PROTEGERTE (NaMo, SaTzu)

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- ¿Puedes creerlo Momo? – La castaña saco la llave de su no tan pequeña habitación de hotel, desde que se separaron de las mayores no ha dejado de hablar de cómo su Ex novia la trato en el avión.

- Ya entendí Sana, estoy muy feliz por ti – Al entrar a Pent-house ambas sonrieron, era extremadamente grande, con grandes ventanas panorámicas que dejaban ver la hermosa noche que parís les ofrece – Esto sí es vida – La pelinegra se tiro en el gigantesco sofá mientras su amiga corrió a la cocina a ver que había de comer.

- ¡Momo! Mira, ¡tiene Limonada! ¿Cómo sabían que amo la Limonada? – Después de dar varios saltitos de emoción siguió registrando la cocina, hasta que encontró pan y empezó a comerlo de todas la maneras existentes, con mermelada, tostado, quemado, solo.

- ¡Minatozaki! Deja un poco para más tarde ¿Quieres?

- Estas celosa porque no tienes pan – Después de que le sacaran la lengua de una forma muy infantil la pelinegra volteo los ojos, no estaba de humor para el bueno humor de su amiga, estaba pensativa, intentaba descifrar algo – Momo, ¿Moguri? ¡HIRAI! ¿Estás escuchándome?

La pelinegra salió de su trance y miro a su amiga, ahora se encontraba sentaba en el sofá individual que estaba frente a ella y vio unas tostadas en la mesa - ¿Me decías algo Sana?

- Si, te decía que te preparé unas tostadas y te estaba contando un poco de nuestro itinerario – Solo asintió y tomo una tostada – ¿Que te ocurre Momo? ¿Te sientes mal? – Negó con la cabeza y dirigió su mirada al gran ventanal.

- ¿Es por Nayeon? – Momo giro su cabeza rápidamente para mirar a su amiga, se escucho un "Crack" y su cuello que dolió debido al fuerte movimiento – Ten cuidado Momo, te vas a romper el cuello.

- ¿Cómo sabes que es por Nayeon? – La castaña soltó una risa nasal – Por dios Momo, te conozco más que tu propio padre, y desde que bajaste del avión estas extraña... ¿Ocurrió algo? ¿Te dijo algo? Porque si es así le vo-

- No me dijo nada Sana, no le vas a hacer nada a nadie ¿ok? – Sana se cruzo de brazos.

- ¿Entonces qué es? – Pregunto de nuevo. La pelinegra suspiró audiblemente y tomo otra tostada.

- Es que, la Nayeon del avión no era la Nayeon de la oficina – La castaña la miro confundida – Explícate Momo, no te entiendo.

- Presta atención Sana, no estoy con ánimos de repetir – Su amiga asintió atenta – Cuando estamos en la oficina, cuando me fue a buscar después de la pelea y cuando firmamos el contrato, Nayeon era ruda, con una mirada dura y penetrante que te puede matar en segundos, carácter fuerte, parece que nada la pude derribar.

- Una perra – Agregó su amiga ganándose una mirada de odio por parte de su amiga – No me mires así Hirai, sabes que es cierto – La pelinegra volteo los ojos.

- Como te decía, la Nayeon que "Conocemos" – Agrego poniendo sus dedos en forma de comillas – Es completamente distinta a la Nayeon con la que viaje.

- ¿A si? ¿Y cómo es esa Nayeon? – Hablo su amiga incrédula, Momo puede exagerar muchas cosas, ya está acostumbrada a sus teorías y suposiciones.

- Bueno, se veía indefensa – La pelinegra  desvió la mirada de su amiga, mientras miraba hacia el gran ventanal recordaba haber visto a Nayeon  mientras dormía, se escuchará como si fuera acosadora pero es que la mayor balbuceaba y se quejaba, cosa que despertó la curiosidad de Momo - ¿Qué habrá soñado que la tenía tan desesperada? – Se preguntaba, pero la respuesta solo la tiene la chica que esta en este momento quien sabe donde con su tonto novio.

- La palabra indefensa y Nayeon no pegan Hirai – Momo suspiró saliendo de su trance, volvió la vista a su amiga.

- Exactamente es lo que pensé, pero de verdad, parecía sincera, cuando le tome la mano para que se calmara, porque tenía miedo a los aviones – Levanto su dedo índice indicándole a su amiga que no hablará, pues tenía las intenciones – Déjame terminar, nunca me soltó la mano, incluso intente zafarme y me miro, sus ojos, brillaban y... y... puso un puchero, me pidió que nos quedáramos así, y se veía ten tierna e indefensa que no le pude decir que no, y cuando le preste uno de mis audífonos empezamos a hablar de la música, tiene muy buenos gustos en realidad.