Capítulo 22

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El olor a café recién hecho, a dulces orneados, el ruido de gente hablando, una canción de algún grupo sonando por los altavoces.

Me encontraba sentada cerca de la ventana mientras tomaba un poco de té mientras miraba las hojas de unos informes que recién había recibido por un compañero que estaba delante mía.

Los dos íbamos disfrazados para evitar ser reconocidos, había recibido nueva información de los hombres de negro y también que nadie descubrió nada sobre el mar de fuego, así que ningún civil escuchó nada... Eso hubiera sido realmente un peligro, que entren en pánico..

Después de que leyera el documento de dentro de el sobre este se lo volvió a llevar todo, me quedé mirando a la nada mientras pensaba en aquello, aquél contenido. Salí de la cafetería una vez que tomé todo, mientras caminaba por la calle, mi mente estaba en otro lugar, pensando en el caso... Hasta que de repente como un flashback recuerdo a Shuichi.

Tn: No... ¿Por qué debo de pensar en él en este momento? Debo de centrarme en el caso, nada de amor, nada de amor...

Conan: ¿Amor?

Tn: ¡Ah! ¡Conan! No aparezcas así sin más... - Puse mis manos en mi corazón pues este latía rápido. - ¿Qué haces por aquí?

Conan: Estaba por ir a la librería, ha salido una nueva novela de detectives por lo que iba a comprarla.

Tn: Oh, ya veo... Con que una novela eh...

Conan: ¿Y usted? - Alzó una ceja mientras me miraba de arriba a abajo.

Tn: Simplemente he obtenido información.

Conan: De ellos... - Su rostro se volvió serio de repente.

Tn: No solo de ellos, sino de una mafia en concreto. Tengo entendido que Kid estaba siendo perseguido por una mafia ¿no? Eso fue lo que nos dijo él el otro día...

Conan: Si así es, ¿conseguiste información de ellos no?

Tn: Si, supongo que es una manera de agradecerle, no le capturamos a él y nos deshacemos de otra mafia. Además estos no parecen ser tan buenos... - dije mientras recordaba la información que me habían dado anteriormente.

Conan: ¿No son tan importantes?

Tn: Más bien, no son tan ágiles y listos como ellos, la organización negra es bastante grande, se mueven por todo el mundo en cambio esta mafia la mayoría es en Japón, Francia y un país más, pero sobre todo Japón.

Conan: Ya veo... ¿El jefe de esa mafia se encuentra aquí?

Tn: Si, es japonés. Y ya hemos podido localizar su guarida. Si nos deshacemos de la raíz...

Conan: Te desharás de todo el árbol... - Este sonrió. - Espero... Que no mates.

Tn: ¿Ya me estás poniendo límites de nuevo? - Me crucé de brazos.

Conan: Es mejor dejarlos vivos, así ellos estarán atormentándose lo que les queda de vida.

Tn: Uy... Que malo eres... - dije mientras reía un poco - ¿Y si se quitan la vida ellos mismos? o imagínate que pudieran escapar...  Detective, de la cárcel se sale, de la tumba no.

Conan: No todas las condenas tienen la misma cantidad de años. Algunos no pueden llegar a cumplirlas.

Tn: Sé a lo que te refieres, pero prefiero evitar posibles escapes.

Conan: No creo que logren escapar si logras capturar a los más habilidosos, sin ellos los demás solo son peones que no saben como desplazarse ni como ejecutar su siguiente movimiento. Están los que saben como hacer las cosas y los que solo se dejan hacer.

Tn: Ya veo por donde vas, sin las cabezas pensantes todos los demás no tendrían valor. Aún así abría que capturarlos. Si se dan cuentan que están siendo perseguidos de seguro querrán unirse a otra mafia u organización.

Conan: Bueno, pues entonces tendrás más motivos para ejecutar movimientos en esas organizaciones ¿no?

Tn: No te digo que no... Ya lo pensaré detective, pero por ahora... ¿No tenías que ir a una librería a por una novela?

Conan: ¡AH! Es cierto, nos vemos. - Este empezó a adelantarse, mientras lo veía correr simplemente resoplé, que un niño tuviera que venir a decirme esto no sabría que pensar. 

El viento comenzó a levantarse, mi pelo falso se movía... Espera... Ahora que lo pienso ¿Cómo Conan se enteró que era yo? ¿Sería por mi voz? ¿Mi forma de andar? ¿Qué me había delatado?

Me quedé viendo con extrañeza al detective a la lejanía, me había quedado a un lado de la cera parada pensando en que me había delatado.

Tooru: Hola Tn. - Dijo sonriente mientras pasaba por al lado.

Tn: Hola Ze... - Lo miré a los ojos al segundo, este me miró extrañado, lo siguiente fue agarrarlo del brazo y arrastrarlo hasta un callejón. - ¿Cómo supiste que era yo?

Tooru: ¿Eh? Bueno... Primero eres una extranjera, segundo tienes una forma de actuar a la hora de pensar bastante no común, sueles apoyar tu dedo en tu barbilla, y eso solo pasa en los dibujos o en películas en la vida real que alguien haga eso es raro, y por último, el tercero... vimos como salías de tu apartamento así vestida.

Tn: ¿Vimos?

Tooru: Conan y yo, los dos nos encontramos, queríamos ir a preguntarte algo pero al verte salir disfrazada supusimos que tenías cosas que hacer. Así que solo te estuvimos siguiendo mientras tu te ibas tranquila hacia la cafetería.

Tn: ... Tengo que cambiarme de piso. Al parecer tengo acosadores. - dije de brazos cruzados.

Tooru: Lo siento, no te pongas así... - dijo mientras intentaba relajarme un poco.

Tn: No me sigáis más, podría confundiros con el enemigo y golpearos idiota.

Tooru: Puedo defenderme.

Tn: Tú si pero y Conan, él no tiene los mismos reflejos que nosotros.

Tooru: Ah bueno... No lo había pensado.

Tn: Negligente.

Agente EmeraldDonde viven las historias. Descúbrelo ahora