La Llave de Mew-Libro 2-MewGulf

Capítulo 15

Gulf no quería dejar a Mew. No quiso embestir tras de él y no quiso levantarse y tirar a Mew, de pie, por su camisa. Toda su percepción de las restricciones de fuerza, la distancia y físicas no eran lo que solían ser.

Nada era como solía ser.

El mundo era más claro, con una nueva gama completa de colores, y su visión estaba en permanente vista panorámica. Oyó todo -todo- y probó todo eso en su lengua. Su cerebro lo catalogó en menos de una milésima de segundo, y su mente -oh, su mente- un universo abierto.

Miró a Eiji y Jodis, ambos tenían una sonrisa de oreja a oreja, a continuación, a Jacques y Kennard, Lars y los otros vampiros ingleses que sabía quiénes eran ahora, Leonard, Omar y Kylie. No sabía cómo lo sabía, simplemente lo sabía -y el pequeño Jorge, que sonreía fantásticamente. Eleanor y su padre estaban allí, oh padre, pero no había... Mew.

Mew.

Estaba sonriendo, mirando su camisa rota, alisándola hacia abajo, donde Gulf lo había agarrado un segundo atrás. ¿Eso fue hace sólo un segundo?

Mew. Su piel perfecta y el cabello de color jengibre oxidado parecían aún mejor a través de estos nuevos ojos. Su perfume, su atracción magnética era mucho mejor, y Gulf no se contuvo. Tomó la cara de Mew con ambas manos y lo besó.

Eiji se rió.

―No ha cambiado ni un poco.

Mew se retorció, tirando de las manos de Gulf de su cara con una risa.

―Ah, no tan fuerte.

Gulf puso las manos en la cara de Mew tan suavemente como pudo y le dio un beso de nuevo.

―Lo siento. Todo es tan...

―¿Diferente?

―Mejor ―miró alrededor de la habitación de nuevo y vio a su padre.

Su padre también humano. Su padre con un corazón que latía y la sangre en las venas. Sin embargo, en su mente, él diferenciaba entre una fuente de alimento y la familia. Se acercó, ante la sorpresa en el rostro de su padre y cómo su pelo estaba soplando hacia atrás en la brisa, Gulf supuso que se acercó un poco demasiado rápido. Muy lentamente, con mucho cuidado, puso sus brazos a su alrededor.

―Padre.

Kole se puso a llorar.

―Ah, Gulf. No estaba seguro de si alguna vez te vería de nuevo.

Entonces el pequeño Jorge estaba al lado de ellos, y una voz de mujer dijo.

―¡Kole?

Entonces, todo sucedió muy rápido. Kole se tambaleó hacia atrás, mientras que Gulf se volvió y emitió un gruñido que era tan fuerte y amenazante, que daba miedo. Pero tenía que proteger a su padre a toda costa y mostró los colmillos, Jesús, él tenía colmillos, y tiró para fuera las manos, enviando crujidos de electricidad y fuego e ira de sus dedos.

Jorge levantó las manos y la voz de la mujer dijo en un susurro.

—Mantén la calma.

Y Gulf se sintió tranquilo, pero no fue hasta Mew estaba frente a él, con sus frentes presionando juntas, que tomó una respiración profunda suficiente para enfocarse.

―Estás bien, tu padre está bien, Gulf.

―¡Era la voz de Heather! ―Kole susurró.

Gulf se volvió para ver que debió haber empujado a su padre, porque Eleanor estaba ayudándole a ponerse de pie.