Ayla Klamder, una joven de 23 años que acaba de empezar su carrera como actriz, un director la contrata para la película Awake, junto al actor Hayden Christensen
¡Hola! Soy la autora de la historia, vengo a introducir a los visuales protagonistas.
Ayla Klamder.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
De Nacionalidad Escocesa, 23 años.
Hayden Christensen
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Nacionalidad Canadiense, 27 años.
Ahora sí, comencemos la historia.
Adiós Papá, adiós mami. -dijo Ayla, de nacionalidad escocesa, unos 23 años, morena y ojos verdes, despidiéndose de su familia, ya qué, la habían contratado para una película "Awake"
Ten cuidado en Estados Unidos hija. -dijo Aralda, la madre de Ayla. —Siempre Mamá. Me voy que llego tarde. -dijo Ayla mientras cruzaba el control.
Ayla entró a la otra parte del Aeropuerto, había sitios con comida, ella decidió comprar algo de comida para desaburrirse un rato, ya que su vuelo salía tarde.
Mientras Ayla pagaba su kit-kat, una señora anciana se acercó a ella, Ayla creyó que era para pedirle ayuda sobre algo del aeropuerto pero la anciana recitó unas palabras que dejaron a Ayla impactada. "Usted es una joven muy guapa, tendrá muchísimo futuro, pequeña." —Muchas gracias, de verdad. -dijo Ayla avergonzada
El vuelo At-214 puede embarcar en la puerta K23. -dijo la informante. Ayla al oír eso se apuró para llegar a la puerta de embarque.
Le pongo esto en la maleta y en 15 minutos la llamamos, Ayla. -dijo la recepcionista, a Ayla le sorprendió ver que se sabía su nombre, le hacía ilusión, pero las ilusiones se chafaron al ver que ella tenía la tarjeta con su nombre en su mano.
Cuando Ayla entró en el avión había gente muy peculiar, una señora sin zapatos, otro hablando por teléfono mientras la azafata le advertía de que se bajaría si no colgaba.
Ayla se puso música y se durmió, no durmió agusto, se despertó unas 4 veces por el ruido que había alrededor, ya que la musica se había parado. Cuándo llegaron, Ayla escribió a su casera para que le diese las llaves.
Esta es la casa, es bastante grande para una persona. -dijo la casera mientras recogía sus cosas y se iba. —Es enorme. -dijo Ayla mientras dejaba sus maletas en el sofá.
Disfrútala. -dijo la casera mientras se despedía. —¡Adiós!
La casera llego al aeropuerto y la llevo hacia su nueva casa, era bastante grande, con muebles modernos y colores pálidos, lo que a Ayla le agradaba, ya que no le gustaba el desorden.
"Ya estoy aquí" -dijo Ayla al director Martin Simons a través de un mensaje de texto. —"De acuerdo, mañana nos reuniremos todos en Maple Street" -dijo Simons a través del movil.
Ayla le dio el visto mientras Martin le daba los contactos de sus compañeros.
