Después de que Anne se haya tomado un extraño líquido encontrado en la mesa del laboratorio donde trabajaba Marcy, su amor por su mejor amiga de cabellos azabaches y una lujuria causada por ese líquido aumentan considerablemente, teniendo que ser cu...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
╔───────────────────╗
Aún se encontraba despierta a pesar de estar todo oscuro. Eran las 4 y 20 de la mañana, para ser exactos. Ella no lograba conciliar el sueño después de haber recibido ese beso por parte de la morena.
Ese simple besito había hecho que su cuerpo entero, de pies a cabeza, se haya despertado, dejándola sin sueño a Marcy. Era como si aquel beso hubiera encendido todo su cuerpo y la dejara con necesidad de probar más de aquellos lindos labios.
Quedó mirando aquel rostro color canela, pensando unos segundos, tal vez minutos, pero aún así, ya se había decidido. Así que llevó su mano a la barbilla de la de uniforme escolar, levantando un poco su cabeza lo suficiente como para poder estar cerca de su rostro, y por fin, una vez más, por segunda vez en su vida probó el adictivo sabor de los carnosos labios de aquella muchacha que estaba en un profundo sueño.
Fue un beso tierno y dulce, tan suave como el anterior beso, pero este no demostraba mucho, casi nada, solo la necesidad de Marcy por volver a unir sus labios con los de Anne por segunda vez.
Al cabo de unos largos segundos se separó de la tailandesa, no podría seguir arriesgándose a que ella se despertara.
Abrazó de la cintura otra vez a la más alta con la intención de seguir durmiendo, aunque no fue así.
Su mirada paró a su escritorio cerca de su cama; ahí se encontraba aquel sucio libro que tomo de la biblioteca esa misma tarde.
Tal vez no estaría mal seguir leyendo acerca del hechizo y sacar más información sobre lo que quería.
◆･.｡*†*｡.･◆
Ya cuando despertó, su cuerpo se sintió débil de golpe junto a un dolor de cabeza repentino y la garganta hecha mierda.
—Dios santísimo, que manera de despertar...
Se quejo en modo de susurro al mismo tiempo que trataba de sentarse bien sobre la cama, cosa que se le dificultó por el dolor que sentía sobre sus brazos y piernas aún adormiladas. Si que era una muy linda forma de despertar, ojalá y despertar así todas las mañanas.
Ya estando bien despierta y más conciente, notó que su mejor amiga no estaba con ella. "¿Dónde está?", fue lo que se preguntó antes de ser sus preguntas interrumpidas por el sonido de la puerta abrirse suavemente.
Era la Boonchuy, quien traía una bolsa de papel de esas que te dan cuando te envuelven la comida para llevar.
