31. I'll take an extra, in case you forget.

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•SingEiji.

•Último día de octubre.

Fumar, para muchas personas eso no era saludable, para otras era el cielo mismo, para Sing era algo que lo sacaba de sus pensamientos y al mismo tiempo hacia que pensara en ellos detenidamente, ayudaba a su estrés y hacia que se relajará un poco a...

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Fumar, para muchas personas eso no era saludable, para otras era el cielo mismo, para Sing era algo que lo sacaba de sus pensamientos y al mismo tiempo hacia que pensara en ellos detenidamente, ayudaba a su estrés y hacia que se relajará un poco aunque para su pareja era algo que lo podía matar, su pareja era muy inteligente y precavido en el momento de la salud y comidas, aveces era exagerado en estos temas pero con el tabaco siempre le decía lo mismo: eso es malo, te darán enfermedades si sigues así, esta mal eso, o aveces simplemente se le salían los pensamientos de: te ves atractivo con eso, eso es malo pero te ves bien, por eso y más lo amaba.

Amaba a Eiji Okumura.

Toda su vida se la paso solo sin nada y solamente encerrado en su cuarto haciendo sus tareas y trabajos que pedían, aveces jugaba con su vecino pero no siempre lo hacían así que era el solamente, el y su hermano vivían juntos así que solo eran ellos que aveces eran "el y yo" y no juntos, así que no importaba tanto, no fue hasta que conoció a Eiji Okumura en la biblioteca pública de Nueva York, lo encontró leyendo varios libros que supuso que era para trabajar, no pudo evitar sentarse frente a él para poder ver ese bonito rostro que tenía.

Las personas pueden enamorarse de la forma física de alguien en cinco minutos, de su personalidad en tres horas y amar todo de esa persona en tres meses, y cree que eso le sucedió al conocer a Okumura. Amo esos ojitos chocolate que se centraban en las letras escritas en el papel que tenían sus manos, ese bonito cabello negro que tenía era su perdición, definitivamente ama todo de el así que no le molesto demasiado pedirle un café extra para que el pudiera seguir estudiando en paz, el chico lo vio curioso ante esto pero no dijo nada más que agradecer sobre el gesto.

De un momento común y corriente a un matrimonio feliz de ya tres años, todas las cosas que antes eran comunes eran ya una sensación bonita y diferente que antes, definitivamente ama todo lo que el provocaba y amaba como aunque odie que fume siempre carga un encendedor con el con cualquier cosa por si se le olvida a Sing.

—Sabes que lo odio —. Murmura con un bufido el japonés mientras se recarga en el barandal del valcon.

—Lo siento, no lo pude evitar —. Dice mientras busca con la mirada su apagador pero no lo encuentra así que con su palma lo busca sin éxito hasta que Eiji le estira su botecito —. Gracias.

—Aveces te olvidas de las cosas que dejas, deberías de prestar más atención.

Y claro que el japonés lo regaña porque es la madre del grupo.

Y claro que ama eso porque es terco y le gusta que lo dominen.

Lo mira con amor y besa su frente, le gusta cuando solo son ellos dos y nadie más, le gusta que solo tengan momentos así donde no existe nadie más y están están su propio mundo lleno de amor y comprensión.

Ama demasiado eso.

Y le encanta saborear sus labios cada que se besan, el sabor del tabaco se mezclaba con el dulce sabor de fresas que tenia sus labios haciendo un sabor un tanto extraño pero no le importa y siguen en su momento romántico, se siguen besando lentamente hasta subir de intensidad y cuando el oxígeno hace falta se separan lentamente sin necesidad de apresurar nada dejando leves roces en sus labios, una vez ya lejos solamente se sonrieron y decidieron ir a dormir.

Ya acostados y arropados Sing puede jurar que esta soñando, un tiempo pensó que seria un sueño sin nada de gracia donde ambos eran felices y no hay maldad en el mundo, otros donde son una pareja  normal donde cocinan juntos y juegan a ser recién casados y hacen algún platillo entre jugueteos traviesos, donde el peli-negro camina hacia al altar con un traje hermoso blanco que parece un ángel con el o algo por el estilo, donde están felices y estar en ese momento justo donde tiene al japonés encima de su pecho mientras tiene una respiración lenta y tranquila mientras duerme sin alguna preocupación es hermosa.

Le encanta saber que aún entre tantos problemas pudo salir adelante y estar casado con su chico.

Le gusta esta sensación y se permite deleitarse lentamente sobre esto.

Le gusta que el peli-negro siempre le dé las cosas cuando a él se le olvida, su bonita voz cuando le dice "Sing olvidadizo, presta atención" y lo desobedece solo para oírlo refutar sobre eso y darle un regaño tierno con eso de tema o cualquier otro tema en especial, sonríe viendo sus cabellos desordenados y el como se acurruca más en su pecho desnudo le causa ternura, lo ama con locura así que no permite nada de maldad cerca de ellos aunque suene tóxico pero no importa porque ambas partes saben que no es por eso.

—Vamos a hacer las compras amor.

Y aunque odie despertarlo lo levanta lentamente para ir hacer sus respectivos trabajos para poder seguir sus días normales y de más, se levantan de la cama y se visten correctamente para salir de su hogar y ir a comprar cosas de despensa de más, danzando en sus propios pasos con música invisible e imaginaria que sólo oyen ellos dos, caminan entrelazados de las manos todo el trayecto y mientras compran sus cosas necesarias siguen así, con confesiones divertidas y aveces entrecortadas por lo tímido que es el japonés al decir algo vergonzoso sobre el atractivo de su esposo o algo por el estilo, años de casados y de noviazgo y no se cansará de molestar con eso al chico.

—¿Qué iba a llevar...? —. Pregunta en un hilo de voz el japonés mientras pone su mano en su mentón como si fuera un detective buscando la solución de algo.

—Amor, traes la lista —. Y claro que su esposo siempre está para el y le extiende la nota donde tiene todo anotado y ve que le hace falta para luego tomarlo.

Ambos están con el otro cuando más lo necesitan.

Están bailando en su propio mundo de cuento de hadas.

Están para extenderle las cosas cuando se les olvidan y poder seguir así.

N/A: de verdad agradezco a todos los que votaron y comentaron en esta historia, siempre me alegraban los días saber que alguien leía esta historia y que les gustaba como para leer todos los días sin falta aún si tenía algunos errores, de verdad ag...

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N/A: de verdad agradezco a todos los que votaron y comentaron en esta historia, siempre me alegraban los días saber que alguien leía esta historia y que les gustaba como para leer todos los días sin falta aún si tenía algunos errores, de verdad agradezco de todo corazón a todos pero más a Tsundere_Kitty porque gracias a ella esta historia se subió ya que me metió al Flufftober en una de sus historias, muchas gracias preciosa de verdad estoy agradecida ♥️.

Espero que nos volvamos a ver en una futura historia de este bonito fandom de Banana Fish, estoy planeando entrar al omegadecember pero todavía no se así que es cuestión de tiempo, no me alargo más así así agradezco todo, lo repito aunque parezca disco rayado, muchas gracias.

We feel in love in octoberDonde viven las historias. Descúbrelo ahora