When You Cry Ángel... An angel smiles again (Zhoumi y Leeteuk}

capitulo veinticuatro

🌹✨"Tú eres la única capaz de derretir mí corazón, en un mundo tan frío cómo este"🌹✨

Estoy aburrido Heemin solo me dice que debo ser coqueto y que debo ponerme ropa sexy. Jamás he usado eso. Suspiró y veo que ya es más de media noche.

-Debo irme. Félix me esta...

-Esta bien pato. Te llevo pero antes ten-dice dándome una bolsa llena de ropa sexy. Mi cara se volvió roja y suspiro..

-Pero

-Despues me lo agradeces. Ahora vemos -dice muy feliz. No sé si deba agradecerle por hacer el ridículo....pero creo que sí es con Zhoumi estará bien. Se que jamás me va a lastimar lo sé..ni me dijo bligara a nada que no quiera .

(Narra Zhoumi)

Estoy muy nervioso. Casi media noche y aún no ha regresado. Félix se durmió con Hyunjin. Se que mi angel sería incapaz de irse y dejar aquí a su bebe. Muerdo mis labios y suspiro. Escucho ruidos afuera. Pero no les tomo importancia. Levanto la mirada al escuchar la puerta abrirse y me incorporo de inmediato al verte entrar en el dormitorio, se te ve nervioso e inquieto, justo como yo estoy ahora. Nos miramos con timidez cuando cierras la puerta a tu espalda y una sonrisa nerviosa cruza tu sonrojado rostro. Se que pocas veces tendré la oportunidad de verte comportándote así, por lo que mis nervios iniciales disminuyen un poco. Nos acercamos lentamente, como dos adolescentes en su primera noche juntos que no saben como actuar. Técnicamente es nuestra primera vez, ya que hoy dejaras ese miedo de estar con alguien íntimamente. y es por eso que sentimos esta nueva sensación, esta especie de miedo a lo que se avecina, un miedo irracional ya que ambos sabemos lo que sucederá entre estas cuatro paredes y, por experiencia propia, puedo asegurar que es muy placentero. Nada a lo que haya que temer; pero es algo que no podemos evitar.
Acaricio tus coloradas mejillas apenas con las yemas de mis dedos, recordando como llegamos a esta situación mientras juntamos nuestros labios en un beso dulce y superficial que vamos profundizando con ternura, ese sentimiento que guardas especialmente para mí. Te estuve esperando durante horas. Aquella cita con Heemin era importante para ti. Aunque me gustaría saber de qué hablaron,, tal vez algo cursi para esta noche, no lo sé. , Aunque a decir verdad, yo esperaba ansioso ese encuentro por el tiempo que llevas aquí. Cada noche soñaba con este momento. No deseaba hacerte daño. Estába esperando a que tú estuvieras listo así como yo. Las horas que estuviste con Heemin fueron inmesas. Eran las ganas de volver a besarte, de poder abrazarte con libertad lo que me impulsaron a esperarte durante horas y cuando apareciste no me enojé por tu tardanza, es comprensible ¿o tal vez no? Igualmente no puedo enfadarme con la persona a la que más amo y me lance a tus brazos desesperado por sentir el contacto de tu piel. No rechazaste el beso, pero tampoco mostraste interés en querer avanzar más y yo me separé extrañado. Tal vez te estoy obligado demasiado.

-¿Pasá algo Ángel?.

-N,no Zhoumi...solo que tengo miedo.

-Si tienes miedo. No haré nada que tú no quieras. Te lo prometo -digo sonriendo.

Una promesa vale más que cualquier cosa. Tampoco deseo lastimarte ni hacerte daño. Aunque se que está es una oportunidad de oro. La única que tengo para hacerte mío y hacerte ver qué jamás te haré daño. Deseo estar contigo siempre y jamás hacerte daño. Leeteuk sonrió y ahora beso con delicadeza tus labios intentando no mostrar demasiada impaciencia por poseerte. Por hacerte mío está noche. Los nervios te hacen actuar de forma distinta esta noche, te dejas hacer, descolocado por estas nuevas posiciones, tenso imaginando lo que vendrá pero, extrañamente, me excita mucho más tener el control, lo descubrí la primera vez que te dejé temblando de placer ese di ma que leíste el libro de Heemin. Aunque las cosas hayan cambiado, aun puedo conseguir ese efecto solo con mis boca. ¿Conseguí distarte de todo pensamiento? Desnudándote con lentitud, saboreando tu piel, devorando tus labios con hambre. Te mantienes quieto, sin poder borrar de tu mente la promesa, son lograr disfrutar de las sensaciones que te ofrezco, pero no me rechazas.
Es inevitable que te duela al principio, más aun con lo tenso que estas y te acabo regañando como si fueses un niño pequeño, arrancándote una carcajada en el proceso.
Por el grito de dolor que soltaste cerca de mi oreja, deduzco que habré perdido audición en ese oído, pero estar dentro de tu cuerpo es algo único. Si alguna vez pensé que hacer el amor contigo era espectacular, ser uno contigo me lleva directo de cabeza a la locura. Todo rastro de ternura y delicadeza se evapora reemplazándose rápidamente por pura pasión y lujuria cuando toqué ese punto nervioso que hizo tus gemidos más escandalosos. Aunque al principio me resistía, acabé dejándote marcar el ritmo, verte disfrutar aquello me excito aun más si eso era posible e hizo de esta noche de pasión un recuerdo inmejorable. No es por el acto en si, sino por lo que ello significa, Por fin confías en mi, tanto como para regalarme tu virginidad, así es angel. Para mí sigues siendo virgen, no me importa lo que el te hizo, ya que desde hoy serás solo mío. Te entregaste por completo. Venciste tus dudas, miedos y prejuicios por y para mi. Y eso me hace el hombre más feliz del mundo. Besos, caricias, y pasión solo se escuchan en la habitación. Tus uñas clavadas en mi espalda. Mis labios besando y marcando tu piel de angel. Tu ojos cerrados, tu boca entre abierta te hacen ver tan lindo que me dan ganas de hacerte mío y otra vez. Pero se que este es el primer paso que diste. Mis labios bajan hasta tus hombros. Beso tu hombro lastimado y sueltas un jadeo.

-¿T-te lastime angel?.

-N-no a-amor...

-¿C-como me dijiste?-mi corazón latio cómo un sapo. Leeteuk sonrie y acaricia mi mejilla con su mano. Cuando me dijo te amo sentí una felicidad enorme. Leeteuk sonrie y me da un beso.

-¡Mgh! T-te dije amor... Zhoumi...Mgh no te muevas -dice entre jadeos. Rio y me vuelvo a mover. Leeteuk enrolla sus piernas a mi cintura y se pone rojo. Sonrió como idiota y lo beso. Jamás pensé que estar con el fuera tan dulce. El miedo que tenías yo haré que se vaya. Ángel naciste para ser feliz. No para llorar. Naciste para estar conmigo. Afuera está lloviendo, pero aquí solo se escuchan nuestros jadeos, y nuestros gemidos.. Ángel te amo demasiado... Ahora, mientras nos recuperamos del orgasmo, te observo. En tu sonrojado rostro una rádiate sonrisa, el pecho desnudo y perlado de sudor bajando y subiendo intentando acompasar tu respiración, los ojos cerrados como si estuvieses grabando en tu memoria cada segundo de lo acontecido en tu vida, y nuestras manos entrelazadas. Por fin puedo decir que eres mío. Y jamás te dejare ir .. nuestros labios se volvieron a unir. Está noche será la más importante de mi vida....

(Continuará)