Regreso a los años 60's: Cultiva, hazte rico y cría a los cachorros

Capitulo 12: Necesito comprarlo tarde o temprano

"Cuarta cuñada lo dio". Tercera cuñada explicó.

Eran casi las seis en ese momento, pero el cielo aún estaba brillante. Ahora el cielo puede empezar a oscurecerse alrededor de las seis y media.

Así que la Tercera Cuñada sacó la tela y el algodón.

Zhou Qing Sen entendió entonces. La esposa de Cuarto quería hacer ropa: "¿No es capaz de hacer ropa sola? ¿Cómo puede soportar darte dos libras de azúcar morena para que la hagas?"

"Ella no sabe cómo hacerlo para Da Wa y los demás. Así que, naturalmente, solo me lo pueden traer para que lo haga". Las manos de la Tercera Cuñada comenzaron a moverse mientras su boca se aclaraba.

Hacia su propia habilidad, todavía tenía mucha confianza.

"¿Está usando una tela y un algodón tan buenos para hacer ropa de invierno para Da Wa y otros?" Zhou Qing Sen estaba realmente sorprendido.

"Al final, ella es su madre biológica. Y lo que es más, los hermanos realmente no tienen ropa de algodón este año", continuó la Tercera Cuñada.

"Madre, ¿Cuándo tengo ropa nueva para ponerme?" Zhou Wu Ni miró la tela y el algodón con cara de envidia.

Ella realmente quería ser la hija de la Cuarta Tía, porque la vida de la Cuarta Tía era realmente buena. Da Wa y los demás no necesitaban recoger estiércol de vaca para ganar puntos de trabajo o incluso recoger espigas de trigo en el campo. Todos los días tenían que jugar.

"Mamá te había buscado. Estas telas y el algodón tendrán sobras después de que termine el juego de los hermanos. Y mamá todavía tiene algunas telas sobrantes guardadas. Cuando llegue el momento, agrega ese poco, y tendré suficiente para hacerte un chaqueta nueva". Dijo la tercera cuñada.

"Entonces madre, date prisa", gritó Zhou Wu Ni con entusiasmo.

Luego, Zhou Qing Sen comentó: "Tienes una barriga tan grande que todavía te hace hacer ropa".

"Es porque vio que tengo una gran barriga, de lo contrario, ¿por qué puede soportar darme dos jin de azúcar moreno? Se ve de primera calidad. El último juego que me pidieron que hiciera para Da Wa y su hermano es lo que los hermanos están usando actualmente para el otoño. Entonces me dio tres huevos", dijo la tercera cuñada.

Madre Zhou no confiscó los dos jin de azúcar morena, sino que la dejó almacenarla. Así que la Tercera Cuñada estaba especialmente satisfecha con esto.

El azúcar moreno era un producto escaso. Y eran dos jin.

Zhou Qing Sen no dijo nada. Su esposa no tenía miedo de cansarse, en cambio, estaba encantada.

La gente de esta época estaba interesada en ahorrar queroseno. Después de todo, el suministro era limitado todos los meses. Así que se acostaron temprano.

Eran solo las ocho en punto, y la Madre Zhou y el Padre Zhou se fueron a dormir al Kang.

La madre Zhou mencionó sobre los asuntos de hoy: "La esposa del cuarto me invitó a comer un plato de huevo y carne de cerdo magra hoy".

"Ya que ella lo dio, cómelo". El padre Zhou estaba cansado. Ganó diez puntos y estaba muy agotado.

"Esas telas y el algodón están en buenas condiciones. Pensé que lo iba a hacer ella misma. No esperaba que fuera para Da Wa y sus tres hermanos", continuó la Madre Zhou.

Hoy, ella no trabajó, por lo que acaba de escuchar a los aldeanos decir que la esposa del cuarto fue al mercado nuevamente. Sólo entonces fue a ver a los hermanos. Escuchó que volvió con un paquete grande.

Dos jin de algodón y tela eran realmente suficientes para un paquete grande. Nunca esperó que fuera comprado para sus tres nietos.

"Ella es la madre de los hermanos. No importa lo mal que pueda ponerse, todos son carne que se le cayó del estómago". El padre Zhou tenía sueño pero aun así respondió.

Aunque tenía algunas opiniones sobre la Cuarta Nuera, no había nada de qué quejarse, ahora que estaba feliz de hacer abrigos de invierno para sus nietos, y también de huevo y congee de cerdo magro para comer.

"Es que es demasiado derrochadora. Tela, algodón, huevo, carne de cerdo magra y dos jin de azúcar moreno. Por su apariencia, creo que está familiarizada con el mercado negro. Definitivamente no queda mucho de la asignación mensual enviada por el cuarta hijo, ciertamente no queda mucho dinero. Le dije que ahorrara un poco de dinero y me encontró entrometido". Dijo la Madre Zhou.

