cuando el de ojos miel salió del pequeño cuarto de baño se topó con el pecho desnudo de taeyong frente a él.
en condiciones normales hubiera desviado la mirada de inmediato, pero sus reflejos estaban más enlentecidos debido a la ingesta de alcohol, porque lo que se quedó embobado más de lo que debería.
―¿te gusta lo que ves? ―el tono burlesco del rizado rompió la magia del momento.
―eres un arrogante ―espetó golpeándole con el hombro al pasar a su lado.
―y tú un pervertido ―aquello hizo que el joven girara sobre sus talones y lo encarara.
―estúpido ―escupió acercándose un paso más hacia él.
―quejica ―siguió con la discusión el más alto, recortando todavía más la distancia entre ellos.
―imbécil ―respondió doyoung a escasos centímetros de su rostro.
taeyong dirigió su mirada brevemente hacia la bolsa del castaño antes de decir: ―necesitado.
―cállate ―ordenó con la cara completamente roja y a punto de golpear su rostro.
―cállame ―le retó el rizado observando sin querer sus labios rosados que formaban una fina línea debido a su enfado.
el estudiante de la snu no pensó mucho en las consecuencias que traerían sus actos, simplemente lo hizo. se abalanzó sobre su contrincante, sellando sus bocas en un beso desenfrenado.
a pesar de que no creía que lo hiciera, taeyong no podía estar más satisfecho con la reacción del más bajo. cogiéndolo por las caderas, lo atrajo hacia él, profundizando el beso.
cuando se separaron por falta de aire, se miraron a los ojos, como si buscaran que el otro detuviera aquella locura. ninguno de los dos hizo el ademán de querer pararlo.
bajando sus manos hacia las nalgas que tanto había deseado acariciar, taeyong elevó a doyoung del suelo, haciendo que rodeara su cuerpo con sus brazos y piernas.
volvió a atacar esos labios rosados mientras caminaba en dirección a la cama, donde se sentó apoyando la espalda en el cabecero y las piernas estiradas.
el menor se acomodó sobre su regazo a horcajadas, jugueteando con sus rizos. estuvieron largo rato besándose y explorándose con sus manos, como si quisieran descubrir cada recoveco de la figura del otro.
el de ojos cafés se deshizo con facilidad de la camiseta que cubría el torso de su acompañante, pudiendo admirar así su deliciosa piel. se sorprendió al ver que doyoung también se preocupaba de entrenar físicamente, puesto que sus músculos estaban bien definidos.
el menor sentía que no podría seguir con ese juego. admitía que tenía una vida sexualmente activa, no necesariamente con pareja, y hacía más de una semana que no había podido satisfacer sus necesidades ya que no contaban con un espacio que le diera la suficiente intimidad.
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rivals
Fanfictionla primera edición internacional de debate universitario reúne en busan a las mejores universidades del mundo, entre ellas las de kim doyoung y lee taeyong, los rivales más tenaces de la liga.