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"Si profano con mi indigna mano este sagrado sacramento, pecado de amor será."
—¿Le dio comida a los huérfanos?—preguntó Viserys acostado en su cama. Alicent asintió ante la pregunta, le había contado a su esposo el acontecimiento que había pasado hace algunas semanas.
Viserys no estaba consiente siempre, solía olvidar y divagar, pero ese día estaba más lucido, así que Alicent lo aprovechó, aunque debía reposar mucho, su enfermedad avanzaba rápido. Había una fiesta en honor a Casana y su compromiso con Aemond.
Viserys estuvo un rato y después volvió a descansar. La noche había llegado.
—Es muy dulce.
—Lo es —susurró Viserys —. ¿Por qué la eligió Aemond?, ¿cómo pasó?
Alicent se sentó en la piecera de la cama y se encogió de hombros.
—En realidad no lo sé, ella nunca acercó el primer día, fui yo quien le pidió a Aemond que la invitara a bailar y… algo malo paso, después del incendio él solo la presentó como su prometida. Fue rápido.
—Mucho, creí que tardaría algunas semanas, fue más largo el viaje que el tiempo que estuvieron en Storm’s End.
Viserys tenía razón, habían estado muy poco tiempo en las tierras de la tormenta, pero habían sucedido tantas cosas que sin duda tendrían anécdotas que contar.
—Fue una buena elección —dijo Viserys—. ¿Qué opinas?
—Es muy diferente a él. Pero era la mejor entre las hermanas.
Alicent se levantó para ayudarlo, pero el hombre le indicó con la mano que no lo hiciera.
—Aemond tiene sangre del dragón corriendo por sus venas, necesita a alguien que lo complemente y ayude. La eligió por algo, será feliz a su lado.
Alicent se levantó y entrelazo sus manos frente a ella mientras veía una pared de la habitación. Había pasado semanas con la muchacha en un barco, la había conocido a profundidad.
—Ella es dulce y calmada, inocente. Y ha pasado por un infierno, se siente sola, muy sola, no tuvo el cariño de una madre y solo recibió crueldad por parte de su padre, ella está asustada del mundo Viserys.
—¿Te preocupas por ella?
Le recordaba a ella de joven.
—Sí, lo hago, así que haré de este lugar un hogar para ella con tu permiso.
