain
WilkołakiNoeul Nuttarat es un Omega que sufre un fuerte trastorno de autofobia (Miedo a estar solo). Tras una reciente ruptura amorosa se ve a sí mismo completamente sólo en su departamento, desencadenando la fobia que lo guiaba hacia una inminente depresió...