capítulo XII: miedo en la penumbra

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Camino hacia Horobashi – Japón 19/06/2012

Hiro: *algo cansado* vaya, nunca creí que este viaje me daría tantas vueltas en mi cabeza.

Leo: bueno tu fuiste que no quiso creerme.

Hiro: ¿me estás diciendo que fue mi culpa en no creerte?

Leo: no te estoy diciendo eso. Solo es que me preocupo que ibas a asustarte y atacar a mis amigos.

Hiro: *gurruñando* ellos me asustaron primero.

Leo: como tu digas.

Tres días han pasado desde que hiro se dio cuenta del secreto de leo. Tuvo que decirle en mil y una formas para demostrarles que ellos no son enemigos. El pobre tuvo que aguantar esos tres días con ellos hasta sentirse cómodo con estos. Por ahora, están viajando encima de un bosque de extensos árboles, Toda la pandilla miraba con atención si encuentran algún pueblo cercano, en distintos grupos separados.

Leo y hiro estaban justamente en la punta del barco, atentos si vieran algo bueno. Pero solo veían árboles, arbustos y algún que otro animal asomándose en el bosque. No habían llegado aún a su destino. Allí, marco y miguel se acercaron para preguntar si habían encontrado algo.

Miguel: ¿tuvieron suerte?

Leo: no.

Marco: ¿Qué tan lejos estamos para llegar hacia Horobashi?

Hiro: *mirando su GPS* aún falta unos kilómetros para llegar allá. Por ahora, debemos que averiguar donde aterrizar.

Marco: buen punto, no podemos aterrizar el barco frente del pueblo.

Leo: está bien, pero ¿en dónde?

Don Andrés: ¿Qué les parece allá? *señala un gran campo de trigo fuera del bosque*

Xóchitl: parece un buen lugar.

Leo: manejare el timón para ir hacia allá. ¡sujétense!

Todos obedecieron el mandato y cuando leo giro el timón. El barco giro a la dirección indicada hasta llegar al campo de trigo. Aterrizaron con cuidado y todos bajaron al terreno, parecía un lugar silencioso y agradable, no había ningún peligro cerca.

Leo: parece un lindo lugar.

Hiro: sí. Parece agradable a simple vista.

Alebrije: *señalando un pueblo* ¡chicos, vean aquí!

Leo: ¡un pueblo! ¿será que es...?

Hiro: ¡sí, es el pueblo de Horobashi! ¡lo encontramos amigos!

Todos saltaron de alegría al encontrar el pueblo. Ahora viene lo más difícil, ir hacia allá y encontrar información del sujeto del pergamino. Nuestro aventurero pensó en una forma de buscar información sin alterar a todo un pueblo desconocido. Pensó que era simple de preguntar a un habitante del lugar para buscar información, claro que era un buen plan, pero hiro tenía que estar con él, ya que él podría traducir lo que él diga a su idioma original.

Leo: ok chicos, hay que buscar a alguien del pueblo para averiguar quién es Misaki nashabu. Hiro, tu estarás conmigo, necesitare que me traduzcas todo lo que digan ¿ok?

Hiro: de acuerdo leo.

Leo: marco y miguel, ustedes estén pendientes de algo inusual que pase allá. Lo mismo les diré a ustedes amigos ¿vale?

Todos: ok.

Leo: ok, entonces andando.

Así fueron todos hacia el pueblo para buscar respuestas. El camino no era muy largo porque fue fácil llegar allá. La aldea era un poco pequeña, pero había mucha gente, parecían amigables. Nuestro aventurero debía ser discreto para no alterar a la gente del espectro.

La leyenda del príncipe de la lunaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora