number five.

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—¿Por qué estas tan apurado?—. Mis ojos volaban como los pies de Louis lo hacian. Iba para aquí y luego para allá, tratando de encontrar lo que sea que estaba buscando.

—El jefe me dio una hora más—. Negó con la cabeza—. Mí mamá me matará si llegó tardé a la cena-. Sus manos tomaron una caja, y la movió a otro lugar.

Reí mientras lo veía tomarse el pelo con frustración, sin saber que hacer. Era tan guapo cuando lo hacia. Debería poner eso en alguna nota.

—Tranquilo, Louis. Hacer las cosas rápido no te ayudará a que la hora pasé como un trueno.— Sus pies pararon y sus labios se fruncieron para después mirarme.

—Tienes razón, es que odio estar aquí atrás en el empaqué. Prefiero estar en la caja—. Rodó los ojos y me levante, caminado hacia él.

—N-no es tan malo, quiero decir, estamos aquí solos. Sin nadie que...nos vea.

—Tienes razón—. Mordió su labio y mí corazón empezó a latir con más fuerza. Oh dios mío, este hombre iba a matarme.—Alguien puede estar en su celular sin hacer nada todo el día, y seguiría teniendo paga.— Sonrío y sacó su celular del bolsillo.

Casi.

—Louis, deja ese celular y ponte a trabajar—. Rodeé los ojos mientras tomaba una caja y recordaba todas las veces que mí madre me decía aquéllas palabras.

***

Abrí el casillero que Louis usaba últimamente para guardar su mochila. Mi mirada estaba en todos lados, asegurándome de que nadie estuviera en la habitación. Abrí una de las pequeñas bolsas de la misma y saqué la nota de mí bolsillo, y antes de que Louis llegará, la metí en su mochila y cerré esta, como si nadie nunca la hubiera tocado.

Suspiré con una sonrisa en mí rostro mientras tomaba mí bolso que estaba con los otros y di un pequeño saltó en mí lugar cuando escuche la puerta abrirse.

—Por fin se acabo el trabajo—. La voz de Louis se metió a mis oídos como el sonido más hermoso que alguna vez he escuchado.

—N-no llegues tardé a casa. O tú mamá te matará—. Río mientras abría el mismo casillero que yo había abierto hace unos minutos.

—Tienes razón. Siempre tienes razón—. Volví a reír y antes de que pudiera decir algo, grito.—¡Hay otra nota! ¡La chica dejó otra nota!—. La emoción en su rostro me hizo sonreír. Pensar en que a él le gustaban mis notas me hacia sentir realmente feliz. Al punto de querer llorar. Se acercó a mi con la nota en su mano y una sonrisa en su cara.—¿Sabes lo qué significa? Mí admiradora secreta trabaja en el mismo lugar que yo.—Fue en ese momento cuando sentí mi corazón parar y mis ojos ya estaban abiertos como platos. Entonces mi sonrisa se borró de mi cara y ahora enserio quería llorar.

—Louis yo creo que...

—¿Quieres leerla? Anda, hay que leerla juntos.—Estaba apuntó de decir algo, no quería que él descubriera nada todavía, pero todo mí ser se desconcentro cuando sentí sus calidas manos tomar las mias y jalarme hasta la banca que estaba en medio de todos los casilleros.

Sus manos estaban calientes y suaves. Un pequeño nudo se formó en mí estómago y dejé de respirar por unos segundos que parecieron horas.

Cuando retiro sus manos de las mías, el nudo en mí estómago desapareció y mí cuerpo empezó a temblar un poco. Sus ojos miraron a los míos con discreción y una sonrisa estaba dibujada en su bello rostro.

Desdoblo la pequeña nota y antes de comenzarla a leer dijo;

—No estoy seguro porque, pero estoy nervioso.— Una carcajada salió de su boca y sentí mis piernas temblar por el hermoso sonido que su risa daba.

—¿Por qué no la lees en voz alta?—. Le sugerí y asintió.

Nota #5
"Querido Louis,

¿Qué es lo que me haces? Mí corazón late con demasiada fuerza cuando te veo y no puedo para de sonreír. Puedo sentir mis mejillas enrojecer y todo mí cuerpo temblar. ¿Ése es el sentimiento del amor? Porque Louis, estoy completamente enamorada de ti.

Con mucho amor,

Tú admiradora secreta :)"

Cada palabra que leía, mí respiración era cada más fuerte y cuando vi sus ojos con un toqué dentro de ellos, pude sentir algo en mí pecho que era increíble. La pequeña sonrisa en su rostro me hacia sentir feliz, como nunca antes había estado.

—Ella debe ser increíble.—Fue lo único que dijo, dejándome sin palabras. Y después de uno minutos de silencio, dijo; —Quiero saber quien es..., necesito conocerla.—Sus ojos regresaron a los mios y éstos tenían una pisca de desesperación.—Necesitó que me ayudes, Hayley.—Se acercó a mi y tomó mis manos, de nuevo.—¿Me ayudarás, cierto?

¿Qué se suponía qué debía decirle? ¿A quién debería buscar exactamente? ¿A mi? Su admiradora secreta. No podía decirle la verdad, aunque tenía que hacerlo. Tengo que decirle la verdad. Suspiré.

—Louis, yo...—El sonido de la puerta abriéndose me interrumpió y ambos volteamos a mirar quién hacía este.

—¿Hayley?

—¿Summer? ¿Q-qué haces aquí?— La sonrisa de la rubia creció cuando miró nuestras manos entrelazadas y entonces, cuando Louis lo notó, las soltó de inmediato y se separó de mi para caminar hacia Summer.

Joder, ¿por qué tenía que llegar?

Seguí a Louis, quién iba directo hacia ella y cuando estaba a unos cuantos paso, tomó su mano y besó la misma. Como un caballero. Rodee los ojos.

Miré a mí hermana sonrojarse y a Louis sonreír como antes.

Fruncí el ceño, ¿qué?

—¿No me presentarás a tú amiga, Hayley?—. La voz de Louis interrumpió mis pensamientos.

—Ella, uh, ella no es...—. Miré a ambos, y un sentimiento de celos atacó mí pecho.—Louis, ella es mí hermana, Summer. Summer, él es mí mejor amigo, Louis.—Mí hermana sonrío, todavía más, con sus hoyuelos en cada una de sus mejillas.

¿Por qué tenía que ser tan hermosa?

—Hola linda.—Louis dijo, para después, guiñarle un ojo.

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(N/a):
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Todo se pondra más bueno desde ahora.
Siento mí ortografía.
Los quiero(:
|Editado|

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