DEUX - Chenji/Chensung

Un

Fue bajo una circunstancia incómoda, en la que Jisung se dio cuenta que las chicas no formaban parte de su interés real.

Jeno y Renjun eran mayores de edad y habían conseguido sus licencias de conducir, pero él ni siquiera tenía la madurez total, ni la experiencia como para salir a tomar alcohol. Sin embargo los otros dos sí, o eso decían ellos mismos, ya que había comenzado a beber a escondidas del ojo público desde mucho antes, y ahora lo estaban iniciando a él.

Se encargaron de colocarse los mejores outfit anti reconocimiento y se colaron a un club de hongdae, el distrito dónde la gente joven y la vida nocturna iban de la mano.

— No te preocupes, nadie nos va a descubrir. Además, llevamos tantos meses inactivos que ningún periodista está pensando en acabar nuestras carreras en este momento precisamente — Renjun le susurró al oído mientras estaban en la fila de espera para entrar.

— Dices eso cuando estamos juntos al señor popular — Jisung dijo en referencia a Jeno — Si alguien nos reconoce, seremos hombres muertos. Eso puede costarnos la postergación del comeback.

Jeno se burló del término "hombres" empleado por Park y el más joven rodó los ojos.

— ¿Mira quién habla? Tú no te quedas atrás — Jeno lo señaló — ¿Crees que no nos damos cuenta de que tienes muchos números de idols femeninas en tu celular?

— ¿Tú qué haces revisando mis contactos? — Jisung frunció el ceño.

— Solo porque sí.

Jisung se molestó mucho, nadie tenía porqué importarle si hablaba con mujeres o si conseguía novia. Todos esos contactos solamente hacían espacio en su almacenamiento, porque de esos veintitrés contactos, eran alrededor de dos o tres personas con las que más conversaba.

— Di la verdad ¿Tienes novia, Jisung? — preguntó Renjun con las cejas alzadas. Jisung podía sentir las insinuaciones de nuevo — Nunca pensé que fueras del tipo que tiene confianza con las chicas, creí que ese era Jaemin.

— No tengo novia ¿Y saben qué? ya me quiero ir — protestó Jisung mirando a los alrededores — tengo miedo, fue una mala idea venir con ustedes.

— No tengas miedo, hemos hecho esto cientos de veces. Y por si no lo sabías bebé inexperto, casi todos los idols lo hacen, es parte de ser famoso. Así que reacciona y disfruta un poco, sino, nunca aprenderás a vivir tu vida de forma normal. Bueno, al menos de la forma "normal" que tienen que vivir los idols como nosotros. Dentro de dos semanas tendremos que comenzar a entrenar para el comeback, así que aprovecha hoy y solo hoy — Renjun le dio unos golpes en la espalda.

— Sí, además si no tienes novia, para qué preocuparte más. Sí tienes algo que decirnos, dilo ahora. Donghyuck no está aquí acompañándonos, por esa misma razón, dijo que su novia puede molestarse con él.

— ¿Qué pasa si me piden identificación? — Jisung se preocupaba demasiado.

— No lo harán. Eres lo suficientemente alto como para pasar por un mayor de edad. Además qué diferencia hay entre alguien de dieciocho y uno de veinte años.

Renjun tenía razón, los guardias solo los vieron de pies a cabeza y los dejaron pasar. En la entrada los revisaron para asegurarse que no portarán ningún tipo de arma.

Dentro del lugar Jisung casi tiene un ataque de pánico. El club estaba tan lleno de personas que para él era abrumador e intimidante.

Jeno le presentó a un par de amigas de confianza; amigas con las que le dijo, no habría problema de ligar porque lo mantendrían en secreto. Jisung no estaba del todo seguro al principio, pero trás unos cuantos tragos, todo se volvió más sencillo y las palabras salían con más facilidad que antes de su boca.

Solbin se llamaba la chica con la que más simpatizo. Ambos se sentaron en una esquina solitaria y poco concurrida para poder hablar mejor. En un inicio solamente estaban conversando, pero luego las finas manos de la chica se volvían más y más traviesas, sus cuerpos se juntaban poco a poco.

Jisung se sentía terriblemente incómodo.

Como todas esas ocasiones en las que no sabía qué decir cuando le preguntaban por su vida, solo que ahora era el doble de raro.

La chica estaba invadiendo su espacio personal y él torpemente intentaba cooperar en la iniciativa, acariciando la pierna de la chica con sus amplias manos; su pierna era suave y sin vello. Estilizada y fina. Jisung tenía una sonrisa nerviosa, tensa y ridícula, para nada atractiva. La tocaba con gran indecisión y la delicadeza con la que se toca a una flor para evitar que sus pétalos caigan.

Quizás y solo quizás, Jisung no estaba leyendo la profundidad de ese intercambio, porque las cosas estaban subiendo demasiado rápido de tono, por la forma en la que ella lo tocaba a él.

