Especial porque quiero (quería celebrar las mil lecturas en su momento) y quiero cumplir con esto:
Guahahahaha(?-
Pues ahora si ya empecemos
•=•=•=•=•=•=•=•=•=•=•=•
Habían ido a pasar un par de semanas en una casita de campo, habían tres habitaciones, la más grande que compartían los niños y dos más pequeñas en donde dormían los padres.
Esperaban pasar un buen rato tranquilos en el campo, alejados de todo.
Pero bueno, eso era lo opuesto a lo que estaba pasando; se estaban peleando, ¿la razón? Celos, de parte del monarca; algo un poco irónico, ya que en ese momento no eran nada.
Aún así sintió que debió hablar con la gran colombiana cuando regresara de su salida con la rioplatense, en la noche.
Lo peor es que lo hizo como un reclamo, como si le tuviera que dar explicaciones; repito, irónico, ya que no estaban en una relación, además ¿que había explicar? Solo fue una salida de amigas/aliadas.
Y para la cereza del pastel; él sabía a la perfección que esa mujer lo amaba.
Pero como dijo el difunto Vicente Fernández:
🎶Estos celos míos, me hacen daño, me enloquecen🎶La colombina había llegado feliz y sonriente a la hacienda, pero; cuando la conversación tomó aquí el rumbo, ella se defendió; la última vez que le habían reclamado de esa manera fue cuando seguía en su primer matrimonio.
Había empezado como algo pequeñito, pero se volvió grande a tal punto de que estaban alzando la voz aunque no querían gritar fuerte, ya que era de noche y los niños estaban dormidos.
[Pero pues si despertaron a Ecuador y se levantó de su camita y los vió peleando y fue corriendo hacía la habitación (para contar el chisme) pero se cayó unas tres veces.(F)]
Hubo un poco mucha pelea, pero a nosotros sólo nos importa una parte:
—¡No deberías andar con ella!—insistía el latino.
—"Ella" tiene un nombre y lo conoces bien, se llama Provincias Unidas del Río de la Plata y también sabes que es mi amiga.—
—¡Tú no sabes sus intenciones!—
—¡La conozco mejor que tú; tú solo vez el lado que tú te dejas ver a ti mismo porque tu orgullo no te permite llegar a ver más que eso!—
—Dios, tú no entiendes!—
—Yo no te entiendo a ti, qué es eso que según tú?—tan pronto terminó de decir aquello el brasileño la tomó con fuerza de los hombros.
—Tú le gustas, acaso no te das cuenta? Ella se acerca a ti como una amiga para luego esperar un momento de vulnerabilidad tuyo para seducirte!—
La bolivariana bajo la cabeza, no supo responder, simplemente no podía procesar bien lo que le dijo el monarca; su mente ya había empezado a conectar todas las situaciones que había vivido con la rioplatense con el tema.
—Y yo soy igualito a ti! ¡Jesucristo! Años son los que se llevan el acontecimiento de tu enamoramiento y mi realización sobre él, para colmo que no lo descubrí solo.—la colombiana levantó la cabeza con asombro mientras que el luso hablante lo entendía.—Pero ahora hasta me superas, porque tú tampoco te has dado cuenta de mí amor hacia ti.—
Ahora la hispana simplemente no podía ni pensar con coherencia; le habían dicho que su mejor amiga estaba enamorada de ella y que aquel que era [hasta cierto punto] su platónico le correspondía, aún estaba agarrando señal.
Y el brasileño no era muy diferente; mientras la seguía sosteniendo a la granadina, sólo se miraban, como si estuvieran a la espera de algo.
Y pasó lo inevitable; el brasileño acercó a la colombina y ella lo tomó del cuello con rapidez en lo que resultó un apasionante beso.
Sus bocas prácticamente se devoraban la una a la otra, eran pocas pausas para respirar, aún así no les importaba.
Con la misma fuerza con la que agarró a los hombros, tomó sus muslos y la elevó sin dejar de besarla, ella se enredó sus piernas de la cintura y sus brazos en el cuello de su enamorado.
Sus labios ya parecían entrarse mezclando entre sí cuando:
—Mami, qué haces con el señor Imsil??—preguntó la venezolana con duda.
—Se ve divertido.—comentó sonriente la colombiana.
—Pai, ¿Puedo hacer lo mismo con Colombia?—dijo con ilusión el brasileño menor.
Los mayores habían detenido cualquier acción para pensar en que mrd responderles a sus pequeños e inocentes hijos.
Lo primero que hizo la gran colombiana fue bajarse de los brazos del monarca para acercarse a sus primogénitos.
—Mis niños, que hacen despiertos?—
—El ruido nos despertó.—respondió el ecuatoriano.
—Bueno—volteó a ver a su segunda hija—la respuesta a tu pregunta mi amor, eso fue un acto de verdadero amor, sí quieres hacerlo con alguien, que sea con aquella persona con la que quieras pasar tu vida; entendido nena?—habló mientras jugaba con el pelo de su hijita.
El brasileño mayor miró embobado a la granadiense, hasta que su hijo lo sacó de su burbuja.
—Papá, cuál es la respuesta?—volvió a preguntar su hijito, sintiéndose ignorando.
—Ah- sí pues, tú la quieres mucho?—el menor asintió—entonces si puedes, pero sólo si ella quiere, está bien?—volvió a asentir.
Y no se ustedes, hasta creo que se puede saborear lo dulce que iba a ser su vida desde ese momento.
•=•=•=•=•=•=•=•=•=•=•=•
Siento que quedo feo 😭😭
Pero exis, se hizo con amor (y algo de prisa pero más amor-)Espero que les haya gustado, no olviden dejar su estrellita ⭐️
ESTÁS LEYENDO
Imperio de Brasil x Gran Colombia Stuff;;
Fanfiction💕🇨🇴🌿x🇧🇷👑💕 Headcanons, incorrect quotes, (posiblemente one-shots y dibujos si la pereza no mata?) y demás cosas de mi AU sobre esta OTP. Pienso poner gay, lésbico y hetero (Fem!Imperio & Male!Gran), pero principalmente será Male! Imperio Bras...