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Min Yoongi no era alguien de salir y pasar tiempo con otras personas, pero cada vez que podía inventaba alguna escusa o sin rodeos le pedía a Jimin para verse; no importaba si solo eran unos minutos, él adoraba cada momento junto a su "esposo". Yoongi sabía que ya era demasiado tarde para retroceder y dejar de lado sus sentimientos, por lo que ya harto de no poder demostrar su cariño, decidió confesarse sin esperar nada a cambio.

Ahora mismo se encontraba un tanto nervioso mientras esperaba a Jimin, ambos habían acordado reunirse para cenar en su departamento. A pesar de que cada uno llevaría algún platillo, Yoongi estaba cocinando para disipar los nervios.

Debía admitir que la atracción que sentía por Jimin le resultó un tanto rápida. Sin embargo, todo pensamiento malo se iba al ser consciente de todas las veces que pasó momentos divertidos junto al otro.

Al escuchar el timbre, deja rápidamente lo que se encontraba haciendo y con paso apurado va hacia la puerta, donde ve por la pantalla aun lado de ésta a la persona del otro lado. De inmediato abre al tratarse de su cita.

-Hola Yoongi -. Saluda el invitado con una gran sonrisa, sin pensarlo se adentra al departamento y muestra una bolsa que traía en mano-. Traje un poco de soju y helado, de tus favoritos.

-Jiminie... -ver lo bonito que le quedaba el atuendo lo había dejado un poco atontado-. Yo estaba terminando de preparar tu platillo favorito, si quiere puedes guardar el helado.

Al cerrar la puerta, ambos se dirigieron a la cocina con cierta naturalidad que ninguno se percató.

-Huele delicioso, hyung.

Apenado, Yoongi solo se centra en terminar de picar el verdeo que le faltaba. Mientras que la ruidosa risa de Jimin se escuchaba.

[...]

Ambos ya habían acabado sus platos, solo que los vasos de soju no acababan

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Ambos ya habían acabado sus platos, solo que los vasos de soju no acababan. Tal vez ya iban por su quinto shot, o más. Pero ninguno sentía aún el alcohol. O eso creían.

-Hoy te ves muy bonito, Jimin-ah -la voz del mayor salió un tanto grave, lo que causó un pequeño estremecimiento por parte del susodicho.

-No digas tonterías, Yoon. Solo me puse algo simple. -argumento con sus mejillas doliendo de tanto sonreír. Evitó ver a su acompañante que se encontraba a un lado.

-¿Qué dices? Eso es lo que te hace bonito ante mis ojos... -siguió hablando viendo con cariño al contrario, si seguía bebiendo tal vez se arrepentiría por su gran boca suelta.

Yoongi no solía beber porque sabía que el alcohol lo hacía hablar, hablar y hablar hasta por los codos. No podía guardar nada, cualquier cosa que se le cruce, él lo diría. Por ello, bajo los efectos del soju, soltaba aquellos sinceros halagos hacia su compañero.

Intercambio de novio.〔yoonmin〕Donde viven las historias. Descúbrelo ahora