Capítulo 10

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El apartamento se encuentra vacío cuando se levanta a la mañana siguiente, y no sabe si está decepcionado o aliviado. No tiene posibilidad de pensar mucho, recibe un texto de Mingyu diciendo que está de vuelta de sus vacaciones y Minghao le pide que venga a verlo a la cafetería antes de comenzar a trabajar.

Tocan la puerta de cristal aún cerrada, Minghao sonríe cuando ve a Mingyu y apresurado se dirige a abrirle, camina fuera de la puerta para poder abrazarlo.

— Hola, me alegra verte.

— A mi también. — Minghao le da una palmada en la espalda y trata de soltarse para observarlo. — ¿Fueron buenas tus vacaciones?

— Sí. Recargue baterías, ya sabes. — hincha el pecho con una sonrisa de orgullo. — Escribí mi discurso de padrino, mientras estaba allá.

— Nada vergonzoso, espero. — dice Minghao, se ríe.

—Todo vergonzoso, querido. ¿Tienes el conteo final de invitados para el banquete?

— Si, te lo daré más tarde. Y el viernes debemos ir a recoger tu esmoquin.

— Muy bien, muy bien. — Señala con el pulgar por encima del hombro. — ¿Vamos adentro para tomarnos un café?

— Claro... — dice y luego vislumbra a Jun, y este captura su atención.

— Oye, Jun. — le llama, y cuando se detiene, Minghao le pide acercarse. — Jun, quiero que conozcas a Mingyu, mi padrino. Mingyu, este es el padrino de Soonyoung, Jun.

Mingyu lo mira a los ojos, le da la mano. — Ah, mi competencia. Encantado de conocerte.

— Igualmente. — dice Jun, con el ceño vagamente fruncido.

— ¿A dónde te dirigías? — le pregunta Minghao.

Jun lo mira sin revelar nada. — A ningún lugar en especial. Nos vemos a la hora de la cena.

— ¿De verdad cenarás mi comida hoy?

— Bueno, ayer me convenciste hablando de esas albóndigas con ajo.

La mención de ayer calienta la sangre de Minghao, pero no sabe si siente vergüenza por el recuerdo de cómo el día anterior le hizo sentir. No puede leer nada en la expresión de Jun, y eso lo frustra.

Mingyu, ajeno a todo ello, dice en broma. — Minghao sin duda conoce el camino al corazón de un hombre, ¿no es así?

— ¿Uh? Sí. — Jun se rasca la frente, inclinando la cabeza, sin mirar a ninguno. — Voy a llegar tarde, así que...

— Si, nos vemos. — Minghao dice vagamente, viendo como se aleja.

Mingyu le da un codazo. — Parece agradable.

— No está mal. — no tiene idea de que decir, ¿Cómo podría poner en palabras su opinión sobre Jun sin meterse en problemas?

— ¿Él se quedará por aquí? — le pregunta Mingyu, y es con un poco de amargura que Minghao le dice que no, que se marchara de regreso a China después de la boda.

Dejando a Soonyoung sin un mejor amigo. Dejándolo a él.

Claro que no le dice esa parte a Mingyu.

Soonyoung entra en la cafetería más tarde, de manera sorpresiva. Nunca visita a Minghao en el trabajo. Pero está aquí hoy, y le da un rápido beso estirándose sobre la caja registradora.

— Siento que no he estado contigo adecuadamente desde hace mucho. ¿Quieres ir a cenar esta noche?

— Ah, no puedo. — dice Minghao torpemente mientras parte los brownies que saco del horno por la mañana. — Ya le dije a Jun que esta noche cocinaré albóndigas.

El Padrino - Junhao (Jun & Minghao de Seventeen) [Adaptación]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora