Kikyo Higurashi

204 15 0
                                    

Disclaimer: Los personajes y la historia no son míos. Los personajes son de Rumiko Takahashi y la historia es de Wolf Blossom, yo únicamente traduzco.

-x-

Menudo viaje va a ser este, pensó Sango.

-x-

Más tarde, después de que se fueran todos, Kagome, Inuyasha, Muteki, Izayoi, Rin y Riku se preparaban para cenar. Sesshomaru e Inutaisho estaban a punto de llegar a casa.

—Así que habéis decidido casaros, ¿eh? —Rin sonrió.

—Sí —dijo Kagome.

—¿Inuyasha te dio un anillo? —preguntó Izayoi, lanzándole una mirada a su hijo.

—Sí, incluso me pidió matrimonio —dijo Kagome mientras les enseñaba el anillo a Izayoi y a Rin.

—Es un pedazo anillo, ¡maldición, Sesshomaru ni siquiera me dio uno parecido a este y vosotros dos ni siquiera estáis enamorados! —gritó Rin—. Voy a gritarle en los oídos como si no hubiera un mañana. —Rin sonrió.

—¿Gritar en los oídos de quién? —preguntó Sesshomaru a la vez que Inutaisho y él entraban en la cocina.

—¡EN LOS TUYOS! ¡INUYASHA LE DA A SU CHICA UN ANILLO BONITO! ¡Y TÚ ME DISTE UNA VERSIÓN BARATA DEL ANILLO BONITO! —gritó Rin.

—Y ni siquiera están enamorados —puntualizó Izayoi, encantándole la forma en la que su nuera le estaba gritando a su hijo.

—Pero tu anillo tiene más valor sentimental —dijo Sesshomaru.

—¡NO ME IMPORTA! ME COMPRASTE UN ANILLO BARATO... Oh, sí, y estoy embarazada de dos semanas. —Rin sonrió. Sesshomaru abrió los ojos desmesuradamente mientras la miraba fijamente.

—¿Qué?

—Fui ayer al médico, estoy embarazada...

—Oh, no —dijo Sesshomaru mientras se sentaba, rascándose la cabeza.

—¿Tan pronto empiezan los cambios de humor? —le preguntó Inuyasha a su madre.

—En algunos casos. Rin, ¿crees que podrás comer? —le preguntó Kagome a su futura cuñada.

—Probablemente —dijo Rin. Inutaisho y Sesshomaru se sentaron, Sesshomaru le lanzaba miradas a su esposa.

—Espero que sea una niña. —Kagome sonrió finalmente cuando se sirvió la comida.

—Eh, ¿por qué? —preguntó Inutaisho.

—Porque Muteki y Riku necesitan una hermana en sus vidas, los dos no pueden depender del otro, necesitamos la inteligencia de una niña para guiarlos —dijo Kagome descaradamente.

Sesshomaru enarcó una ceja.

—¿Y vosotros os vais a casar pronto?

Inuyasha asintió.

—Sí, ¿por qué?

—Entonces, ¡soy la ORGANIZADORA DE LA BODA! —chilló Rin. Kagome tosió.

—En realidad, quiero contratar a alguien, Rin.

Rin hizo un puchero.

—¿Madrina?

—Sango —dijo Inuyasha directamente.

—¿Dama de honor? —dijo Rin suplicante.

—Si no eres un tomate para entonces —dijo Izayoi con una carcajada.

Te desafíoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora