Can you let me love you? - Luckity

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Pov Narradora:

Se quedaron dormidos en el sillón.

Los rayos de sol alumbraban levemente la cara de Quackity el cuál se empezaba a despertar.

-¿Dónde mierdas estoy?- dijo el pelinegro al levantarse en una casa que no era ni la suya ni la de Rubius.
Los recuerdos de la noche anterior se hicieron presentes sacando un leve sonrojo de su parte. Volteando al sillón en dónde estaba se encontraba Luzu, aún dormido con el cabello desordenado.

A los ojos de Quackity se veía muy bonito, tuvo un leve impulso por acariciar su cabello, sus manos se movieron solas y cuando se dió cuenta ya estaba acariciando el cabello del contrario, Quackity en un susurro dijo -Es muy suave- siguió acariciando el cabello castaño por un par de minutos hasta que un quejido por parte del contrario llegó a sus oídos.

-¿Quackity?- dijo levemente el oji rubí, abriendo lentamente los ojos, viendo a un muy sonrojado chico pelinegro.
Se despertó debido a que siento leves caricias en su cabello -HOLA LUSUU- dijo el contrario tratando de ocultar su nerviosismo.

Después de unos minutos Quackity y Luzu estaban hablando muy animadamente en el sillón del último mencionado hasta que su conversación se vio interrumpidos por unos bruscos toques en la puerta.

Luzu se paró del sillón dirigiéndose a la puerta. Al abrirla se encontraba nada más y nada menos que Rubius -Hombre Luzu!- saludo el chico oso a su contrario -Hola Rubius- Respondió el castaño -¿No está Quackity por aquí?- dijo viendo hacia dentro de la casa del castaño.

La sonrisa de Quackity se desvaneció al oír esa voz y su cuerpo se tenso, sintiendo unas inmensas ganas de llorar mientras empezaba a temblar.

-Oh si, está aquí- dijo Luzu amigablemente abriendo la puerta dejando ver al chico pelinegro sentado en su sillón.

Pov Quackity:

A penas Luzu abrió la puerta pude ver a aquel hombre, al hombre que me estaba haciendo vivir un infierno.

Su sonrisa era inexplicable, de oreja a oreja, mostrando sus colmillos y sus ojos puestos en mi con un enojo totalmente aterrador, sabía que me esperaba algo muy malo al irme con el.

-Hola Quackity- Dijo Rubius con enojo, uno que solo yo pude notar -H-Hola Rubius- Dije tartamudeando. Estaba temblando, mi respiración comenzaba a fallar de tan solo pensar en todas las horribles cosas que me haría cuando estuviéramos solos.

-Vamos a mi casa, ayer dejaste tu sudadera- Dijo el con una amabilidad totalmente fingida, ví la cara de Luzu con confusión -Ok, vamos- No me podía negar o me iría peor, me pare de aquel cómodo sillón y me acerque a Luzu -Adios Lusu, te quiero- Le dije en el oído al castaño depositando un beso en su mejilla por si era la última vez que lo veía.

-Vamos- le dije a Rubius- con nerviosismo mientras veía como Luzu cerraba la puerta lentamente, al alejarnos un poco de la casa de Luzu, comenzó mi pesadilla.

Rubius me agarraba de la muñeca fuertemente haciendo que sacará un gemido de dolor -Te he dicho que NO puedes salir de la casa sin mi- dijo Rubius- apretando cada vez más fuerte mi muñeca.

Antes de que pudiera responder sentí un golpe en mi mejilla, caí al piso viendo a aquel hombre -Eres una zorra de mierda, ¿Lo sabías?- Dijo Rubius- volviendo a golpearme repetidas veces, solo me limitaba a llorar y pedir que parará, aunque supiera que no iba a parar hasta dejarme inconsciente o en muy mal estado.

-PARA POR FAVOR!!- grite esperando que me hiciera caso, no sirvió de nada solo me pegó en la boca haciendo que sangrara aún más.