El padre Zhou ya había roncado. Estaba claro que se quedó dormido.

Madre Zhou no dijo nada y pronto se durmió.

El resto de la antigua familia Zhou estaba en un estado similar.

En cuanto al lado de Lin Qing He, ella estaba dando vueltas,

Era demasiado temprano para dormir a las ocho en punto. Era un día moderno, su vida nocturna aún no había comenzado.

Sin embargo, entró al campo, por lo que solo puede seguir la costumbre. Los dos grandes de la habitación contigua ya estaban profundamente dormidos. Como Zhou San Wa aún era joven, se acostó con ella.

Antes de irse a la cama, Lin Qing He calentó el tazón de sopa de sopa sobrante de la cena con agua hirviendo y lo repartió entre los hermanos.

Eso sí, antes de acostarse les dio tres baños. Los tres hermanos lavaron y ennegrecieron toda el agua. Luego los ahuyentó para que fueran con Kang y los mandó a dormir.

Lin Qing también se lavó en la oscuridad. No era bueno estar sin un baño separado.

Acostada en la cama, su mente divagaba. No sé cuándo se quedó dormida. En medio de la noche, según el instinto del propietario original, se levantó y mandó a sus tres hijos a orinar para evitar que orinaran en el Kang y tuvo que limpiar...

Porque durmió demasiado temprano anoche, Lin Qing se levantó muy temprano al día siguiente. Tan pronto como vio que los tres niños todavía estaban dormidos, se refrescó primero.

Luego se ocupó en la cocina.

Esta mañana cocinó gachas de mijo, pero no había carne, solo gachas de arroz. Además de las gachas de mijo, había dos bollos blancos.

Pensando en el pan blanco, recordó las 500 reservas de pan con la tía de la tienda de desayunos. Eso realmente dolió...

Pronto la papilla estuvo cocida, y el gran bollo blanco también estaba caliente y fragante.

Ella gritó en la habitación. Zhou Da Wa y Zhou Er Wa se levantaron, se vistieron rápidamente y luego se bajaron del Kang. Debajo había un conjunto de tocones de madera altos y bajos, casi como el papel de una escalera para que los hermanos pudieran subir y bajar más cómodamente.

Lin Qing Luego entró, despertó a San Wa, lavó la cara del niño y luego lo sacó.

"¡Madre, hay grandes bollos blancos!" Zhou Da Wa se lavó la cara y corrió. Sus ojos se iluminaron.

"Ve a cepillarte los dientes". Lin Qing instruyó.

"¡Madre, no me compraste un cepillo de dientes!" señaló Zhou Da Wa.

Lin Qing Solo podía dejarlo comer, y luego comenzó a pensar en cuándo volver a hacer un viaje.

Acababa de visitarla ayer, así que ir allí hoy fue un poco exagerado. La parte más importante era qué hacer con los tres niños de la familia. Ir del pueblo a la cooperativa de oferta y demanda del pueblo fue más fácil para ella que para el dueño original, quien no escatimó esfuerzos para correr a la cabecera municipal a comprar algodón y telas. Pero aun así, necesitaba al menos una hora para viajar desde aquí hasta las cooperativas de oferta y demanda del pueblo.

Pero si no iba, todavía quedaban muchas cosas por comprar en casa.

De hecho, de acuerdo con el nivel de vida ideal del propietario original, los artículos de la familia eran bastante completos en comparación con las familias de otras personas. Pero en opinión de Lin Qing He, todavía se necesitan muchas cosas.

La propietaria original solo se había ocupado de sí misma. Cepillos de dientes, otros elementos esenciales de higiene, el balde para el baño de pies, solo quedaba su parte. Los niños no tienen ninguno. compartían un lavabo.

Ahora eran jóvenes, pero no funcionará cuando crezcan.

De todos modos, era necesario tarde o temprano, entonces, ¿por qué no comprarlo temprano?

Aunque planeaba volver a ir, Lin Qing He no fue ahora. Decidió dejarlo unos días después.

En unos días, la cosecha de otoño en el pueblo habrá terminado por completo. Luego, puede dejar a Er Wa y San Wa en la casa del anciano Zhou para ayudarla a cuidarlos.

En cuanto a Zhou Da Wa, no tenía que preocuparse por eso. Puede salir y jugar solo.

Por la mañana, comieron gachas de mijo, acompañadas de un delicioso panecillo blanco. El relleno de este bollo fue particularmente suficiente. La carne, la mitad del huevo y el repollo les bastaron para comer como plato con las gachas.