"PRIMERA NAVIDAD EN CUATRO AÑOS"

Parte VIII - Reyes Magos II

Papá estoy nerviosa - dijo Gaby mirando a su padre aún con los ojos pegados de haber estado durmiendo hasta hace escasos 5 minutos.

¿Qué haces despierta tan temprano Gab? - respondió Franco desde la cocina con un vaso de agua en la mano. Además descalza - dijo con mirada desafiante.

Gaby alzó sus brazos con cara de súplica. - Si me tomas en brazos no estaré descalza - sugirió.

¿Con que esas tenemos? - dijo Franco mientras obedecía a su pequeña. ¿Por qué no vuelves a la cama amor? Son las 8:00 h de la mañana.

Estoy nerviosa porque ya mismo vienen los Reyes Magos, ¿tú no? - preguntó Gaby. Llevas 4 años sin regalos, este año seguro tendrás muchos regalos. ¿Los compartirás con nosotros? Seguro 4 o más, uno por año...

Gaby, Gaby, cálmate...si que estás nerviosa, dijo Franco riéndose de las ocurrencias de su hija. Echaba de menos esas ideas de trasto que tienes - le dijo mientras le dio un beso.

Yo también te eche de menos papi. ¿Por qué no le preparamos el desayuno a mamá y Andrés? Antes lo hacías con Andrés, pero yo ya soy mayor. Te prometo que seré una buena ayudante.

Me parece una muy buena idea. Haremos tortitas, ¿te gusta la idea?

Me encanta papá. Pero con chocolate porfis - sugirió la pequeña de la casa.

Trato hecho - respondió Franco. Manos a la obra señorita.

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Sara abrió los ojos en respuesta a la alarma programada de su móvil. Las 8:20 h. La comida de reyes ya era mañana y tenía muchas cosas que preparar con sus hermanas en casa de su madre, pues siempre se reunían allí todos juntos para celebrar ese día tan especial.

Mientras aún medio dormía y se resistía a comenzar el día, estiró el brazo en sentido contrario hacia donde dormía en busca de Franco, pero no se encontraba allí.

¿Franco? - preguntó retóricamente mientras giraba la cabeza en busca de su marido. Volvió a mirar la hora para percatarse de que las 8:20 h que vio hace escasos segundos con la alarma de su móvil eran de verdad.

¿Dónde habrá ido tan temprano? - se preguntó.

Bajó a la planta de abajo en busca de agua y algo para desayunar y aprovechar para buscar a Franco en su estudio, pues de seguro estaría allí.

Mmmm, huele a chocolate, pensó mientras bajaba las escaleras. ¡Franco, Gaby! ¿Qué estáis haciendo? - preguntó sorprendida. No he oído como te has ido amor, ¿te desvelaste? - le preguntó a Franco.

Sí, me desvelé, fui a por agua y al rato apareció esta pequeñaja por aquí sin sueño y decidimos hacer tortitas. Estaba esperando que te despertaras para hacer las tuyas.

Buenos días mi amor - dijo Franco finalmente con un tierno beso.

Buenos días a los dos - respondió Sara con un beso para cada uno.

¿Habrá que llamar a Andrés no? - sugirió Sara.

¡Yo lo llamo! - propuso Gaby mientras subía directamente escaleras arriba antes de que su madre pudiera decir nada más.

Te echaba de menos cocinándome - dijo Sara mientras abrazaba a Franco por detrás, que se encontraba haciéndole su montaña de tortitas.

Yo te eché de menos de todas las formas posibles - respondió Franco volteándose a besarla.

Esta noche se espera movida. No me fio de que Gaby encuentre los regalos. Esta niña... - decía Sara apoyada en el pecho de su marido en un abrazo.

Tranquila, la controlaré. Yo me encargo. Todo saldrá perfecto, ya verás - dijo Franco.