Pov Narradora:

Después de 5 minutos Rubius paro de golpear a su contrario para susurrar en su oído -Espero aprendas la lección mi amor- dijo para cargar al chico el cuál estaba a punto de quedar inconsciente.

Varios minutos después llegaron a la casa del oso. Rubius dejo a Quackity en el sillón yendo por un botiquín, para curar las heridas del patito.

Estaba destrozado, su ropa estaba rasgada, su cara llena de golpes, su boca ensangrentada.

-Perdón patito, juro que no volverá a pasar- llegó Rubius con el botiquín -Solo me moleste por verte con Luzu, pero prometo que no pasar de nuevo ¿Ok?- le dijo el contrario.

Minutos después Quackity estaba completamente curado físicamente. Mentalmente estaba hecho una mierda

-Toma comida, te la mereces- Le dijo Rubius a Quackity entregándole un plato de sopa y un poco de carne, el más bajo solo se limito a comer.

-Voy a salir quédate aquí- le dijo Rubius a Quackity, el cuál solo se limito a asentir oyendo el sonido de la puerta cerrarse.

Pov Quackity:

Me sentía de la mierda, mi cabeza dolía fuertemente al igual que toda mi cara cuerpo, fui al baño a vomitar, no quería engordar más de lo que ya estaba.

Me dispuse a tomar una ducha, cuando estaba completamente desnudo, me ví al espejo, ví marcas en mi abdomen, cuello, brazos, muslos, prácticamente en todo mi cuerpo, de tan solo verme sentía 𝑨𝑺𝑪𝑶.

Me veía horrible ¿Cómo es posible que Rubius me ame con tan mal aspecto que tengo? Me pregunte entrando a la ducha.
Me dolía moverme, vaya tan solo alzar mis manos para alcanzar el shampoo dolía.

Después de una larga ducha me puse una sudadera blanca de Rubius- que cubriera todo mi cuerpo unos pans negros holgados, unos converse y un gorro, quería salir a dar una vuelta, Rubius regresaría en muchas horas.

Salí de la casa sintiéndome una completa mierda, pensado en la noche anterior, me sentía completo con Luzu, pero solo es mi amigo lo quiero como amigo, si fuera amor sentiría lo mismo que con Rubius ¿No?

Fui a un hermoso lago, el atardecer se veía hermoso, habían muchos patitos y la calma en el ambiente era hermosa.

Pov Narradora:

¿El amor era tan infeliz? ¿Dolía como le dolía a el? O era el típico sentimiento de películas.

El quería el típico amor cliché de las películas, solo atravesaban mínimos problemas a lo largo de la relación, para finalmente obtener una relación estable y duradera.

Quería saber que se sentía que le dijeran palabras bonitas, regalos, cartitas, quería un amor tan cursi y empalagoso que te den ganas de vomitar de lo dulce que es.

Pero sabía que su realidad era otra, solo eran películas, las cuales ocultaban la cruda y triste realidad sobre el amor o eso creía el.

Sin embargo un chico castaño lo observaba de lejos admirando su belleza. Los lunares esparcidos por su cara, su rebelde cabello azabache, sus hermosos y brillantes ojos.

Se estaba debatiendo seriamente si ir a hablarle, no quería quedar como un obsesivo de mierda, pero realmente el sabía que nunca podría estar con un chico como aquel patito.

Por más que quisiera tal vez nunca podría darle el amor que se merecía, porque ¿Quien quisiera estar con el? Solo habían recuerdos fugaces de su pasado, pero no tenía que esforzarse para saber que una pareja lo había traicionado.

Simplemente eran dos chicos huyendo de lo que sentían, mientras se quitaban la oportunidad de conocer lo que era la verdadera felicidad, el verdadero amor.

¿Pero eso cambiara pronto, no es así?
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HOLAAAA, espero les guste este capítulo honestamente me esforcé escribiendo esto y me enoje un chingo con el pinche Rubius.

En fin, espero les haya gustado este capítulo, me ayudarían mucho votando y compartiendo la historia. ♡

Hasta el próximo<33