Mafia 20

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Cuando llegamos a mi casa encontré a mi hermano parado junto a Lisa y atrás de ellos un chico tal vez un par de años mayor que yo, su rostro muestra tal seriedad que da un poco de miedo, una cicatriz le atraviesa desde la ceja izquierda hasta el pómulo de ese mismo lado.

Ha de medir como un metro noventa, sus ojos son de color azul del hielo, su cabello es tan negro como el carbón, es un poco pálido, si no tuviera esa expresión tan seria podría decirse que es guapo.

— Hermanita, Donatello— nos saluda y me doy cuenta que nunca le ha dicho cuñado a Donatello en todo este tiempo que llevamos de novios.

Me acerco a abrazar a mi hermano y a Lisa, después me alejo para que Donatello los salude, Lisa me lanza una mirada y yo me siento sonrojar, intuye que algo paso conmigo y Donatello.

— Bueno les presentó a Vladimir Vasíliev, Vladimir ella es mi hermana Azure Mancini, serás su nuevo jefe de seguridad y el es su novio Donatello Bolzano— el ruso nos dió una mirada rápida y luego asintió.

— No es de muchas palabras pero bueno ya que terminamos con las presentaciones, Azure ven te enseñaré como esta quedando la habitación del bebé— mi mejor amiga me toma de la mano y me arrastra escaleras arriba, Donatello se queda con mi hermano platicando mientras el ruso se aparta.

Al entrar en la habitación que será del bebé veo que todo esta en colores beiges unos osos de peluche adornan algunas de las estanterías, la habitación es tan grande como cualquiera de la mansión Mancini aun que no sea en la que yo crecí.

— Ahora que ya estamos solas, cuéntame todo— la miro haciéndome la desentendida.

— No se de que me estas hablando— pero se me escapa una sonrisilla y entonces empiezo a contarle todo aun que obviamente no con detalles ya que eso sería demasiado.

— Eres una traviesilla, ya me imagino la noche de bodas y con lo romántico que es Donatello— me rio.

— Para eso aun falta mucho Lisa, apenas vamos a cumplir unos meses— me encojo de hombros.

— Bueno si pero no me puedes negar que Donatello es el amor de tu vida ¿o me equivoco?— lo pensé durante unos minutos.

— La verdad es que no te equivocas pero aun así a él le gusta planear las cosas con demasiado tiempo de anticipación, así que se que se tomara su tiempo, aun que quisiera que fuera pronto— Lisa sonríe.

— Bueno cambiando de tema dime ¿que te parece la habitación del bebé?— vuelvo a mirar la habitación.

— Me parece perfecta que bueno que decidieron meterle un color neutral, los detalles son preciosos— le sonreí yo.

— Si quería que la habitación no tuviera los típicos colores que siempre les ponen por que un color no define el género del bebé, cuando crezca ya podrá decidir de que color pintar su habitación— asentí estando de acuerdo.

— Quiero llevar mas ropa a casa de Donatello pero no sé, primero debería preguntarle ¿no?—

— Yo creo que él estaría feliz aun que tu hermano no tanto, de por si siente que te esta perdiendo entre el trabajo y que pasas mucho tiempo con Donatello, yo le expliqué que algún día te casaras y te irás a vivir con él pero siente que es demasiado pronto— me reí y ella también.

— Amo a mi hermano y siempre estaré con el aun que no sea físicamente en la misma casa, no quiero que mis futuros sobrinos me vean como la tía solterona que nunca salió de casa de su padre y de ellos en un futuro—

— Solo tendremos un hijo y es todo— levante una ceja.

— El deseo de Basilius siempre ha sido tener 4 hijos, dos niños y 2 niñas— le explique.

Hermana del mafioso Donde viven las historias. Descúbrelo ahora