Hay un Chef Yu en la industria del entretenimiento

Capítulo 114 - Russell

Lo primero que hizo Yu Siyang al llegar a París fue reunirse con Philip Hill, el propietario de P&H, y el conductor que vino a recogerlos al aeropuerto los esperó debajo del hotel y los envió directamente a la villa privada de Philip Hill más tarde.

Se dijo que era una villa, Yu Siyang pensó que parecía más bien un castillo antiguo. Desde el coche, se podía ver un jardín abierto con exuberantes rosas en plena floración. También había un lago artificial en el jardín, en el que seguía navegando una pareja de cisnes.

El Mercedes negro entró en la mansión y se detuvo ante la puerta de la villa que parecía un castillo. Delante de la puerta, esperaba un meticuloso anciano con un traje de tres piezas. Cuando el coche se detuvo, el anciano se adelantó y abrió la puerta del coche a Yu Siyang.

"Señor Yu, señor Luo, bienvenidos a la mansión Landres (1). El maestro está deseando tomar el té de la tarde con ustedes en la sala de recepción".

(1) Landres es una localidad al norte de Francia, casi en la frontera con Luxemburgo y Bélgica.

Yu Siyang estaba sorprendido. Se trataba de un mayordomo vivo, casi exactamente igual al de las películas.

Luo Peng también trató de controlar sus expresiones faciales, para no parecer un pueblerino que nunca había visto el mundo.

Los dos siguieron cuidadosamente al anciano caballero hasta una sala de recepción. En el interior, Philip Hill, vestido con lo que parece un abrigo largo hecho a base de piezas, está jugueteando con un traje puesto sobre un modelo de maniquí.

El anciano caballero se dirigió a Philip Hill y le dijo, "Maestro, el señor Yu está aquí".

Philip Hill se giró para ver a Yu Siyang, con entusiasmo: "Yu, te he estado esperando durante mucho tiempo". Al decir esto, dio un paso adelante para abrazar a Yu Siyang.

"Señor Hill, cuánto tiempo sin verle". Yu Siyang saludó en un francés a medias.

Después de saludar a Luo Peng, Philip Hill le pidió a Yu Siyang que mirara su último diseño, señaló la ropa similar a una túnica que estaba en el maniquí y dijo: "Este es mi último trabajo. Está inspirado en la divertida película en la que trabajaste".

El traje era completamente blanco, con un abrigo tipo túnica en el exterior, y una túnica holgada en el interior. La seda blanca estaba bordada con hilos de color beige con patrones incomprensibles. El estilo de todo el traje podía resumirse en sólo una palabra— elegante.

"Pruébatelo". Philip Hill no podía esperar a ver como luciría el traje en Yu Siyang.

Antes de que Yu Siyang pudiera beber un sorbo de té de miel traído por el anciano mayordomo, fue arrastrado por la criada llamada por Philip Hill para cambiarse de ropa.

Philip Hill saludó a Luo Peng para que participara en el té de la tarde. Este diseñador, un tanto regañón, era un fanático de China, y le gustaba especialmente la cultura china antigua. Luo Peng conocía las preferencias de Philip Hill cuando firmó el contrato de patrocinio con P&H, así que, tras ponerse cómodo, sacó algunos pequeños regalos que podían representar la cultura tradicional china.

A Philip Hill le gustó especialmente el abanico de madera de sándalo blanco que había en su interior, exquisitamente tallado en forma de imagen de ciruela de invierno de gran realismo. Jugó con el abanico y le encantó.

Yu Siyang se cambió rápidamente de ropa. Este elegante traje largo y la túnica eran ligeros y revoloteaban sobre su cuerpo. Y no había pantalones. El traje largo que llegaba a la pantorrilla mostraba unos delicados tobillos. La criada también le dijo específicamente que no llevara calzado, por lo que volvió a la sala de recepción con los pies desnudos.