Oscuridad ~ Hoffman #4

CAPITULO 8

Aubrey

No me gusta besar a las personas, no me gusta hacerlo, siento que es algo tan personal, algo tan íntimo, no he besado a nadie en mis 26 años y es algo de lo que no me arrepiento, así que para seguir con mi regla de cero besos, tomo el cuello de Jasmine cómo una fruta y deslizó mis labios para dejar besos por su cuello que logran erizarla

Ella jadea y separa más las piernas, no lleva  sostén solo una braga, la cuál está húmeda, y es algo que descubrí cuando se quitó el pantalón, mi boca sigue por instinto, hacia sus pechos, sus pezones rosados tan erectos, que mi lengua los delinea perfecto

Abre la boca, expulsando el aire mientras una de mis manos va delineando las curvas de su cintura, directo hacia su zona de peligro...

—¿Acaso no dirás una frase típica como que me vas a llevar al cielo? — pregunta con la voz entrecortada, llevo mi vista hacia sus ojos azules los cuales están dilatados

Está jodidamente excitada y aún así puede hacer alguna pregunta burlona, mi mano suelta le da una bofetada a su trasero, ella respinga y suelta una risilla

—Para que ir al cielo, si el infierno también tiene su gloria, niña malcriada — susurro, vuelve a separar los labios y entre cierra los ojos cuando la mano que seguía el recorrido llega a su destino, y mis dedos se deslizan entre sus pliegues

Vuelvo mi boca a sus pezones mientras empiezo una caricia suave, que la tiene con gemidos inconsientes, muevo mi boca hacia su otro pezón, su piel se marca con facilidad, por lo que ahora no solo sus pezones están erectos ahora están pidiendo a gritos que los consuma por completo dejo una mordida ligera que la hace dar un pequeño grito, y llevo mis dedos a su entrada luego de rozar su clítoris

Necesito ir más allá,  por lo que luego de dejar otro mordisco en su pecho, sigo bajando, caliento su piel, que se eriza y llevo mi vista hacia sus ojos azules, y bajo con suavidad sus bragas y las llevo a mi bolsillo trasero, separó más sus piernas cuando mi rodilla toca el suelo

Ató sus manos en el centro de su vientre con una de las mías y la otra marca su muslo mientras me dedico a apreciar su coño, cosa que no hago mucho porque de nuevo estoy llevando mi boca hacia su sexo, el cual está húmedo, goteando tanta humedad que solo me pone peor

Libero el cinturón de mi pantalón y bajo un poco para dejar salir mi miembro que respira agradecido, mis ojos vuelven a los suyos, respira acelerada, sus manos luchando con la mía para que la suelte, su labio apresado entre sus dientes viéndose cómo una jodida diosa, entonces si, atacó su sexo

Mi lengua recorre su entrada con vehemencia, adorando cada parte de su sabor, es algo agridulce, junto a la fragancia de humedad que empapa mi lengua y llega hasta mi paladar querido tomar más de lo que puedo, así que lamo, degustó y muerdo un poco su clítoris

Jasmine suelta un pequeño grito, seguido de otro gemido de satisfacción, y un nuevo grito, se retuerce y busca como liberar sus manos, pero su mente está más concentrada en apretar mi cabeza para que no me mueva de mi lugar

Sus ojos se entre cierran y se que está cerca de correrse, yo solo sigo moviendo mi lengua sobre su centro, y llevándola a su entrada, vuelve a gritar, sus piernas flaquean, y la fuerza de su agarre disminuye, las paredes de su sexo se contraen permitiendome apreciar como la toma el orgasmo

Mi boca recibe cada gota y rápidamente me pongo de pie y me quito la camisa en el proceso, relamo mis labios, viendo cómo se recupera de su orgasmo, da un pequeño salto sonriente y me abraza queriendo llega a mi boca, pero la volteo de inmediato

Gruñe en frustración y doy otra nalgada, que la hace respingar, jalo su cabello, su espalda se arquea, sus labios buscan los míos nuevamente y muerdo su cuello dejando otra marca sutil, vuelve a gruñir y la vuelvo a nalguear

Jadea y abre las piernas nuevamente, incluso intenta que Levante la cabeza, se lo concedo y cuando quiere besarme saco su braga de mi pantalón y se la meto a la boca, sus ojos no pueden estar más turbios mientras le pegó mi erección al trasero y la arrastró al sofá donde la tiro, ya no hay sutileza o la apreciación como cuando le estaba comiendo el coño, cae de pecho y la volteo luego de dejar otra nalgada a su pecho

Lamo mis dedos que aún continúan con el olor de su intimidad, abre los ojos aún más, lleva su mano a su boca para sacarse la braga, pero no sé lo permito, la meto aún más, mientras me bajo el pantalón, me tiró sobre ella que separa aún más las piernas

No digo nada mientras beso su frente y su boca aún cuando no puede recibir el beso, rueda los ojos y yo llevo mi mano a su cuello, aprieto ligeramente, abre más las piernas y no se cómo eso es posible, vuelvo a apretar su cuello y entonces me deslizó de una sola estocada en su interior, cierra los ojos ante el impacto

Y eso que apenas comienza, vuelvo a salir y entrar un poco mas fuerte

»—¿Te gusta la gloria del infierno, niña malcriada? — Jasmine mueve la cabeza de arriba a abajo, estrello mi cintura con la suya, mientras mi mano se encarga de asfixiarla, veo como de la comisura de su boca derrama saliva, mientras gime y habla cosas inentendibles por el pedazo de tela dentro de su boca

Estoy tan concentrado en follarla, en que sienta los empellones, Jasmine gime, y se retuerce, sus pezones saltan mientras la embisto, puedo notar como lágrimas escapan de sus ojos y como su interior vuelve a apretarme

Mi polla roza sus pliegues con rudeza y su espalda se arquea mientras se desploma y su orgasmo me baña la polla, que la sigue, logro sacarla y llenar su abdomen del semen que derramó, caigo sobre ella recuperando la respiración

Y suelto su cuello, quedó a centímetros de su boca, veo las marcas de mis dedos y sonrió, sacando su braga la cuál está llena de saliva, Jasmine va recuperando la compostura y me observa

Así permanecemos varios segundos mientras extiendo mi mano para apartar el cabello que tiene pegado a la cara, sonrió de lado, sintiendo el ligero temblor de sus piernas

»—No acepto ni quejas ni reclamos, tu pediste esto, así que también te atienes a las consecuencias — murmuró burlón después de ver cómo se limpia las lágrimas que le salieron y en respuesta recibo una boca impactando con la mía