Narra Mark:
El sol calentaba mi piel, las olas rompían y se escuchaban de manera hermosa a lo lejos, quise levantarme, pero mi cuerpo estaba adormecido, por esa razón me volví a dormir. Desperté algunas horas después muy asustado, porque sentí un movimiento debajo de mí y supe que estaba durmiendo sobre el pecho de alguien y recordé lo que pasó anoche.
- ¡¿Quién eres?! - Grité con fuerza y él salió de debajo de las sábanas.
- ¡No grites, me duele la cabeza! ¡Ven aquí, sigamos durmiendo!
Perth apareció, habló sin abrir sus ojos y me jaló de regreso a sus brazos, mientras tanto, me di cuenta de que de mis caderas hacia abajo, mi cuerpo dolía de manera muy intensa. Él seguía actuando como un esposo cariñoso y básicamente perfecto, por lo que tuve que empujarlo un poco para que se apartara de mí, este comportamiento me da miedo.
- ¿Qué tienes?... Me gritas, en lugar de decirme buenos días. Y ahora que quiero seguir durmiendo contigo, me empujas. - Me recrimina.
- ¿Qué haces en casa? ¿Acaso no te vas con uno de tus amantes después de tu dosis de sexo? ¡Me sorprende que sigas aquí! Me duelen las caderas, eso significa que fue dosis extra. - Casi lloro diciendo aquellas palabras, mientras Perth me miraba estupefacto.
- ... Yo... Sé que esto es extraño, pero no quiero irme a ningún otro lado, por favor, déjame abrazarte, aún me siento cansado.
Perth tiene razón, esta actitud es demasiado extraña, pero me gustó que no había ni una sola gota de ironía en sus palabras, también, que no quería irse a ningún otro lugar. Así que le tomé la palabra, me acosté de nuevo sobre su hombro izquierdo y él me dió un suave beso en la frente, antes de volver a dormirnos por un par de horas más.
Su corazón latía rápido igual que el mío, pero lo que me despertó, fue Perth, quien estaba besando mi cara como loco, por todas partes, me hizo cosquillas y abrí los ojos mientras sonreía. Traté de separarme porque en verdad me estaba haciendo muchas cosquillas, pero no pude escapar de mi esposo, solo continué riendo.
- ¡Basta!... ¡Jaja, ya déjame! - Finalmente, se alejó.
- Buenos días. - Me dice con una sonrisa coqueta. - ¿Vamos a comer, o quieres ducharte antes?
- Comida, tengo mucha hambre. - Vuelve a atacarme con sus besos locos. - ¡Jajajaja, Perth!
- Dijiste que tienes mucha hambre.
- Me refería a comida de verdad, degenerado.
Él se rió divertido, luego me dio algo de ropa para que pudiéramos ir a la cocina para comer lo que sea que fuera rápido, ya que al levantarnos, nos dimos cuenta que ya era pasado de mediodía. Para ser específico, eran casi las tres de la tarde, por eso nos moríamos de hambre, pero Perth no me dejaba hacer nada, estaba abrazándome todo el tiempo.
Por más que le dije que se alejara no me hizo caso, al final, se quemó su dedo índice derecho por no escuchar razones, me reí mucho viendo cómo aplicaba agua para quitar el ardor. Terminé de servir la comida y Perth seguía quejándose por su dedo, aunque en realidad, solo fue un roce de la crema de hongos que él mismo tiró de mi mano.
- Jaja, eso te pasa por no alejarte, te dije que te quemarías, ¿acaso no te lo dije? - Le reclamé entre risas, hasta que puso su dedo frente a mí. - ¿Qué quieres?
- Quiero que lo chupes, así como la mamada que me diste anoche. - Perth sonrió de lado y me sentí inseguro.
- Yo no hice eso. - Mi voz temblaba, igual que mis manos y mi corazón. Entonces, se acercó a mi oreja.
![](https://img.wattpad.com/cover/317684406-288-k949687.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Solo Un Contrato "PerthMark"
Fiksi PenggemarMark es un joven trabajador que fue enviado a Corea del Sur por su abuelo, después de desheredarlo. Sus padres murieron cuando él era un niño y él guarda muchos secretos desde aquel terrible accidente en el que perdió a sus padres. Por uno de esos s...