APOCALYPSE // •THE WALKING DEAD•

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La explosión se hizo presente ante los ojos de todos, la mayoría sintió un gran alivio excepto glenn quien se había percatado de la ausencia de jane, todos pensaron que ella había muerto pero glenn no lo aceptaba el quería quedarse pero todos insistieron en que era imposible que ella haya sobrevivido. Por otra parte la joven chica acababa de despertar.

Pov jane

Mi cabeza estaba apuntó de estallar, al abrir los ojos pude notar que estaba llena de sangre pero no era mi sangre, un caminante estaba justo encima de mi aunque para mi buena suerte este estaba muerto, mi corazón casi se detiene al ver a la enorme horda de zombies. Al parecer ninguno había notado mi presencia gracias al olor del muerto que estaba encima de mi. Decidí que lo mejor era esperar a que se fueran, aunque para eso pasaron horas, estaba tan confundida realmente no sabía que había sucedido y porque me hallaba ahí lo último que recordaba es estar escapando con los de mi grupo, pero, ¿en donde se encontraban ellos? ¿Acaso me habían abandonado a mi suerte?

...

En cuanto la horda termino de irse me prepare para partir, esperaba que mis amigos se encontrarán cerca esperando igual que yo a que la horda pasara, pero mis esperanzas se esfumaron en cuanto note que todos los carros no estaban. Para mi mala suerte estaba sola, nuevamente. Podía quedarme ahí a llorar por mi desgracia pero no, tenía que sobrevivir.

Caminando en la carretera encontré una botella de agua y una lata de sardinas. Tenía que encontrar un refugio en donde quedarme antes de que anocheciera.

                          ◇◇♡◇◇

Habían pasado algunas semanas, fue duro al principio pero pude sobrevivir, me encontraba caminando por el bosque buscando algún refugio para pasar la noche. Milagrosamente una cabaña apareció en mi campo de vista. Entre con cuidado haciendo el menor ruido posible, aparentemente estaba vacía pero no correría el riesgo, golpee la puerta para ver si algún caminante aparecía pero nada ninguno salió. Al terminar de examinar la cabaña cerré todas las puertas y ventanas, note algo extraño debajo de una alfombra y al alzarla me di cuenta que había una puerta, alcé la pequeña navaja en señal de defensa. Cautelosamente abrí la puerta y su interior me dejó maravillada, se encontraban todo tipo de latas con frutas, sardina, atún, y demás. Al fondo habían armas y un pequeño cofre al mirar detalladamente la habitación encontré cuatro cadáveres todos tenían un disparó en la cabeza lo cual no fue muy agradable de ver.

Durante el vierno me quedé en esa cabaña pues tenía todo lo necesario para vivir, todo había salido de maravilla casi nunca salía y las pocas veces que lo hacía era para tomar algo de aire sin embargo no podía relajarme demasiado.

Una noche como cualquier otra estaba en el sillón leyendo un libro que había encontrado cuando escuché gruñidos, supuse que serían solo algunos caminantes pero al observar por la ventana me quede horrorizada pues no solo eran algunos era toda una horda de almenos 100 caminantes, estúpidamente mi lata cayó al suelo haciendo algo de ruido, inmediato agarre mi mochila y el libro y me oculte debajo, en la puerta, por lo menos si destrozaban la cabaña esto no lo encontrarían.

Pasaron algunas horas y no se escuchaba ningún ruido, pensé en salir pero decidí esperar al amanecer. Cuando desperté y salí mis sospechas se hicieron realidad pues habían destruido la cabaña por completo, ya no tenía nada que hacer aquí así que decidí partir.