You saved me | Traduccion | Clexa

Capitulo 32

Lexa miró a Clarke. Oculta sus emociones muy encontradas. Sintió alivio al ver a la niña con vida, orgullo de haberse mantenido con vida todo este tiempo, amor que no había desaparecido, pero también la ira de Clarke al irse hace 3 meses y el corte en su rostro que probablemente provenía de Roan ( ella se ocuparía de él más tarde) y la amargura que le producía estar aquí después de que Lexa hubiera arriesgado algo más por Clarke.

Apartando la emoción que sentía por Clarke, decidió concentrarse en la ira que irradiaba hacia Roan. La Comandante caminó hacia Clarke y Roan. No estaba contenta con los cortes y moretones que tenía en el rostro de Clarke. Ella no estaba feliz por eso ni un poco. Apartando los ojos de Clarke, que había estado evitando el contacto visual a toda costa, miró a Roan. "El trato era que tú me la trajeras ilesa ". Lexa le espetó.

Roan sonrió levemente. "Ella no fue fácil". Le dijo a Lexa.

Una oleada de orgullo llenó el pecho de Lexa. Volvió a mirar a Clarke. "Debería haber esperado que no".

El Príncipe sabía que era hora de comenzar a jugar el juego. Él y Lexa estaban destinados a odiarse con pasión, no lo hicieron, pero eso es lo que todos los demás pensaban. Entonces, su explicación para que Roan hiciera esto fue que quería que se levantara su destierro. Por supuesto, su verdadera razón era fastidiar a su madre, pero eso no importaba. "He hecho mi parte, ahora haz la tuya. Termina mi destierro".

Ellos no podrían tener eso. Lo necesitaba cerca para la siguiente parte de su plan. "Me han dicho que el ejército de tu madre marcha sobre Polis. " declaró Lexa.

Clarke miró hacia Roan, ¿quién era su madre? "Eso no tiene nada que ver conmigo. Honra nuestro trato".

"Cumpliré nuestro trato cuando su Reina honre a mi Coalición". Lexa dijo sin culpa. Roan volvió a ocultar su sonrisa. Esta era otra forma de fastidiar a su madre. Después de lo que había hecho, se merecía todo lo que le pasó. "Encerrad al príncipe Roan de Azgeda". Clarke miró a Roan con algo de sorpresa. ¿Él era el Príncipe de Azgeda? Dos guardias agarraron a Roan pero él no miró a ninguno de ellos. Bajo la mirada falsa había una mirada que significaba que hablarían más tarde.

Titus esperó hasta que Roan se fue antes de hablar. "¿Qué pasa con Wanheda?"

Lexa levantó las manos para silenciarlo. "Déjanos." Tanto Anya como Indra se fueron sin decir una palabra más, no querían meterse en esto. Titus, por otro lado, se giró justo cuando estaba a punto de irse. "Me escuchaste." Titus bajó la mirada después de unos momentos y salió de la habitación. Titus había estado probando su suerte desde que regresaron a Polis, parecía que ya no se podía confiar plenamente en él. Él ya no la respetaba tanto. La vio débil y Lexa supo que pronto tendría que lidiar con él. Observó mientras sus guardias cerraban las puertas y esperaban a cada lado de ellas.

La Comandante quitó la mordaza de la boca de Clarke. "Lo siento, pero tenía que asegurarme de que Wanheda no cayera en manos de la Reina de Hielo".

"Estaba bien". Clarke respondió enojada. Lexa había conseguido que alguien la secuestrara.

"Polis es el lugar más seguro para ti". Dijo Lexa tratando de ignorar la ira de Clarke.

"Tal vez deberías haber confiado en que no habría muerto". Clarke respondió manteniendo el contacto visual de Lexa.

Los ojos de Lexa se entrecerraron. Sus ojos comenzaron a encenderse en llamas. "La última vez que confié en ti, te fuiste". Lexa espetó en un volumen más bajo. Luego se volvió hacia sus guardias. "Lleva a Wanheda a su habitación. Tenla vigilada en todo momento, no se le permite salir de esta torre". ordenó Lexa sin siquiera mirar a Clarke.