En un abrir y cerrar de ojos, Solbin se le acercó y lo besó en los labios. No era su primer beso, pero hace años que había dado el último, así que lo tomó por sorpresa. Jisung suspiró ante el contacto y ella lo tomó como algo positivo.

— ¿Vamos a otro lugar si? — la chica le dijo al oído cuando se separaron, rozando sus labios intencionalmente contra la piel de su oreja.

— ¿Eh? ¿Adónde? — Jisung comenzó a tener miedo. Miro alrededor, y la paranoia creció, pensando que todos sabían quién era y que lo estaban viendo.

— Tranquilo, nadie se va a enterar, lo juro. Puedes revisar la habitación antes y si lo deseas apagaré mi celular.

Jisung no comprendía, o no quería comprender.

— ¿De qué estás hablando exactamente?

— De ir a otro lugar y tener sexo.

Toda su sangre se heló, no estaba preparado para eso. Era algo muy riesgoso, si era atrapado de alguna forma, aparecería en los periódicos virtuales e impresos, y en sitios de chismes; como el miembro más joven de NCT, que disfruta de la vida nocturna, entre otras cosas más. La gente lo vería como un promiscuo y su falsa imagen de maknae inocente se vendría abajo solo por tener deseos típicos de alguien de su edad.

Aún así no se sentía preparado para tener relaciones sexuales con una chica que había conocido hace dos horas. Pero lo que más miedo le daba, es que no se sentía preparado para tener relaciones con una chica para ser más precisos.

Solbin estaba tocando su pierna descaradamente y Jisung se sentía a punto de vomitar el corazón.

— No, lo siento. No estoy interesado.

— No me digas eso. Entonces, Jeno tenía razón. A tí te gustan los penes — Solbin dijo con el vocabulario más vulgar posible y reteniendo una risa — Debí haber sabido que eras mucho más que un chico nervioso.

Jisung buscó con la vista a Jeno, esté le guiño el ojo. Ahora comprendía porqué la insistencia en revisar su teléfono y presionar con el tema sobre los noviazgos.

— ¿Jeno te dijo eso? — Jisung se sintió herido.

Jisung pensó en Chenle y como este le daría una charla larga sobre el amor, la protección sexual y otras cosas. Pero ahora su orgullo había sido herido, por alguna razón quería probar a Jeno que se equivocaba. Estaba cansado.

— ¿Sabes qué? A la mierda todo, puedo pedir un taxi al apartamento luego ¿A dónde prefieres ir?

Solbin sonrió.

(...)

La cama de la habitación del motel que habían elegido, era gigante. Jisung estaba recostado y tenía a Solbin sobre él, besando su cuello.

Jisung mordía su labio inferior y su cuerpo estaba tan rígido como una tabla, estaba demasiado tensó que no estaba disfrutando en lo más mínimo, a pensar que el cuello se le erizaba por la sensación.

Cuando Solbin, bajo la cremallera de su pantalón, Jisung cerró los ojos y se tensó aún más. Esto molestó a la chica.— No, no puedo — dijo ella. Se levantó de la cama y acomodó su cabello. Comenzó a meter las cosas en su cartera.— ¿Qué? ¿Por qué te vas? — preguntó Jisung alarmado, sentándose en la cama y arreglando su ropa, más bien cubriéndose.— Porque no puedo tener sexo con alguien que esta más tieso que un maniquí. Cielos estás demasiado estresado, relájate ya me voy.— ¡No! — gritó Jisung antes que la chica saliera de la habitación — Es mi primera vez, eso es todo.Solbin negó con la cabeza.— No creo que sea eso. Reconsidera mejor tus preferencias...— Solbin lo vio y se sintió un poco mal — Escucha, no tiene nada de malo el ser gay. Nada más te empuje a esto porque Jeno nos pidio que fuéramos así contigo para confirmar o descartar sus sospechas.Jisung tragó grueso. Ahora sí estaba jodido, si ella hablaba no solamente sería acusado de ser sexualmente activo, sino que también de homosexual.— No voy a delatarte — le dijo casi como si le estuviera leyendo su mente — Ni con Jeno, ni con nadie. Tu secreto estará a salvo conmigo.Solbin le entregó papel con su número telefónico y abrió la puerta de entrada.— Pero no soy gay, solo estoy muy nervioso — le dijo antes de que se fuera en un intento por arreglar los posibles daños colaterales.— Fue un placer haberte conocido, Jisung.La puerta se cerró de golpe.Esa noche Jisung contempló su vida, se hizo preguntas serias pero todas simplemente ocasionaron un mar de inseguridad y temor en él.Regresó al dormitorio en la madrugada. Nadie le preguntó dónde había estado, pero si hacían suposiciones erróneas. Jisung prefirió eso, a que supieran la dura verdad que él mismo aún no quería asimilar.