- 𝙳𝚒𝚟𝚒𝚗𝚘 𝚃𝚛𝚊𝚜𝚝𝚘𝚛𝚗𝚘 - (𝚂𝚑𝚊𝚞𝚗 𝙼𝚞𝚛𝚙𝚑𝚢 𝚡 𝚃/𝙽)

Tiempo

La operación fue complicada, pero después de unas 3 horas la terminamos. Estaba cansado pero me alegraba que mi paciente estuviera bien.

Nuevamente la internamos por unas horas en una de las habitaciones del hospital y si todo salía bien podríamos darle el alta el día siguiente.

—-------------------------------------------------------------------------------------------------

T/N POV:

Me desperté nuevamente en el hospital y ya era de noche.

Me sentía algo aturdida y pérdida, ¿qué me había pasado esta vez?

Mi tesis de medicina sería en 2 semanas y necesitaba recuperarme para poder estudiar, ya era mi segundo día faltando a la facultad y debía adelantarme con los trabajos.

Si no me recuperaba pronto, estaría en problemas.

Mientras intentaba superar las náuseas, la doctora Claire entró a mi habitación a hacerme un chequeo, exactamente como había sucedido hace unos días.

-Entiendo que estés confundida, ¿cómo te sientes?

Preguntó amablemente la doctora.

-Algo mareada.

Respondí a su pregunta.

-Es normal, acabas de salir de cirugía. Debes agradecerle al doctor Murphy.

-¿Qué me pasó?

-El doctor Shaun Murphy te encontró inconsciente frente a tu departamento, te trajo al hospital y acudimos a cirugía.

Tenías unas cuantas heridas superficiales en el corazón, eso provocaba bradicardia, por lo que el oxígeno que transporta tu sangre no llegaba con suficiencia a tu cuerpo, incluyendo al cerebro.

Pero luego de la cirugía te pondrás bien.

Te internaremos solo por hoy en el hospital para asegurarnos de que estés bien, te recetaré unos medicamentos y para mañana ya estarás en tu casa de nuevo.

-El doctor Shaun Murphy? Él me salvó?

-Parece que ya lo conoces, es un médico excepcional.

Miré para abajo pensativa mientras la doctora anotaba en una pequeña agenda los medicamentos que me iba a recetar, me explicó con detalle cada horario y las dosis de estos para luego abandonar la habitación.

No entendía, el doctor Shaun Murphy era mi vecino?

Era extraño...

Decidí no pensar más por ese día e intenté dormir. Eran alrededor de las 8 p.m. y las náuseas y el eterno dolor de cabeza no me dejaban tranquila.

A pesar de haber estado anestesiada alrededor de unas 6 horas me sentía realmente agotada y estresada.

Tenía demasiadas cosas para hacer y no hacía otra cosa más que perder el tiempo, pero no tenía otra opción.

Cerré mis ojos pero no lograba dormirme, el dolor de cabeza y la sensación de vómito no eran agradables.

Así que tomé mi mochila la cual llevaba a la universidad y empecé a leer un capítulo de un libro de medicina mientras escuchaba música clásica.

Las horas pasaron velozmente, y antes de darme cuenta se había hecho de día.

Miré por la ventana de la habitación y estaba amaneciendo, pequeños rayos de luz empezaron a entrar por la ventana y no había tomado ni 1 hora de sueño, por suerte era sábado.

Me aliviaba el pensar que había recuperado el tiempo perdido en leer y aprender medicina, me encantaba aprender y detestaba perder el tiempo en no hacer nada, no podía permitirme estar desocupada o simplemente desperdiciar valiosos segundos de mi vida simplemente por que no tengo ganas de hacer algo, siempre se puede mejorar, siempre hay algo para aprender, y la vida es demasiado corta como para contemplar cómo los minutos pasan sin hacer nada para impedirlo.

Aunque a decir verdad, me sentía realmente cansada.

Me puse a pensar en qué estaba haciendo Liszt, mi pequeño debía sentirse abandonado, él no tiene la conciencia para entender que estaba en el hospital y que no lo dejaría.

Cuando lo encontré estaba asustado y tenía hambre, pero la última opción que tenía para poder sobrevivir era acercarse a mi. Se notaba que había sufrido maltrato y la única persona que lo había tratado con cariño era yo.

Por unos segundos recordé que había un vecino el cuál lo alimentaba de vez en cuando, pero recordé que mi extraño vecino resultó ser Shaun, y él se encontraba en el hospital conmigo.