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Era ya el día en que los futuros comprometidos se conocieran finalmente y se pudiera formalizar todo por parte de todos. La familia Relish iba en su auto lujoso siendo conducido por su propio chofer.

Verena se sentía muy nerviosa y era muy comprensible, no todos los días alguien se iba a conocer al extraño con quien se casaría. Por su parte, su padre iba muy tranquilo y notó el estado en que su hija estaba que me tomó la mano con suavidad.



– Tranquila – le decía mirándola –, es un hombre digno de ti.

– Sé que lo conoces bien... Solo que es aun algo complicado para mí esto...

– Lo sé y aun así aceptaste la decisión. – sonreía – Estoy totalmente agradecido contigo.

– Sí... – sonreía levemente – Padre, ¿Vas a quedarte en todo momento? – lo miraba.

– Llegaré contigo y me iré contigo. – prometió.

– Gracias, padre. – sonreía.



El auto ingresó a la propiedad y siguió su camino hasta llegar a la mansión. El chofer bajó inmediatamente del auto y se dirigió a la puerta trasera para abrir esta misma y ayudar a Verena a salir del interior del auto.

Ella miró todo el jardín, este estaba muy bien cuidado, podado y había varias fuentes en el interior de cada cuadro lleno de pasto.

Su padre se acercó a ella ofreciendo su brazo y ella lo tomó con una ligera sonrisa para juntos ingresar a aquella lujosa y gran residencia. La puerta fue abierta por un mayordomo, un búho ya adulto.



– El señor Xander Relish. – presentaba en voz alta – Y su hija, Verena Relish.



Verena dirigió su mirada hacia los grandes escalones y justo se encontraba aquel apuesto y millonario erizo negro de pie y con mucho porte. Su primera impresión se podría decir que fue buena, admitió para sí misma que era más que apuesto, solo que lograba intimidar con tan solo verla.

A su lado se encontraba el erizo azul cargando su propio portafolio y miraba con algo de admiración a la gata blanca.



– El señor Shadow Doom. – presentó finalmente el mayordomo dirigiéndose hacia su jefe.

– Gracias, Spooner. – mencionó el erizo negro.



El búho asintió una vez con la cabeza y se retiró del lugar.



– Sé que ya me presentaron, pero quisiera presentarme nuevamente por mi cuenta. – decía mientras se acercaba a la gata blanca – Soy Shadow Doom. Es un placer conocerla, señorita Relish. – le tomó suavemente la mano inclinándose un poco para dejarle un pequeño beso en esta misma.

– El placer es todo mío, señor Doom. – mencionaba la gata blanca mirando el gesto con el que fue recibida.

– Conocí a tu madre, fue una gran dama. – comentaba – Eres totalmente idéntica a ella. Lamento tanto tu pérdida.

– Gracias, señor Doom. – suspiraba un poco.

– Quiero presentarles a mi abogado. – se hizo a un lado para darle espacio al azulado – Él es Sonic Maurice. – presentaba sin dejar de verlo – Estará con nosotros para los detalles de la boda y todo lo demás, espero no les moleste.

– Para nada, es totalmente necesario. – comentaba la gata blanca con una ligera sonrisa – Es un placer conocerlo también, señor Maurice.

– El placer es todo mío, señorita. – le sonreía.

Anillos Rojos ~ ShadonicDonde viven las historias. Descúbrelo ahora