[CAPITULO 47]

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"¿Por qué tus pies son tan pequeños? ¿Es esto también una ilusión?

"Mis pies... no. Parece que tus manos son así de grandes".

Mientras Kalisten me llevaba en la espalda, él sostuvo mi pie, luego comenzó a acariciarlo y apretarlo.

"Tengo cosquillas, así que ah..."

"Oh, lo siento."

Intenté lavarlo, pero volvió a tocarme el pie y me retorcí.

"Tus pies son tan lindos".

"Creo que estás siendo demasiado honesto con tus pensamientos".

Respondí a su admisión. Él también pareció pensar lo mismo, porque suspiró un poco y se quedó quieto.

Luego le froté el cuello y luego le froté la espalda. Mientras le lavaba los hombros y la espalda, temblaba como si le hicieran cosquillas.

"Kal, déjame caer".

"Está bien."

Me decepcionó, pero tenía un poco de miedo de bajar porque estaba resbaladizo.

"Lo siento, estoy un poco asustado".

No respondió cuando le expliqué mientras soltaba mis brazos que se habían aferrado a su cintura.

"¿Puedo lavarte ahora?"

Su voz sonaba como si estuviera en lo profundo de una cueva oscura y húmeda. Quizás por eso no podía apartar la vista. Cuando vislumbré sus profundos ojos rojos, me sentí extraño.

"No te he lavado todavía..."

"¿No te gusta?"

"... Eso no es lo que quiero decir."

Pensé que debería detener esto en mi cabeza, pero no podía entender por qué mi boca lo permitía. Supongo que porque en el fondo no odiaba la idea. Sin embargo, estaba avergonzada y no sabía si esto estaba bien.

Pero por alguna razón, cuando lo miré a los ojos, no quise negarme.

"Estoy alucinando ahora mismo, Aselia".

"Sí."

"También había un suero que decía la verdad".

"Si lo se."

No sabía por qué estaba señalando eso de nuevo, pero en lugar de preguntar, lo afirmé y bajé la cabeza, ofreciéndole mi cuello para que me lavara. En cambio, apretó y enjabonó el jabón en sus manos y las puso en mi cuello. Sus manos eran tan grandes que pensé que mi cuello se rompería primero si me estrangulaba.

"Tu cuello también es muy bonito".

"El cuello de Kal es realmente... grueso".

Cuando respondí con algo similar, se rió.

"Es extraño, mis alucinaciones nunca se habían sentido tan reales".

Las palabras de Kalisten hicieron que mi corazón latiera con fuerza. ¿Sabía que estaba mintiendo? Parecía que lo sabía. Mi miedo aumentó, pero también parecía que él no lo sabía.

"Tus hombros también son muy pequeños".

Sus palmas sostuvieron mis hombros, lo cual se sintió extraño porque estaba resbaladizo y cálido. Pronto, su cálido toque descendió desde mis hombros y mis brazos, donde acarició mis codos y luego hasta mis manos.

Sentía sus manos calientes y su palma presionó las yemas de mis dedos. Su toque subió por mis codos hasta mis axilas y lo sentí pesado.

"Aselia."

"Ah, sí."

Estaba aturdido; Fue cuando dijo mi nombre que parpadeé, recobré el sentido y lo miré. Su expresión era oscura.

"Quiero que me mires en lugar de mirar a otra parte".

"Bueno lo haré."

Su mirada viajó hasta mi clavícula. Su pulgar lo rozó. Entonces, su mano, que había estado tocando mi clavícula, se deslizó hacia abajo.

"Ah..."

Lo sentí apretando mi carne tetona, pero no miré hacia abajo. En cambio, seguí mirándolo a los ojos porque Kalisten me había pedido que lo mirara. Parecía estar aplicando espuma, moviendo las manos como si estuviera poseído.

Todo mi cuerpo parecía haberse convertido en puntos sensibles. Cada vez que su mano lo tocaba, la carne frotaba puntos y sentía como si una aguja hubiera penetrado la piel y la hubiera estimulado.

Estaba hirviendo y chisporroteando como si su mana estuviera pasando sobre mí.

"Oh...Kal..."

"¿Es esto realmente una alucinación?"

"Ah..."

Mi cintura tembló de sorpresa ante su agarre giratorio como para confirmarlo. Mi cuerpo estaba reaccionando con mente propia, así que me aferré a su hombro sin darme cuenta.

"Es suave."

"Unh, duele cuando los aprietas..."

Los estaba presionando con los pulgares, pero cuando se lo dije, dejó de presionarlos. Sin embargo, en el momento en que los soltó, pude sentir vívidamente la sensación de mi piel sobresaliendo después de ser empujada hacia abajo. Sus palmas cubrieron mi pecho y luego las acarició, y cada vez que sus manos ardientes rozaban mi carne sensible, me sentía extraña.

"Giro de vuelta."

"Ah, sí."

Sentí que mi mente se quedaba en blanco y se volvía blanca*. [t1v: código para ella está a punto de correrse] Cuando me di la vuelta como me dijeron, agua tibia goteaba por mi hombro. Era solo que el agua definitivamente se había sentido tibia antes, pero ahora se sentía tibia en comparación con sus manos chisporroteantes.

"Oh..."

Su mano acariciando mi estómago se sintió bien. Acarició mi estómago con las yemas de sus dedos.

"Ese es tu ombligo".

"Lo sé."

Su meñique acarició mi ombligo antes de que su mano viajara por mi cuerpo nuevamente. Ambas manos agarraron mi carne regordeta y apretaron su cuerpo contra el mío. Sorprendida por lo fuerte que era su agarre, agarré sus manos y sentí sus abdominales tocar mi cintura.

Mi toalla empapada atada a la parte inferior de mi cuerpo fue empujada hacia arriba y sus duros muslos tocaron mis nalgas.

"Hueles como el mío, Aselia".

"Oh mi ... ."

Entonces una de sus manos soltó un pecho y bajó, acariciando mi cintura. La toalla se soltó de su mano y cayó al suelo.

Su mano masajeando la tierna piel de mi muslo sintió cosquillas, pero jadeé de sorpresa al ver algo como una cola dura apuñalando mi trasero nuevamente.

"Kal-escucha..."

"Puaj... ."

En ese mismo momento-

"¿Kal?"

Su cuerpo se desplomó.

"¡Kal!"

Y luego se desmayó.

SEUEPEPMYELNBDonde viven las historias. Descúbrelo ahora