Oscuridad ~ Hoffman #4

CAPITULO 44

Jasmine

Miro por la ventana mientras algo en mi se resiente, como si todo estuviera mal, que estoy en alerta, en todo momento, como si algo hubiera cambiado desde que Aubrey regreso de Colombia

Como si todo pendiera de un hilo que está a punto de quebrarse

Suspiro, viendo la puerta esperando que Aubrey entre por ella, salió desde esta mañana y dijo que no se demoraría, y ya el cielo está pintando el artardecer

La puerta se abre y Penélope entra seguido de Rubén que carga a Adael, ambos tienen un bolso grande colgado en su espalda y nos ven

—Aubrey llamo hace 5 minutos, dijeron que tomáramos la mochila de emergencias y que nos preparamos — murmura Penélope sacándome la duda de la cabeza, arrugó en entrecejo

Sin entender porque dijo eso, la puerta vuelve a ser abierta y Aubrey nos mira a todos, se acerca hasta mi y me da las llaves del auto, tocando lo rostro para que lo mire

—Deben irse ahora — expresa, soltando mi cara y caminando hacia un lado de la puerta, presionando un botón que abre una pared falsa donde saca la mochila de emergencias, seguida de otras armas que el guarda en los bolsillos de su cuerpo, dejando una extendida para mí

—¿Que está sucediendo, Aubrey? — pregunto, escuchando el nombre de Alana, que sale de su habitación, seguido de su perro, tomo el animal y sigo a Aubrey cuando abre la puerta del departamento, bajamos las escaleras deteniendonos frente al Audi — ¿Que sucede? — vuelvo a preguntar

—Tenemos una ventaja, ¿Recuerdas cuando te lleve a ese granero y te enseñe a conducir la avioneta? — asiento sin comprender, me pasa la pistola y se acerca un paso más — debes conducir hasta allá, y volar a Ámsterdam, puede que aterrizando ya las estén esperando, así que deben llegar hasta la casa de los Hoffman, y usar ese toque que te enseñe, allí los protegerán

—¡¿Que mierda está pasando?! — grito desesperada, pero Aubrey vuelve a ignorar mi pregunta, dándome la espalda y llegando hasta Penélope

—Ellos cumplirán lo que yo debería,  no las dejarán solas, así que debes dejar el miedo de lado, se lo que significa para ti, pero piensa en Adael — murmura, Penélope lo mira como yo, confundida, mientras Aubrey se acerca a Adael y le murmura que cuide mucho a su madre, presiona entonces el cuello de Rubén — cuidalos con tu vida, mira que voy a tomar cada rincón de la tuya y las haré pedazos, como les pase algo...

—Aquí también está mi hijo — refuta Rubén, desliznadose en el auto, seguido de Penélope y Adael

Aubrey, los mira antes de ponerse sobre su rodilla llevando las manos a su nuca donde quita una sencilla cadena que rara vez se quita, y se la coloca en el cuello a mi hija

—Cuidala por mi — munura y se acerca más hasta mi hija, le sostiene las mejillas y pega su frente a la suya — al igual que a mamá, ¿Recuerdas lo que te enseñe? — luego de que Alana asiente, Aubrey sonríe y le aprieta las mejillas — nunca has llorado, Alana, no lo hagas ahora

Me acerco y veo a mi hija reprimir las lágrimas y asentir luego de rodear el cuello de su padre, se dicen más cosas que no entiendo, y al final mi hija sube al auto, esperando por mi

—¿Que está pasando? — pregunto de nuevo, Aubrey se acerca y me extiende una pequeña USB que guarda en mi mano

—Cuando llegues a Holanda, esto te dará la respuesta — expresa — te escogí como mi mujer porque vi en ti la misma oscuridad que yo manifestaba, y no me arrepiento de mi desición, fuiste la mejor elección que hice, ahora tienes que irte de aqui y poner a salvo a nuestra hija, se que ellos te cuidarán...