Sentimientos Incorrectos (Kacchako)

CAPÍTULO 16

-¡Katsuki!...¡Katsuki!

Los gritos que provenía de la primera planta lo despertaron, se fijo en su reloj el cual apenas marcaba las 7:15 de la mañana...se giro para continuar durmiendo pero su mano sintió una tersa piel, abre sus ojos para admirar a la castaña la cual dormía plácidamente con su espalda descubierta, la sábana solo la cubría hasta la cintura, todos los recuerdos de la noche anterior lo azotaron de manera abrazadora.

-¡Katsuki!

El cenizo giro su rostro a su puerta, su madre estaba detrás de la madera, su corazón comenzó a latir rápidamente así que se levantó y se colocó detrás de la puerta para impedir que ella ingresará a la habitación y descubriera lo que había sucedido entre ellos dos.

-¿Qué mierda quieres?

-Ya es tarde mocoso- responde molesta- llegarás tarde a la universidad, ¿qué no eres demasiado grande como para que tú madre tenga que despertarte?

-Tsk, ya estaba despierto vieja entrometida.

-Por cierto ¿Dónde está tú hermana?- un escalofrío le recorrió su espalda- no está en su recámara.

-Está aquí- contesta inmediatamente- anoche vimos una película de terror y ya sabes cómo es, no se quiso largar.

-Como sea, despiertala ella también llegará tarde.

-Si, si como digas- escucha los pasos alejarse de su puerta y es cuando se permite respirar tranquilo.

Guía su mirada a su cama para ver el alboroto de ella, recuerda como se besaron, como la acaricio en cada zona de su cuerpo y el como la hizo suya, no se arrepentía, jamás lo haría pero...pero la conciencia es una maldita enemiga, se acerca a ella y puede observar que duerme plácidamente, acaricia su mejilla y aprovecha a apartarle un mechón de cabello.

-Mmmmm

-Ya es hora de despertar mejillas- le susurra en el oído.

-Mmmm...no quiero...

-Tenemos que asistir al instituto.

Ochaco abre sus ojos para observar al cenizo, le sonríe dulcemente y eso hace que el corazón del joven se acelere, la castaña se acerca a él para darle un tierno beso que no tardó en corresponder, le gustaba besar sus labios eran tan dulces y suaves, coloca su mano en la mejilla derecha de para profundizar más el beso...se separan solo por falta de aire.

-¿Cómo te sientes?- pregunta viéndola a los ojos.

-Estoy un poco adolorida pero bien- le sonríe y se pierde en esa mirada carmín...tan intensos y magnéticos- debo irme.

-Si, debes hacerlo cara de ángel.

Se levanta de la cama con sus mejillas sonrojadas mientras busca su pijama para empezar a colocarsela, le da un último beso para después abandonar la habitación y dejarlo solo, se metió a la ducha...ocupaba agua fría para pensar...¿Qué mierdas había hecho?...se había acostado con ella, tuvo relaciones sexuales con su hermana y lo peor de todo es que no se arrepentía, es más, quería volver a sentir su piel junto a la suya, ¿era un maldito hijo de puta por desear a una mujer fuera de su alcance?...probablemente pero la simple idea de pensar que otro bastardo la tocará como él lo había hecho la noche anterior lo hacía enfurecer porque esa hermosa castaña solo era suya, solo le pertenecía a él...
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-Entonces le dije a mi amors que si quería podríamos hacer un viaje contigo, Bakugou, sus amigos y ya sabes también nuestras amigas porque no pienso convivir todo el tiempo con ese montón de cavernícolas, osea no me caen mal ¿Enserio? Hasta le puse un nombre a todos ellos junto conmigo, nosotros somos el Bakusquard ya sabes por Katsuki- comienza a reír la pelirrosa- verdad Ochaco- no obtiene respuesta- ¿Ochaco?- la toma del hombro.