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Pasaron unos días y Momo seguía sin hablar con Nayeon, quien odiaba la situación, pero sabía que lo merecía. Nayeon salió de la casa a las siete para ir a la universidad y caminó hacia el frente del bar de Jeongyeon, recordando cuándo abrió primera solo para ella. Sin embargo, cuando llegó, vio algo que no quería ver. El bar estaba abierto y adentro estaban Jeongyeon y Sana.

-La inauguración será este sábado- le dijo Sana.

-Todavia no lo puedo creer

-Te mereces toda la felicidad de este mundo, Jeongyeon. Estoy tan contenta de haberte encontrado

-Yo también. Sin ti nunca podría haber hecho realidad mi sueño. Sabes, he tenido esta aspiración durante años. Mi primer sueño fue tener un bar y mi abuela creía mucho en mí. Lamentablemente murió antes de que pudiera abrirlo. Ella me llamaba "YeonYeon", por eso el bar se llama así.

-Qué hermoso nombre, como tú, YeonYeon. Me pregunto como es posible que alguien como tu no tiene novia o novio

Jeongyeon miró hacia abajo. -La tenía pero terminó muy mal

-Lo siento- Puso su mano sobre la de Jeongyeon. -Espero que puedas encontrar a alguien que te merezcas

-Yo también lo espero- dijo, mirando a Sana a los ojos.

Nayeon, por supuesto, no sentía nada, pero lo había visto todo y esos gestos y miradas la estaban molestando. Actuó por impulso y entró en el bar.

-Lo siento, pero todavía estamos cerrados- dijo Jeongyeon.

-Sin embargo, siempre estuviste abierto en este horario para mí

-Nayeon...

Sana no entendía muy bien lo que estaba pasando. Nayeon solo le había dicho que quería darle el restaurante a Jeongyeon, pero parecía que las dos se conocían muy bien.

-Escuché sobre el restaurante. Felicidades- dijo Nayeon sonriendo, escondiendo su enfado.

-Gracias. Ella es Sana, la que lo hizo posible

-Encantada de conocerla, Im Nayeon- dijo la chica extendiendo su mano hacia la japonesa, quien la sacudió confundida por la relación entre ambas. -¿Habrá una inauguración?

-Sí- respondió Jeongyeon.

-Entonces nos vemos allí

-Sana, discúlpame un momento, ¿puedo hablar con Nayeon?

-Claro, adelante- dijo la japonesa. Me tengo que ir de todos modos. Te veo luego

-Adiós

¿Luego? Esa situación no le gustaba nada a Nayeon.

-Yo no te invité a la inauguración

-Pero iré de todos modos. Después de lo que te hice, quiero verte sonreír

-Mientras estabas con eso, una completa extraña pensó en hacerme sonreír de nuevo- dijo Jeongyeon en un tono frío.

-Jeongyeon, sé que me equivoqué y nunca me lo perdonaré. ¿Podemos al menos ser amigas?

-¿Amigas? No sé, Nayeon

-En memoria de los viejos tiempos. No podemos tirar nuestro pasado así

-Tú lo hiciste

-Es cierto y me equivoqué. Te juro que haré lo que quieras. Te lo ruego

-¿Todo?

-Todo

-Lo primero que quiero que hagas es disculparte frente a todos: frente a mí, tus padres, Momo, Dahyun, Chaeyoung y Mina. Debes sentirte tan humillada como yo al saber que soy inferior a un gusano como Jeon Jungkook

YeonYeon|2YEON|ESPDonde viven las historias. Descúbrelo ahora