Damian & Anya (Recopilación De One-shots)

Un segundo hijo rencoroso

Damian Desmond es el segundo hijo de una importante familia de Ostania, y eso significa que la mayoría de la atención la recibe su hermano mayor. A la larga dejó de importarle, pero al ver a Anya Forger hablar con Demetrius aquel día, hizo que todo el rencor que Damian le tiene a su hermano salga a la luz por los celos.

O, donde Damian teme perder al amor de su vida en los brazos de su hermano.

Acaba de ganar el torneo intercolegial de voleibol, está festejando junto a su equipo mientra levanta la copa en el aire y se la muestra a la tribuna. Todos comienzan a gritar y celebrar más alto al ver al capitán del equipo acercarse a ellos con el trofeo que confirmaba su triunfo.

Damian busca a su hermano entre la tribuna, quiere abrazarlo y mostrarle la copa, que gracias a su entrenamiento pudo conseguir. Y aunque no quiera admitirlo, también busca a la chica de cabello rosa que quiere impresionar.

Los encuentra juntos en una de las esquinas de la parte izquierda de las gradas. Su hermano se acerca a Anya y le susurra algo al oído, ella sonríe cuando él termina de hablar y se sonroja. Damian deja de caminar hacía ellos, se queda parado mirándolos fijamente desde la cancha, de repente siente un fuerte dolor en su pecho, una combinación extraña entre angustia e irá, sus ojos se comienzan a nublar con lágrimas pero no va a permitirse llorar. Los seguiría mirando de no ser que el brillo de los ojos de Anya cuando mira a Demetrius le da ganas de gritar de impotencia.

Cuando uno de sus compañeros de equipo se acerca le entrega la copa, que en ese momento sólo quiere tirarla a la cabeza de su hermano mayor, y se excusa diciendo que se encuentra muy cansado para poder ir a los vestuarios. Durante el camino no deja de repetir la escena entre Anya y Demetrius en su cabeza una y otra vez, cuando al fin llega a los vestuarios, se sienta en la banca más cercana a su casillero.

Aunque al principio le cuesta, porque él es un Desmond y no debería estar llorando por una plebeya, al rato se rinde y deja que las lágrimas de frustración e ira se deslicen por sus mejillas, porque una vez más su hermano le está quitando algo que anhela profundamente.

Damian pasó la mayor parte de su vida sin conocer verdaderamente a Demetrius, quizás fue por eso que le resultaba más fácil echarle la culpa por la falta de atención de su padre.

Sus notas son excelentes pero a su padre no le importa porque Demetrius lo hace mejor, es el mejor alumno de Cecile Hall pero no importa porque Demetrius lo supera siendo uno de los mejores alumnos de todo Eden, consiguió una stella pero no importa porque demetrius ya es un académico imperial.

Damian entra por primera vez a la escuela, tampoco importa porque Demetrius tiene su fiesta de bienvenida para los Académicos Imperiales y eso es más importante, eso era lo que la foto de mierda de su primer día en Eden le recordaba cada vez que la veía.

Demetrius monopolizaba el amor de sus padres sólo por ser el primer hijo.

Damian llegó a odiar a su hermano y se lo contó a Anya uno de esos días en los que estudiaban en la biblioteca. Anya fue de las pocas personas, o mejor dicho la única, con la que habló sobre su nula relación con Demetrius, ella lo había escuchado atentamente mientras los apuntes de historia esperaban por ser leídos. Fue extraño abrir su corazón y mostrar su vulnerabilidad a Anya, ella era la chica que le gustaba desde que tenía seis, la chica con la que hasta hace unos años discutía sin parar, la chica que entonce lo ayudó a darse cuenta que su hermano no era el culpable de que sus padres lo dejaran de lado, gracias a ella fue a hablar con Demetrius.

Su hermano se había sorprendido cuando lo vió del otro lado de su puerta en los dormitorios de Eden. Damian estuvo nervioso todo el tiempo en que se mantuvo sentado en la silla del escritorio de Demetrius.