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Suspiró y miró a la pelinegra con una sonrisa embobada.
Jimin se encontraba pegando carteles en las paredes sobre el baile de disfraces que se haría en una semana.
Y Minjeong no pudo evitar mirar cómo la mayor hacía el trabajo con desgana y un ceño fruncido en su rostro.
La pálida se volteó y miró cómo la menor la observaba sin disimulación alguna, rió ante eso y se acercó fingiendo desinterés.
ㅡYah, tú. Ayúdame a pegar los carteles ㅡdijo selalándola y sus amigas voltearon sorprendidas.
Minjeong se volvió un tomate.
ㅡ¿Y-yo? ㅡpreguntó confundida como una niña pequeña, el corazón de Jimin se estrujó un poco.
Asintió lentamente mientras observaba cómo la menor se levantaba y caminaba hasta ella con la cabeza baja, agarró un cartel que la mayor tenía en su mano logrando provocar un roce de manos que hizo a Minjeong emocionar.
ㅡGracias, de verdad estaba aburriéndome ㅡcomentó haciendo un puchero.
La pelinegra rió logrando que sus mejillas se abulten, Jimin también rió al verla.
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