SEUEPEPMYELNB

[CAPITULO 7]

"Vine aquí porque quiero matar a alguien".

Aterradoramente, Félix dijo eso con una risa amenazadora. Su pelo blanco y sus ojos verde oscuro brillaban.

Se veía completamente diferente al A-888 que había conocido antes. Tal vez porque sabía que era [t1v: ¿el futuro?] duque de Magnolia. Sabía que había entrado en el laboratorio Arsene. Pero no tenía idea de que había ingresado como clase A. De hecho, la infiltración fue mencionada muy brevemente.

Ni siquiera sabía si había encontrado y matado a la persona que estaba buscando.

"Su sangre huele bien, como la tuya".

La sangre goteaba de la punta de mi dedo y corría por el dorso de mi mano. Goteaba hasta el suelo en un charco redondo.

"Por qué, di-dirías que..."

"Derecha."

Él sonrió y tomó mi mano que estaba sosteniendo. Luego lo acercó a su cara, como si estuviera olfateando mi olor. El miedo se apoderó de mí y tiré de mi mano.

"No juegues".

"Jajaja."

Él sonrió y di un paso atrás un poco aliviado de ser liberado.

– ¡Bip!

"A-702, A-888".

Una investigadora de la que normalmente habría tenido miedo, ahora se sentía muy bien acogida.

"¡Sí! ¡A-702!"

"Sí, A-888".

"Una vez que hayas terminado, pasa al siguiente laboratorio".

"¡Sí!"

"Sí."

Mi mano hormigueó pero lo puse en el fondo de mi mente. Tenía tantas tareas que hacer que el tiempo de un día completo no sería suficiente para completarlas todas.

Pronto sería la hora del almuerzo.

Félix no volvió a hacer nada raro después de eso, así que me sentí afortunado.

"A-702 ha recibido la comida designada".

"Próximo."

"A-100 ha recibido la comida designada".

"Próximo... ."

Cuando llegó el momento de volver a encontrarme con Kalisten, sentí cierta anticipación.

"Tú, ahí, número A-702."

"¡Sí! ¡A-702!"

Me puse de pie con la espalda recta, con los hombros hacia atrás, a la llamada del investigador. Luego me dio una llave.

"Lo necesitaras."

"Gracias."

No estaba agradecido, pero si no decía gracias cuando recibí algo, podría haber represalias.

Inconscientemente, mis ojos fueron atraídos hacia la celda donde estaba Kalisten.

Tal vez Kalisten no sea una mala persona. Tal vez es solo que la forma en que se expresa no es buena. Estaba tratando con todas mis fuerzas de ser positivo y pensar lo mejor de él. Teniendo en cuenta que me quedaban 14 días, solo tenía que ser lo suficientemente importante como para evitar que me matara.

– ¡Bip!

Las puertas se abrieron al unísono y reconocí que estaba en un estado más miserable que antes.

Caminando hacia adelante al unísono, también entré en el espacio designado en la fila. Z-999, Kalisten se despertó con el sonido de mi entrada.

Esta vez tenía un dispositivo de mordaza en la boca. La llave que recibí antes de entrar debe haber sido necesaria para esto.

En la bandeja había unas cuantas pastillas, sopa de maíz, una baguette dura como una roca, una mermelada de manzana que estaba a punto de secarse y un tocino sospechosamente graso incluso para el cerdo.

"¿Hola?"

Dijo que mató a Aselia porque no se reía, así que ahora iba a sonreír cada vez que nos encontráramos.

Lo saludé con una sonrisa y él me miró con frialdad.

Dejé el plato cerca e inserté la llave que había recibido en el ojo de la cerradura al lado de su boca. Al girarlo, el dispositivo cayó al suelo con un 'clic'.

"Tú."

"Sí."

"Tu mejilla."

Debe haber estado molesto porque me dieron una bofetada en la cara por su culpa.

"Estoy bien. Estoy acostumbrado a este tipo de trabajo".

Pensé que estaba preocupado ya que su expresión cambió sutilmente, así que agregué eso tratando de minimizarlo. ¿Quién se preocupaba por quién?

Parecía no tener idea de cómo se veía ahora.

La apariencia de Kalisten fue desastrosa. Todo su cuerpo estaba atado, y parecía que el 'estímulo' dado en la prueba de la mañana era el dolor físico.

"Disculpe, Z-999".

"...."

"¿Puedo limpiarte la cara?"

Me miró de nuevo. Luego, después de que él miró hacia abajo, sentí como si la pantera me hubiera dado permiso, así que sonreí y eché un poco de agua en el paño seco que llevaba.

"¿Por qué te metes en problemas si no como?"

"Uh... esa es solo la regla. Es mi culpa si estás herido.

"¿Las personas que más me lastiman dicen eso?"

"Tienes dolor, Z-999".

Mientras Kalisten me miraba tan intensamente, de repente entré en pánico y casi evité su mirada. Lo había pensado antes, pero Kalisten parecía ser muy bueno hablando con los ojos. Si estaba disgustado o enojado.

"Sabes, Z-999, espero que no te lastimes".

"Disparates."

"Sí, es una tontería, así que puedes ignorarlo".

Luego le limpié la sangre seca de la cara. Había gruesas manchas de sangre cerca de las orejas, y parecía que el psíquico sanador las había curado bruscamente.

Se quedó callado para que pudiera lavarle la cara. Estaba desconcertado por sus brillantes ojos rojos siguiendo cada uno de mis movimientos, pero aun así fingí no verlo y continué limpiándolo.