Él había dicho que tenía que entrenarse, pero... ¿para qué? Estaba claro que Lily le estaba muy agradecida por salvarle la vida, por traerla aquí y cuidarla mientras estaba inconsciente, pero de eso, a abandonarlo todo por venir aquí a entrenar habia un abismo de diferencia.
-No pienso vivir aquí, y menos para entrenarme, tengo una familia ¿sabes?
-Mira se por experiencia que no es fácil entender esto, pero con el tiempo lo vas asumiendo. No vas a volver a tu casa, porque... estas muerta.
Silencio, más silencio. Ninguno de los dos sabían cuánto tiempo estuvieron así, pero Azel no le dio importancia. Le daría a Lily todo el tiempo que necesitara para entenderlo, pero tenía que hacérselo entender bien, porque si no era claro, Lily podría estancarse, y quedarse toda su vida rechazando la idea. Al ver que Lily no decía nada, empezó a preocuparse, así que decidió darle el pequeño empujón que necesitaba para asumirlo.
-Lily, ¿estás bien?
-No. Me dices que estoy muerta, ¿y esperas que esté bien?. Si al menos tuviera la más mínima esperanza de que mintieras, podría hacer esto mejor, pero el problema es que sé que no mientes.
-Lo siento Lily, debería habértelo dicho de otro modo, pero no sabía cuál. Nunca he hecho esto ¿sabes?. Eres mi primera protegida.
-¿Mi padre... está muerto?- ella no podía hacer esa pregunta directa, pero sin embargo, lo hizo sabiendo que la respuesta iba a ser muy importante.
-No, el se salvó del accidente. Tu madre... está con él, sabe lo que te ha pasado, y no quiere estar sola.
-¿Tu cómo sabes todo eso?- preguntó con incredulidad, pues no sabía como él tenía nformación que ella no tenía, una información que la infundía a ella y no a él.
-Alea me lo contó, yo le pedí que investigara por mi, no quería dejarte sola.
Las lágrimas empezaban a aflorar en los ojos de ella, pues sabía que nunca mas volvería a ver a sus padres. En lo más profundo de ella, sabía que esto iba a pasar, pero nunca se imaginaría que se hiciera realidad. Era como si una voz le susurrara al oído "tranquila, todo saldrá bien", y esas fueron las palabras que más la animaron a seguir adelante. Antes de que pudiera decir o hacer nada, Azel se acercó a ella y la abrazó con todas sus fuerzas. Él era más alto que ella, por lo que enterró su cara en el pecho de el, y dejó que las lágrimas salieran, quitándose de delante todo lo malo que pudiera pasarle, todas sus penas se fueron en sollozos que Azel agarraba para no dejar que nada le perturbara.
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Los guerreros de la muerte
FantasyLily Steak, es una joven con un gran futuro, que sin darse cuenta, estará en una situación que solo ella podrá manejar, y tomar las decisiones correctas, ¿sabrá ella lo que tiene que hacer?.