2 - Jason

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Era jueves. Normalmente los jueves eran mi día favorito de la semana ya que las primeras tres horas eran de mis asignaturas favoritas. A primera biología, a segunda inglés y a tercera historia. Normalmente cada jueves iba saltando a clase, feliz y haciendo tonterías por el camino. Ese día no, nada era como normalmente. Las dos personas que más quería me habían dado la espalda por mi culpa. Sobretodo Mason... ¿Cómo pudo engañarme tan descaradamente? ¿Fue todo mentida? ¿De verdad solo me utilizó porqué la relación con Arya no iba bien? ¿Tan rápido cambiaba de opinión? Muchas preguntas se me generaron esa noche, demasiadas. No se a que hora llegué a quedarme dormida, tenía los ojos hinchados de tanto llorar. Intenté cubrirme las ojeras con un corrector pero no tenía ganas de nada. Finalmente me puse corrector en las ojeras y en algunos granos que me habían salido por la regla. No tenía motivación para nada. Me puse una sudadera cualquiera, la que tenía más pinta de estar limpia y unos tejanos negros. Entré a la cocina para hacerme el desayuno, intenté ser lo más silenciosa posible para que mi madre no se diera cuenta de que estaba.

- Emilie cariño - ya me había descubierto.

- Hola mamá.

- ¿Estas bien? ¿Has dormido bien? - otra de las cosas que odiaba era la capacidad de mamá para adivinar las cosas.

- Si mamá, todo bien - mentí.

- ¿Seguro? Ayer no te acabaste la cena y la dejaste a medias en la mesa.

- Es que no tenía mucha hambre.

- ¿Tienes la regla cariño? - por fin una cosa en la que no tenía que mentir.

- Si.

- Oh, esta bien. ¿Has cogido el kit de la regla no? Sabes que siempre pueden haber imprevistos.

- Si mamá, llego tarde nos vemos luego.

- Claro Emilie, que tengas un buen día - no me gustaba ser fría con mamá, pero no podía evitarlo. Salí de casa tranquilamente y fui hacia la parada de autobús. El autobús se retraso y vino 15 minutos tarde. Genial, lo que me faltaba. Entre al autobús con el humor por los suelos, no me apetecía nada. Había un grupo de chicos sentados al fondo que estaban con el móvil jugando a un juego entre ellos. Gritaban demasiado así que ya no pude más y estallé.

- ¡¿Os podéis callar ya de una puta vez?! Hay más personas en el autobús - se callaron para mi asombro. Obviamente siguieron hablando y riendo pero esta vez no se escuchaba tanto. Me alegre de no volver a llamarles la atención. El camino hacia el instituto no era largo, duraba unos 5 o 10 minutos, así que cogí los auriculares y me puse a escuchar música. En ese entonces parecía lo único que me relajaba.

Al llegar al instituto fui directamente a la taquilla para coger mis libros. Por suerte no había llegado tarde. En clase de biología me empezó a doler un poco la tripa, así que pedí permiso para ir al baño. Al entrar al baño hice el menor ruido posible. Definitivamente había más de una personas en el baño de la izquierda así que entré al baño del medio. Se escuchaban risitas y besos, MUCHOS BESOS. ¿No podían besarse en otra parte por favor? Me iban a explotar los tímpanos

Si esos dos fuéramos Mason y yo, no me molestaría en absoluto.

No, pero Mason ya no es nada para mí... Él es el novio de Arya, o tal vez ya no por mi culpa. Lo tengo que olvidar, el es solo un compañero de clase, nada más

No me lo creo ni yo

Mason es solo un compañero de clase, Mason es solo un compañero de clase, Mason es solo un comp... deje de banda mis mentalizaciones de repetir que Mason era solo mi compañero y nada más, y me centré en los nuevos ruidos que estaba escuchando. Vale, esto ya no eran solo besos... Decidí salir del baño y tirar de la cadena para ver si se callaban. La chica emitió un último ruido y se calló, soltando una última risita. Parecía que habían acabado su encuentro y cada uno se iba a su clase. Me apresuré a salir y esconderme detrás de la puerta del departamento de lengua. La curiosidad era absoluta en mi interior. ¿Quien podría ser? ¿Los de último año echando un polvo? ¿Un profesor con una alumna? ¿Y si era al revés? ¿Una profesora con un alumno? No tuve tiempo para seguir preguntándome a mi misma quienes podrían ser porqué la misteriosa pareja había salido del lavabo. La primera que salió fue Arya. Iba despeinada y con la ropa arrugada. Tras ella salió ni más ni menos que Mason. Si, Arya y Mason, mi mejor amiga y su exnovio, aunque ya no tenía pinta de ser su exnovio por lo que escuché. Para despedirse Mason le dio un beso corto y se alejó hacia el aula de mates

Pillada de ti Donde viven las historias. Descúbrelo ahora