Capítulo 97 - Preparación antes de la confesión

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El valor siempre había sido algo asociado al entusiasmo. En el camino de vuelta, el cerebro de Yu Siyang inventó varias escenas que podrían ocurrir después de que confesara, y cuanto más pensaba en ello, más se ponía nervioso.

"Mañana por la noche hay una recepción, organizada por el comité principal. Debes asistir y no puedes escaparte a la mitad del evento. Además, pasado mañana es el estreno de «Agnes sin rostro», el director te ha enviado una carta de invitación, en esto también debes participar, y no puedes huir..." Luo Peng tomó la tablet para informar a Yu Siyang de las actividades del festival de cine una por una, y enfatizó que "no se puede escapar", aunque esta vez perdonó la salida anticipada de Yu Siyang, pero no significaba que estuviera de acuerdo con su planteamiento.

En este momento, Yu Siyang estaba pensando en su evento de su vida. No escuchó las palabras de Luo Peng con atención. Se limitó a asentir con la cabeza.

"El último día es la entrega de premios y la ceremonia de clausura. Según los rumores, tus posibilidades de ganar son bastante altas". Luo Peng sonrió triunfante.

Yu Siyang dejó escapar un distraído "Oh".

Luo Peng: "..."

Este chico muerto tenía este aspecto, ¡¿y ni siquiera se atrevía a escucharlo?!

No, no se podían fomentar esas tendencias malsanas.

Luo Peng reflexionó por un momento y estaba a punto de llevar a cabo el entrenamiento de "amor y respeto por el trabajo y la etiqueta", cuando Tang Hang dijo: "Llegamos". Y detuvo lentamente el coche.

"Oh—" Yu Siyang era como un gato al que le habían pisado la cola, y se sobresaltó. "¿Estamos aquí?" Todavía no había organizado su lengua ni terminado su preparación mental.

Tanto Tang Hang como Luo Peng le miraron con extrañeza.

Era que había algo importante, por lo que tenía que volver, pero ¿cómo es que cuando llegaban a casa ahora, se convertía en '¿Estamos aquí?'?

Yu Siyang sonrió torpemente, abrió la puerta, tropezó accidentalmente con la puerta al salir del coche y casi se cae.

"Ten cuidado, ¿por qué estás fuera de tus cabales?". Luo Peng salió rápidamente del coche para ver si se había caído.

"Está bien, vuelve, buenas noches". Yu Siyang agitó la mano y caminó rígidamente hacia la puerta de la villa. Era una distancia corta, a lo sumo veinte pasos, caminaba nerviosamente con manos y pies temblorosos.

Luo Peng y Tang Hang se quedaron boquiabiertos.

"¿Qué le pasó hoy? ¿Pasó algo en la sala de exposiciones?" preguntó Tang Hang.

Luo Peng negó con la cabeza: "No dijo nada, no debe ser un asunto grave. Pregúntale mañana".

Yu Siyang volvió caminando con las manos y los pies temblorosos. Pensó en ello innumerables veces a lo largo del camino, aunque le preocupaba que terminara de tal manera que él y el señor Xue no pudieran ni siquiera ser amigos, pero ¿cómo podría un hombre encogerse por las dificultades? Si se preocupaba por cosas que aún no habían sucedido, iría en contra de su propia voluntad y merecería estar soltero toda su vida.

A medida que envejecemos, debemos perseguir con valentía nuestra propia felicidad.

Bueno, eso es todo.

Se animó ante la puerta y luego presionó con sus dedos para empujarla.

Xue Chengxiu estaba trabajando en la sala de estar mientras esperaba el regreso de su hijo. Al ver a Yu Siyang entrar por la puerta, sonrió y dijo: "Has vuelto, ¿estás cansado? No te quitaron el maquillaje de la cara".

Hay un Chef Yu en la industria del entretenimientoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora