Mafia 11

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Cuando llega la noche, mi hermano debe ir al altar, yo voy a donde esta Lisa para ser su única dama de honor no la he visto, camino a la habitación donde se supone se debe estar terminando de alistar, toco y la que me abre es su mamá que me sonríe con ternura.

— Hola Azure, Lisa ya está lista— asentí, ella sale de la habitación y yo entro, Lisa platica con du padre animadamente.

— Lamentó interrumpir pero ya es hora— sonrío, mi mejor amiga se ve hermosa, irradia felicidad, su padre le ofrece el brazo ella lo toma, primero salgo yo de la habitación, se que ellos me siguen por el ruido de los tacones de mi amiga, la boda será en el jardín principal, la marcha nupcial empieza, una sobrina de Lisa esparce flores por donde Lisa va a pasar.

Yo voy detrás de la niña, Donatello está sentado en una de las sillas de enfrente, me sonríe y me admira, le devuelvo la sonrisa, miro a mi hermano pero él solo tiene ojos para Lisa, me pongo en donde voy yo justo detrás de la novia, el padre de Lisa le recuerda la promesa de fidelidad que debemos hacer todos los que pertenecemos a esta mafia, mi hermano la repite antes de tomar la mano de mi mejor amiga.

El padre empieza a recitar las típicas palabras de una boda, cuando mi hermano y mi mejor amiga dicen acepto aplaudo fuertemente, estoy feliz, miro a los invitados todos están aplaudiendo felices menos una, Destiny una de las antiguas amantes de mi hermano y su mejor informante.

Me cae bastante mal así que sonrío con mas ganas, el padre los declara marido y mujer, se besan, cuando se separan soy la primera en abrazarlos y felicitarlos.

— Estoy muy feliz por ustedes— el fotógrafo nos toma unas cuantas fotos, después me hago a un lado para que los suegros de mi hermano los feliciten y se tomen una foto con los recién casados.

— Creía que este día no iba a llegar nunca, me alegra ver que tu hermano se caso— me giro para encontrar a mi tío el hermano mayor de mi mamá.

— Tío— lo saludo con poco entusiasmo, a él nunca le ha gustado que lo tratemos con cariño, ni siquiera sus hijos lo pueden tratar así, solo su esposa y mi mamá podían hacerlo, así que Basilius y yo nos acostumbramos a tratarlo con frialdad.

— Me alegro de verte sobrinita— ruedo los ojos.

— No sabía que Basilius te había invitado, esperaba no verte nunca mas— él sonríe.

— Basilius quería que estuviera aquí, desgraciadamente me voy a quedar un tiempo para cuidarte mientras él se va de luna de miel con su esposa— aun me trata como a una niña una niña no deseada igual que a mis primos y hermano.

— Yo puedo cuidarme sola— siento una mano posarse en mi hombro.

— ¿Hay algún problema Azure?— es Donatello.

— No hay ningún problema solo una charla familiar y créeme Azure yo tampoco quisiera estar aquí pero le jure a tu madre cuidarlos con mi vida si era necesario y es una promesa que pienso cumplir hasta que muera, por que a mi hermana si la quería, no como a ustedes y mis hijos— no me lastiman sus palabras, estoy acostumbrada, en el funeral de mi mamá nos dijo a Bas y a mi que por nuestra culpa nuestra madre había muerto, por un tiempo yo me sentí culpable pero Bas me ayudo a ver que no era así.

— Vámonos Donatello, terminé de hablar con el hermano de mi madre— Donatello lo mira unos minutos antes de ofrecerme su mano para que nos alejemos de ahí, mi hermano, va en dirección a nuestro tío.

— Tu tío si que es cruel— me dice Donatello.

— La verdad es que me importa muy poco, vamos al jardín trasero, ahí será la recepción— asiente y vamos mientras me cuenta un poco sobre como le va en el negocio, de reojo veo a Darnell, tiene una metralleta cruzada en el pecho.

Hermana del mafioso Donde viven las historias. Descúbrelo ahora