―¿Jisung?
Pasó su mano frente al rostro ido de su novio, quien parpadeó un par de veces y volteó a verlo, con aquella mirada aún desorientada y confundida.
―¿Qué pasó? ¿Qué decías, Seungmin? ―preguntó.
―Nada. Sólo quería saber en qué pensabas ―explicó, mientras se encogía de hombros.
No oyó ninguna respuesta, por lo que volteó nuevamente a observar al mayor, quien volvía a tener su mirada perdida en algún punto de la sala. Algo dentro suyo se removió con incomodidad, una preocupación que provocaba los latidos desenfrenados de su corazón, junto a una mezcla de miedo e incertidumbre. Juntó sus labios formando una fina línea, esperando alguna reacción por parte del contrario, quien le devolvió la intensa mirada, logrando que su corazón se detuviera por unos instantes.
―No pensaba en nada, no te preocupes ―respondió finalmente.
Y así, como si nada, el aura pesada en él se disolvió, empezando a hablar y hablar sin parar como siempre lo hacía. Su corazón empezó a latir normalmente de nuevo, y su mueca de preocupación se tornó en una sonrisa boba que acompañaba a sus ojos brillantes ante la vista de su novio.
Tal vez estaba siendo demasiado paranoico sin razón, pues Jisung seguía siendo el mismo de siempre ¿no?
════ ∘◦❁◦∘ ════
―¿Todavía no llegó? ―preguntó Felix, su mejor amigo.
―No, todavía no ―respondió con un suspiro.
―Mmm, qué raro.
Observó rápidamente la mesa arreglada, los platos llenos de comida preparada para él y Jisung ya completamente fría, junto con los cubiertos bien acomodados y las copas de vidrio relucientes, en el centro estando aquel vino que compraron juntos un par de noches atrás para algún evento especial. Tal vez no era su aniversario, pero haber conseguido una beca para una de las Universidades más prestigiosas de Seúl podría considerarse tan importante como uno ¿no? Al menos eso suponía Seungmin, por lo que decidió preparar aquella cena para disfrutarla con Jisung, quien aún no regresaba, a pesar de que eran pasadas las diez de la noche y sus clases normalmente terminaban alrededor de las siete.
Pasó su mano por su cara, evidentemente angustiado, pues no le llegaban los mensajes a Jisung y tampoco le entraban las llamadas. En ningún momento le avisó si tuvo algún contratiempo o si debía quedarse más tiempo con sus compañeros para terminar algún trabajo, a pesar de que siempre le comentaba esas cosas de antemano para no preocuparlo.
―¿No sabés si se quedó con Chan o Changbin? ―preguntó mientras se mordía el pulgar.
―Changbin está conmigo, Minnie ―contestó el pecoso―. ¿Querés que te pase con él?
―Sí, por favor, Felix.
Escuchó de fondo como su mejor amigo se levantaba de lo que suponía era el sofá y empezaba a caminar, abriendo y cerrando puertas en el proceso. Los oyó hablar, aún si no entendía nada de lo que decían, mientras continuaba mordiéndose el dedo en clara señal de nerviosismo. En eso, por fin sonó la inconfundible voz de uno de los mejores amigos de su novio.
―¿Si, Seungmin? ¿Qué pasó?
―Hola, Changbin. ―Suspiró antes de hablar nuevamente―. ¿Sabés dónde está Jisung?

ESTÁS LEYENDO
SeungSung Stories
Fiksi PenggemarHistorias/One-Shots del SeungSung (Seungmin × Jisung)