𝐚𝐥𝐥 𝐢 𝐰𝐚𝐧𝐭... [ᵃˡˡ ᵒᶠ ᵘˢ ᵃʳᵉ ᵈᵉᵃᵈ ˣ ᴼᶜ]

𝟸.𝟸

Sí había algo que Yoona había odiado toda su vida era hacer ejercicio, odiaba sudar y oler feo luego de cada actividad física, completamente opuesto a su hermano menor que era un loco por el deporte, en especial el básquetbol y el taekwondo, siendo el último un deporte que ambos hermanos habían aprendido de pequeños. Pero ahí estaba ella, corriendo por su vida alrededor de 3 pisos para que no pueda ser comida de zombie.

Vió cómo por delante de ella pasaba Woo-jin y Joon-yeong, giró la cabeza un poco para cerciorarse de que Su-hyeok venía detrás de ellas, pero no lo vió, fue así como su mano se separó de la muñeca de Nam-ra y dió media vuelta en busca de Lee, claro que no contó con que Choi iba a seguirla a ella segundos después de que se diera cuenta de su ausencia.

Bajó las escaleras como si de una rampa plana se tratase y sorpresivamente sin caerse ni tropezar en ningún escalón, llegó a dónde Su-hyeok se encontraba peleando con otro chico que vestía una sudadera blanca. Sus manos se aferraron al arma entre sus manos y sin pensarlo mucho, se lo clavó con fuerza en un costado del abdomen al chico con peinado raro, ocasionando que él suelte un grito y dejará en paz unos segundos a Su-hyeok, segundos en los que ella aprovechó en ayudar a que él se sentará en el suelo y recuperará el aire que había perdido.

– ¡Maldita perra! - gritó Gwi-nam, furioso, a la misma vez que enfocaba su único ojo en Yoona - Tú… - soltó una sonrisa malévola - Disfrutaré tanto matarte.

Se acercó a la fémina, cogiéndola del brazo y estampando su cuerpo contra la pared para luego intentarla ahorcar, ella le metió un puñetazo en su ojo malo, haciéndolo retroceder unos pasos. Luego, la chica le intentó propinar una patada que él esquivó, dándole una cachetada y haciéndola caer, adolorida, él se colocó encima de ella, acercándose a su rostro.

– Siempre has sido tan patética, Yang… apuesto lo que sea a que tu patético hermano ya está muerto - dijo él, burlón.

El enojo que invadió el cuerpo de Yoona fue tan grande que sin pensarlo, golpeó su propia cabeza contra la de él con fuerza, haciendo que el otro se enfureciera más y tratará de darle un golpe, o eso intentó hasta que Nam-ra llegó y lo ahorcó, para que luego ella salga volando no sin antes de que él le haya dado una mordida, Su-hyeok se levantó de suelo y empujó a Gwi-nam, haciéndolo caer por la ventana.

El más alto se acercó hasta Nam-ra, asegurándose de que estuviera bien, ambos sabiendo lo que esa mordida en el brazo de la fémina significaba.

– Carajo… - murmuró Yang, con dolor - El techo se mueve - ella rió, algo atontada por el duro golpe.

– Yoona… - Nam-ra se le acercó - Linda, ¿estás bien? - le preguntó, sin pensar mucho en sus palabras.

– Tenemos que irnos - dijo el chico, cargando en sus brazos a Yoona y comenzando a subir las escaleras con una Nam-ra avergonzada siguiéndolo. 

– Wiiiiiiiiiii… de paseo… - dijo Yang, aún riendo.

– ¡Entren! ¡Entren ahora! - gritó Su-hyeok, con una Yoona en sus brazos riendo, haciendo que sus demás compañeros entrarán de nuevo al salón.