Orange Joe!!! [OMORI]

Capítulo 3 - Salida

Dando brincos, Kel caminaba junto a Sunny, el cual solo lo seguía, parando a ratos preso de su pánico interior al encontrarse fuera de casa, pero no podía simplemente dejar a Kel solo después de haber abierto sus puertas de manera literal y figurada.

- ¿Qué te gustaría hacer? - preguntó el castaño dando la vuelta para verlo.

- Lo que tu quieras esta bien

- Te gustaría tal vez ¿jugar un rato? - le mostró el balón desgastado, Sunny desvió la mirada.

- No tengo mucha energía la verdad... Además nunca he sido bueno...

- Lo de ese día fue un accidente, no estuvo tan mal Sunny - comentó Kel mientras recordaba cuando el pelinegro, intentando hacer un pase lo golpeó en la cara haciendo que su nariz sangrara, todavía recuerda como todos se preocuparon mucho - Bueno, tal vez... ¿Te parece un helado?

Sunny volteó ligeramente para verlo, lo cual se notó por la diferencia de altura, aunque cuando se dio cuenta Sunny lo miró de frente sorprendido, lo cual sonrojo un poco a Kel ya que no había podido ver expresión alguna de Sunny durante el tiempo en el que habían caminado juntos.

- ... El helado suena bien - respondió Sunny y bajo la mirada nuevamente.

- Entonces andando!

Ambos caminaron unas cuantas cuadras, Kel hacía toda la conversación mientras Sunny solo daba respuestas cortas como "si/ no /no lo sé/ etc", incluso con esas respuestas Kel se sentía realmente feliz de estar con él otra vez, de tener esa oportunidad. Cuando llegaron a la heladería, Kel pidió un helado de galleta y Sunny uno de vainilla, procedieron a sentarse en una mesa del lugar. Kel disfrutaba de su postre pero Sunny solo lo miraba derretirse poco a poco.

- Y... ¿Cómo has estado Sunny? - preguntó con toda la amabilidad que pudo, su amigo solo se encogió de hombros - ¿Bien?

- Si - Miró por la ventana todavía sin dar una sola probada a su helado.

- ¿Estás... Estás seguro? Has estado algo... encerrado desde-

- Ajá - interrumpió con el tono tan frío que hizo que el castaño solo se encogiera y tratará de evitar verlo tomando otro bocado de su helado, el cual ya estaba casi terminado.

Unos minutos pasaron, todo se quedo en completo silencio entre ellos, Kel solo miraba como el helado de Sunny se derretía hasta que este al fin tomó un pequeño bocado. Kel suspiró.

- Lo siento - Escuchó decir a su amigo - No me siento bien el día de hoy, creo que no fue una buena idea salir

- ... Hey, esta bien, me alegra haber podido salir contigo un rato al menos - sonrío

- ... Kel... - dudó un momento - Lamento... haberte hablado así

- No te sientes bien, esta bien, no pasa nada

- ... Esa no es excusa... - susurró

- Si no quieres terminarlo no hay problema - le dio una servilleta. Sunny lo miró extrañado, cuando bajo la mirada vio como su helado ya se había derretido manchando su mano entera, tomó la servilleta con timidez.

- Lo siento...

- Ya te dije, esta bien! En verdad no tienes que pedir perdón - le dio una sonrisa tranquila.

- ... Yo- fue interrumpido por el tono de llamada del castaño

- LO SIENTO! Solo- Solo un momento - sacó su celular torpemente, era Hero, contestó - ¿Hola? Hey- ¿Eh? Hero espera, dime qué pasa

Sunny solo lo miró.

- HERO POR QUÉ ME LLAMAS POR- Estoy ocupado, mira, es que- - El pelinegro se levantó del asiento - Sunny espera!

Sunny tiró su helado que ya se había convertido en sopa pegajosa y tomó otra servilleta para limpiarse.

- Tengo que irme Kel, perdona, se me olvido que mi madre me dijo que hiciera unas cosas - dijo sin hacer contacto visual con Kel.

- Yo- P-Podría acompañarte a casa - se acercó.

- Estaré bien

- P-pero Sunny... - El sentimiento de que se le escapaba de las manos se hacía más fuerte, sentía que en cualquier momento iba a romper en llanto, su voz comenzó a quebrarse un poco pero intentó sacar una sonrisa como pudo - Esta bien, e-entonces saldremos en otra ocasión

- ... - Tomó el pomo de la puerta, estaba bastante tenso, pero al final volteó a verlo - ... Claro, toca mañana y... si quieres podemos salir

Kel se sorprendió.

- Claro! - Su espíritu se renovó, al menos era un progreso de cierta forma.

Ambos salieron, Kel no pudo evitar despedirse con un abrazo, lo trató con delicadeza pero con mucho afecto, como si con ese abrazo quisiera decir te extraño, al final los dos se fueron por su camino, Kel se dirigió al parque a practicar un poco.

Ya era tarde, finalmente recorrió ese camino que tanto le recordaba, pero esta vez, cuando pasó por casa de Sunny, sintió una cercanía que no había podido sentir antes, esperanza se podría llamar, de al menos poder ver a Sunny, poder volver atrás.

Al llegar a casa, como le había dicho su hermano en la llamada, encontró a la criatura de 8 patas y se hizo cargo de ella como si fuera contratado de la mafia, estaba exhausto, así que solo se acostó, cerrando los ojos un momento, y pudiendo dormir bien después de tanto.